Sergio Silva

Por estos días el comercio intenta revertir y aumentar en lo que queda de este año sus ventas con las fiesta de Navidad y Año Nuevo, luego de dos meses -que a raíz del estallido social- han sufrido una disminución en sus ganancias tanto para pequeños como grandes empresas.

Sin embargo, quienes también aprovechan estas fechas, son dueñas de casa o comerciantes ambulantes que logran obtener un ingreso extra para sus hogares de una manera simple y sencilla, como lo es envolviendo regalos navideños.

Son cientos las personas que durante estos días recorren la ciudad buscando algún "engañito" para ese amigo secreto que le tocó en su lugar de trabajo o bien el obsequio para algún integrante de la familia que quedó pendiente.

Sea cual sea el motivo, muchos se han sorprendido que muchos locales ya no entregan bolsas o simplemente no tienen personal para envolver los obsequios. Por ello, la solución hoy se puede encontrar incluso a la salida de las tiendas.

Autorización

Por estos días se puede apreciar al caminar por la arteria de Ramírez, desde Manuel Antonio Matta hasta plazuela Yungay, los puestos de personas que se dedican exclusivamente a dar la solución al problema para quienes carecen de habilidades en paquetería por medio de un aporte voluntario.

Para Catalina Silva de 21 años, esto ya es como tradición de ayudar a las personas a envolver sus regalos.

"Desde que tenía 12 años siempre venía con mi mamá y ahora estoy a cargo de este espacio. Como todo, hay días buenos y no tan buenos, pero siempre nos vamos con ganancia a la casa", detalló.

Para hacer uso de ese espacio en la vereda al llegar a Cochrane tuvo que sacar un permiso, el cual exhibe cada vez que pasa algún inspector municipal a fiscalizar, el que tuvo un costo cercano a los 5 mil pesos y que le da autorización para estar 15 días.

También hay otras personas que sólo se dedican a la venta de tarjetas o sticker para poner el nombre de la persona a la que irá dirigido el presente.

Es el caso de Nancy Reyes, la cual vive en el sector rural de Barro Blanco y se dedica sólo a vender este tipo de producto.

"Hay que buscar la forma de ayudar en la casa, mi marido no tiene un trabajo estable. Además esto lo vengo haciendo por años, y ya todas nos conocemos. Con tiempo sacamos nuestros permisos, pero no falta quienes se las tratan de dar de listo y quieren vender sin permiso. Sólo generan problemas y uno no está para eso. Carabineros y los inspectores se han portado bien con nosotros", detalló.

Papel de regalo

La tradición de envolver el regalo en un papel navideño, a muchos les permite mantener el misterio del obsequio, ya que también está la alternativa de entregarlos en una bolsa de papel o cartón, o bien en una caja navideña.

Según María Muñoz de 54 años, quien lleva bastantes temporadas envolviendo regalos, las personas mantienen viva la tradición del papel.

"Es una costumbre que mantienen las personas mayores de usar el papel, ya que los jóvenes optan por lo más fácil, sin embargo la tradición permite mantener el misterio del obsequio a entregar y ver los rostros de asombro de quienes lo reciben", comentó la vecina de población Manuel Rodríguez.

En lo personal, ella llega todas las mañanas al centro en su triciclo y se instala con su mesa, no sólo con el papel y las bolsas, también con las tarjetas y el scotch (cinta adhesiva) que también es comprado por las personas.

"Hay quienes piden que le envuelvan los regalos, pero hay otros que te compran todo y optan por hacerlo en la tranquilidad de su casa, por ello vendo cintas, tarjetas y el scotch (cinta adhesiva). Estamos recién comenzando y esperamos que nos vaya bien", expresó.

Desde el sector de Villa Atlántico, Ingrid Mancilla aprovecha estos puestos ambulantes para envolver dos regalos que adquirió en el comercio para esta Navidad.

"Uno de ellos es para mi hija y el otro para una sobrina. Así que aprovecho esta oportunidad para que ellos me los envuelvan y así a la vez le entregó una porte en dinero por su trabajo. Yo en lo personal mantengo la tradición del papel de regalo", sostuvo.

Durante los últimos 6 años, Marcia Rosas llega al centro y realiza este trabajo que apoya a muchas personas.

"Esto nos permite trabajar por varios días, y hay que aprovechar estas fiestas para poder tener un ingreso. La elegancia de algunos regalos pasa por las bolsitas de papel o cartón, pero hay otros tradicionales que siguen con el papel. Nosotros invertimos en tener una variada gama de productos para los osorninos", comentó la vecina de Francke.

El municipio osornino autorizó a 67 comerciantes para desarrollar el comercio de artículos navideños o puestos que se dediquen a envolver regalos. Estas personas son fiscalizadas por de inspectores municipales.

El permiso tiene un valor cercano a los 5 mil pesos y los faculta a estar desarrollando las labores en el perímetro céntrico de la ciudad.

Además se indicó que entre el 23 y 24 de diciembre funcionará el bulevar en la extensión de calle Ramírez.

"Es una costumbre que mantienen las personas mayores de usar el papel, ya que los jóvenes optan por lo más fácil"

María Muñoz, Comerciante

"Aprovecho esta oportunidad para que ellos me los envuelvan y así a la vez le entregó un aporte en dinero por su trabajo"

Ingrid Mancilla, Vecina de Osorno

"La elegancia de algunos regalos pasa por las bolsitas de papel o cartón, pero hay otros tradicionales que siguen con el papel"

Marcia Rosas, Comerciante

"Como todo, hay días buenos y no tan buenos, pero siempre nos vamos con ganancia a la casa"

Catalina Silva, Comerciante

$5 mil aproximado es el valor del permiso municipal que les da la garantía a las personas para trabajar de manera tranquila en el centro de Osorno

10 Am comienzan a llegar hasta el centro de Osorno los comerciantes, quienes se mantienen hasta cerca de las 20 horas dependiendo el movimiento en las calles.