El exsubsecretario del Interior Manuel Monsalve solicitó gestiones de la PDI luego de reunirse con la subalterna que lo denunció por violación. En esa cita, ella le habría dejado claro que no entregó su consentimiento para mantener relaciones sexuales la noche del 22 de septiembre, acusación que generó un escándalo en La Moneda y terminó con la renuncia de la autoridad.
Según publicó ayer el medio Ciper, luego del ataque sexual que se habría perpetrado tras una cena en un restaurante peruano del centro de Santiago, la mujer sostuvo al menos dos reuniones con la exautoridad y, en una de ellas, la primera semana de octubre, le señaló que lo sucedido no contaba con su consentimiento. Tras ello, recibió una licencia médica.
Esto fue confirmado por un colega de la víctima, quien declaró ante la PDI que después del hecho la mujer se reunió unas dos o tres veces con Monsalve para tratar temas laborales, pero que en una de ellas tocaron el tema de lo ocurrido en el Hotel Panamericano y la ausencia del consentimiento.
Esto también lo habría declarado la denunciante ante el Ministerio Público, de acuerdo a Ciper, quien también aseguró que Monsalve le ofreció disculpas y le señaló que no se acordaba de lo que había pasado.
Este mismo testigo relató que la propia denunciante les contó que el exsubsecretario la citó en al menos dos oportunidades a solas para reuniones de trabajo.
Posteriormente, el 10 de octubre, alrededor de una semana después de la mencionada reunión con la denunciante, Monsalve pidió a Inteligencia de la PDI que activara diligencias investigativas, ya que, a su juicio, no recordaba lo que pasó, y temía haber sido víctima de una intervención de terceros y de sufrir una posterior "extorsión".
Sin embargo, en concreto, la gestión policial fue solicitada cuando Monsalve ya sabía que podía ser, eventualmente, denunciado, lo que podría configurar un abuso de las facultades de su cargo.
Tohá en problemas
El caso ha generado serios cuestionamientos al Gobierno y especialmente a la ministra del Interior, Carolina Tohá, superior directa de Monsalve y a quien se acusa de caer en contradicciones al referirse a detalles como cuándo se enteró de la denuncia por violación y cuándo se comunicó con el exsubsecretario.
Pese a que la jefa de gabinete había dicho que recién se comunicó con el hoy imputado el jueves 17 de octubre, cuando él presentó su renuncia, en las últimas horas se reveló que habló con él la noche del martes 15, cuando se presentó la denuncia, porque la PDI y la Fiscalía no encontraron al exsubsecretario en el hotel Panamericano, donde tenía fijada su residencia en Santiago.
Ella explicó que "lo que sucedió el martes es que me solicitaron llamarlo para comunicarle que se trasladara al hotel, solicitud que planteó la PDI para que yo le señalara a Monsalve porque se requería su presencia para unas diligencias de la Fiscalía".
Esto fue reforzado por el actual subsecretario del Interior, Luis Cordero: "Lo que hizo la ministra no fue avisar sobre una diligencia, sino instruir al exsubsecretario porque debía compadecer en el hotel donde se encontraba la PDI y el Ministerio Público. No fue un privilegio sino un mandato para que Monsalve compareciera en diligencias que se estaban realizando".
Sin embargo, esta versión no convence a la oposición, cuyas bancadas evalúan presentar una nueva acusación constitucional contra Tohá, anuncio que llegó apenas dos semanas de que la ministra sorteara un libelo en su contra por la crisis de seguridad que vive el país.
La diputada Joanna Pérez (Demócratas) afirmó que "la responsable política es la ministra del Interior, de ella dependía la subsecretaría. Yo creo que efectivamente el Gobierno se está arriesgando a que presentemos una acusación constitucional, y le he pedido a las distintas oposiciones que nos articulemos y lo vamos a hacer".
Relevan a escoltas de exsubsecretario
Cuatro de los seis escoltas de la PDI que se preocupaban de resguardar al exsubsecretario del Interior Manuel Monsalve fueron relevados de sus funciones. La actuación del equipo de seguridad policial asignado a la exautoridad entre los días 22 y 23 de septiembre, fechas en las que sucedieron los hechos investigados por la Fiscalía, ha estado en entredicho desde el comienzo del caso, pues no estuvieron junto a Monsalve durante la ocurrencia de los hechos que dieron pie a la acusación.