Pequeños agricultores huilliches se unen en torno a la siembra y cosecha de papas
PROVINCIA DEL RANCO. Un grupo de 14 familias, pertenecientes al PDTI de Río Bueno, trabajaron para rescatar la tradición ancestral comunitaria. Cultivaron variedades de papa michuñe negra o quiche, junto a una comercial.
Positivos resultados mostraron los profesionales que ejecutan el Programa de Desarrollo Territorial Indígena (PDTI) de Río Bueno, que favorece a 250 familias campesinas, repartidas en 24 grupos, que se han integrado para aprender nuevas técnicas y enseñanzas que los favorecen en su trabajo diario, en contacto con la tierra.
Elaboran sus programas anuales con el apoyo del Instituto Nacional de Desarrollo Agropecuario (Indap) para beneficiar a las familias integrantes de las comunidades huilliches, esfuerzo que ha sido reconocido por los usuarios, que elogian la paciencia y dedicación de los profesionales, entre ellos María Fernanda Hernández y Mauricio Martínez.
Catorce familias de la comunidad Ayilén, del sector Santa Isabel, trabajaron durante toda la jornada en la cosecha de papas para el consumo familiar, sembradas en un terreno facilitado por uno de los integrantes de esta asociación huilliche.
Colaboración
Explicaron que en cada temporada uno de ellos facilita una parte de su parcela, un retazo de 2.000 o 3.000 metros cuadrados, para efectuar la siembra, aprovechando para instruirse acerca de la mejor manera de obtener resultados favorables.
En ocasiones esto no es posible, porque las semillas no han sido certificadas, lo sembrado ha sido deficiente, carece de irrigación, condiciones climáticas desfavorables o bien parecen enfermedades como el tizón tardío, que afecta a este tubérculo.
El financiamiento de Indap se traspasa a los municipios para la adquisición de fertilizantes y semillas; cada integrante de la comunidad colabora en la preparación de la tierra, lo que se transforma en una excelente oportunidad para intercambiar experiencias y mejorar los lazos de convivencia entre vecinos.
Los 5 profesionales que integran la oficina del PDTI en la municipalidad de Río Bueno destacan los resultados positivos alcanzados en cada grupo en todos los sectores de la comuna, en especial de las mujeres, donde lo que se cosecha está destinado al consumo familiar.
Aprendizaje
María Fernanda Hernández indica que los vecinos aprenden técnicas de sembrado y el uso de los fertilizantes, algunos de ellos orgánicos que se consiguen a través de los bocashi o compost, efectivos aliados que influyen en una mejor y más sana producción.
Las variedades de papa michuñe negra o quiche, junto a una comercial, fueron los objetivos del grupo de 14 familias, pertenecientes al PDTI de Río Bueno, para rescatar la tradición ancestral de la siembra comunitaria, manteniendo las costumbres huilliches de antaño.
La ingeniero agradeció a la comunidad por su trabajo colaborativo, lo mismo que a Indap, que mantiene este programa de apoyo a pequeñas comunidades.
La presidenta de la comunidad Ayilén, María Garnica Unión, agradeció a las autoridades ancestrales, "que nos permiten trabajar en comunidad por varios años en recuerdo a las enseñanzas que nos dejaron nuestros ancestros, en cuyo honor sacamos la producción de la tierra", precisó.
Ernestina Compay, de la comunidad en el sector de Santa Isabel, indicó que el encuentro comunitario por la cosecha se transforma en una gran oportunidad de acercamiento que los hace trabajar con mucha alegría y agradecimiento.
Georgina Nahuelpán, en tanto, resaltó la posibilidad de compartir lo que se produce y agradeció el apoyo de los profesionales que los acompañan todo el año.
El lonco Luis Monsalve, integrante del Consejo de Loncos de Río Bueno, manifestó que siempre se espera más en el resultado final de las cosechas, aunque hay varios factores a considerar, sin embargo, lo que se genera en cada temporada es una enseñanza adicional.