Reforma Tributaria y arriendos
El dueño de la propiedad tendrá que declarar el arriendo percibido dentro de sus ingresos y tributar sobre esto. Hay personas que han creado pequeños imperios sobre la base del modelo de compra de propiedades.
Una de las novedades del proyecto de Reforma Tributaria del Presidente Boric es la posibilidad de rebajar de la base imponible, vale decir, de los ingresos personales, el monto pagado por concepto de arriendo, con un tipo de 450 mil pesos mensuales. Esta medida ha sido planteada como una ayuda a la clase media. Esto es una novedad, dado que, en nuestro actual sistema tributario, las personas estaban imposibilitadas de rebajar de sus ingresos gastos efectivos de vida, teniendo que tributar, prácticamente por los ingresos brutos.
Desde ese punto de vista, sí corresponde a una ayuda a la clase media, sin embargo, para que este gasto sea efectivo, el dueño de la propiedad tendrá que declarar el arriendo percibido dentro de sus ingresos, y, por ende, tributar sobre esto. Vale decir, no hay una franquicia real en esta medida, al contrario, puesto que, con esta medida, el Estado será más efectivo para cobrar impuesto por arriendos que actualmente no se declaran, colocando el incentivo en el arrendatario, el presionará al arrendador a declarar el ingreso para poder rebajar su pago de impuesto.
José Navarrete, director del Magíster en Tributación de la Universidad Andrés Bello, asegura que "hemos visto una cantidad importante de empresas de asesoría financiera, así como inmobiliarias, que incentivan la inversión en propiedades como una alternativa, realizada sobre un activo real, para crear patrimonio. En paralelo, las bajas tasa de interés que había en el sistema bancario, incentivaron la aparición de este tipo de inversionistas, amparados, además, en los beneficios del DFL2".
Hay personas que han creado pequeños imperios sobre la base del modelo de compra de propiedades para el arriendo, plantea Navarrete, pero el grueso de este tipo de inversionistas corresponde a personas de clase media, quienes, aprovechando las condiciones de mercado, han decidido invertir en un departamento para arriendo. En ese sentido, esta medida no apoya a la clase media, al contrario, puesto que es precisamente la clase media la que se verá mayormente afectada. Fuera del análisis dejamos a las inmobiliarias que también participan de esta industria del arriendo, puesto que estas sí tributan y desde este punto de vista su situación permanece igual. Esta es una de las medidas más polémicas de la reforma tributaria, por lo que habría que esperar como se debate en torno a ella en el Congreso.