El pasado jueves se conmemoró el Día de la Enfermería, en el aniversario de la precursora de la enfermería moderna y la creadora del primer modelo conceptual, Florence Nightingale.

Ella, durante 1853, participó en la guerra de Crimea en Europa. En esa oportunidad, a través de la observación y el análisis científico, llegó a la conclusión de que los heridos mejoraban si los ambientes clínicos tenían una adecuada higiene, cuidados continuos y lavado de manos frecuente. Recopiló toda la información, incorporó estadística y publicó los resultados ante la comunidad, dando origen a la enfermería como la conocemos hoy.

Según Carola Montecino, docente de la Escuela de Enfermería Universidad de Las Américas, la profesión ha tenido varios hitos en su crecimiento como disciplina. Por ejemplo, la apertura de escuelas de Enfermería en universidades del mundo, el reconocimiento legal de la profesión como gestores del cuidado, apertura de posgrados con maestrías y doctorados. Estos hitos han acompañado el fortalecimiento de la salud pública en el mundo, contribuido a la disminución de la mortalidad infantil, protección de la salud materna, coberturas de vacunación, vigilancia y control de infecciones y fomento de estilos de vida saludables.

Plantea Montencino, "para principios del año 2020 las enfermeras y enfermeros nos preparábamos para celebrar en todo el mundo los 200 años del natalicio de Florence Nightingale, sin embargo, durante ese año con el inicio de la pandemia por covid-19 tuvimos que trabajar intensamente en unidades de paciente crítico, hacer promoción de salud en las comunidades y vigilancia epidemiológica, liderar planes de vacunación y promover en la población la importancia de mantener ambientes limpios, cuidados continuos y el lavado de manos frecuente, igual como lo hizo Florence hace casi dos siglos".

El desafío que tienen las enfermeras y enfermeros es siempre trabajar por mantener la salud y el bienestar de las personas a lo largo del ciclo de la vida. Y esta conmemoración se vive de forma especial ya sea desde el hospital, comunidad, universidades, ministerios u organizaciones internacionales.

En abril se eligió para un segundo período a este abogado como presidente del gremio junto a una nueva directiva de excelentes cualidades humanas y profesionales, con los cuales deberemos impulsar nuestra agenda para los próximos años. Destaca la preocupación permanente sobre los servicios que entregará a la provincia el recién nombrado conservador de Bienes Raíces, don Víctor Hugo Quiñones, quien tiene la magna tarea de modernizar el servicio incorporando tecnología y eficiencia que permita superar un triste y oscuro pasado registral que todos queremos olvidar. Vayan a él nuestros parabienes y buenos deseos.

Otro asunto de vital importancia que afecta directamente a todos los habitantes de esta importante provincia es el acceso oportuno, ágil y expedito a la justicia, lo que pasa necesariamente por la instalación de la tan anhelada Corte de Apelaciones para Osorno. Este anhelo de larga data gremial ha sido desatendido sistemáticamente por todos los gobiernos a quienes se lo hemos planteado a partir de Ricardo Lagos en adelante, siendo dicho gobierno a nuestro juicio, quien más cerca estuvo de concretar nuestro merecido requerimiento. Lamentablemente Hacienda no estuvo dispuesta a efectuar el gasto pertinente para su instalación.

Resulta paradójico que sigamos dependiendo de la Corte del Calle-Calle en circunstancias que nuestra división política administrativa nos sitúa en la Región de Los Lagos y en este sentido pareciera más lógico y expedito depender de la Corte de Puerto Montt, cuyo Colegio Profesional está instando por la creación de una segunda sala que permita agilizar los tiempos de tramitación de las causas en forma considerable.

Creemos que esta discusión entre Colegios Profesionales vecinos y fraternos va a ser muy rica y relevante en propiciar decisiones político administrativas que nos permitan acercar la justicia a la gente, acortar los tiempos de tramitación y en especial, posibilitar la fiscalización efectiva y eficiente del superior jerárquico a los tribunales, notarías y conservadores de nuestra provincia.

Ciertamente con una Corte de Apelaciones instalada en Osorno, la deficiente gestión del anterior conservador de Bienes Raíces jamás hubiese durado más de un decenio al tener a sus órganos de control en la misma ciudad.

Confiamos en que este 2022 será muy auspicioso para el gremio y en especial para toda la ciudadanía de la zona.

José Manuel Baquedano, presidente Colegio de Abogados Provincia de Osorno