Cuarto retiro
El primer retiro del 10% de las AFP significó una ayuda para las personas en tiempos aciagos. Si bien todos reconocen que no es la mejor medida, ya que es simplemente decirle al ciudadano "hazte cargo solo", era lo que había en el momento.
Luego apareció el segundo y, posteriormente, el tercer retiro con la misma justificación utilizada para el primer retiro. No obstante, había un problema: la gente comenzó a quedarse sin ahorros y vio disminuida, en gran parte, su futura pensión. Aun así, en vez de analizar alternativas eficientes, se eligió nuevamente la misma tónica.
Llevamos cerca de un año desde que empezamos a hablar en el mismo lenguaje y todavía se sigue empleando el mismo argumento para validar el cuarto retiro. Ahora toca preguntarse, ¿no sería mejor que, por primera vez, se focalizara la ayuda para los sectores que sí lo necesitan y, asimismo, no afectar las pensiones?. Tristemente esto no ocurrirá porque es mejor crecer en popularidad y así mantener "la gallina de los votos de oro".
Daniel Soto
Ley corta de pensiones
No podemos terminar el presente Gobierno sin ningún avance en materia previsional, por lo que es urgente concretar una ley corta en pensiones que reúna todos los puntos donde sí existen acuerdos, como en las mejoras al pilar solidario, dejando la discusión de los temas más complejos para el próximo periodo presidencial.
Acuerdos como aumentar la cobertura del pilar solidario desde el 60% al 80% para cubrir a los pensionados de clase media, cómo también mejorar el monto de la pensión básica solidaria, son puntos que debieran cerrarse rápidamente para mejorar hoy las pensiones de quienes más lo necesitan y no esperar otros largos años en el tira y afloja político.
El pilar solidario nunca ha tenido ajustes técnicos para sus mejoras, sino por el contrario, toma el rol de herramienta negociadora para otros temas complejos, como el destino del 6% de cotización adicional.Eduardo Jerez Sanhueza
La casa de todos...
Nos acercamos al mes de la instalación de la Convención Constituyente y lejos han quedado aquellas promesas que hacían alarde de que la nueva Carta Magna sería fruto del diálogo constructivo, los acuerdos y que la Convención sería la "casa de todos" y estaría enfocada en resolver los problemas de aquejan a los chilenos.
Es más, en tres semanas se han gastado sobre los $2.600.000.000 y los únicos acuerdos que se han visto son los de algunos sectores políticos reclamando un aumento de presupuesto, cancelaciones a la petición de la palabra a ciertos constituyentes, funas y una falta de transparencia que impedía, incluso, la entrada de la prensa.
George Orwell tenía mucha razón, para ciertos grupos todos somos iguales, pero algunos son más iguales que otros y así lo ha dejado en evidencia Rossana Vidal, ex convencional de la Lista del Pueblo, quien renunció tras la segregación de su propia lista tras estar de acuerdo en la posibilidad de que algún miembro de Vamos por Chile ocupara alguna vicepresidencia. Convencionales: es hora de que comiencen a trabajar por Chile, sólo les quedan 11 meses de trabajo.
Pilar Lorenzoni
Apertura de fronteras Desde el inicio de la pandemia, a nivel mundial se ha priorizado el seguimiento e investigación de las nuevas variantes del virus SARS-CoV-2 con el fin de prevenir su propagación, siendo una de las estrategias más efectivas la vigilancia de fronteras.
A partir del 26 de julio, en nuestro país comenzó a regir una nueva norma de control de fronteras que permitirá a chilenos y extranjeros residentes, salir con permiso excepcional o con pase de movilidad habilitado. A su vez, podrán ingresar al país aquellos chilenos o extranjeros que cumplan con su declaración jurada, PCR negativo, seguro médico, aislamiento y seguimiento.
Si bien se establece dentro de las medidas sanitarias de ingreso el aislamiento por 10 días, aquellas personas que cuenten con su pase de movilidad habilitado al momento de ingresar a nuestro país podrán realizarlo en su domicilio. Esto da cuenta de un traspaso de una medida de salud pública a una responsabilidad individual que será muy difícil de fiscalizar, más aún con el aumento de movilidad que implicará esta nueva norma de control fronterizo y la escasa evidencia de la efectividad de las vacunas ante la nueva variante, poniendo en riesgo el actual escenario de bajo número de contagios e identificación de los casos de la variante Delta.
Ya existe evidencia de que esta nueva variante es capaz de desplazar a aquellas predominantes en nuestro país, por lo que un control adecuado de fronteras que considere testeo, trazabilidad y aislamiento efectivo serán fundamentales a la hora de evitar nuevos rebrotes en nuestro país. Josefina Aubert, académica Facultad de Medicina y Ciencia, Universidad San Sebastián