Definitivamente crítico es el actual escenario de pandemia en el país. Mientras se decretó cuarentena para toda la Región Metropolitana, se ha sumado, a nivel regional, una muy baja disponibilidad de camas críticas, lo que hace suponer que se avecinan días muy complejos para la red asistencial. Además, el Gobierno dispuso medidas restrictivas para el fin de semana pasado, donde se suspendieron los permisos de desplazamiento.

La comunidad médica ha transmitido el difícil momento epidemiológico y sanitario que atraviesa Chile. Destacaron que casi la totalidad de las camas de pacientes críticos se encontraba ocupada, enfatizando que aunque existe un plan de expansión, tiene capacidad limitada y se realiza un tremendo esfuerzo para mantener la calidad de atención. Por ello, hicieron un llamado a la ciudadanía a fortalecer las medidas de precaución: distancia física, privilegiar espacios abiertos y ventilados, lavado de manos frecuente y uso correcto de mascarilla, mientras que instaron a las autoridades gubernamentales a tomar decisiones más estrictas.

El Gobierno anunció el endurecimiento de las restricciones de movilidad, en especial en la Fase 2. Estas incluyen la prohibición de realizar eventos con público, además del cierre de gimnasios y casinos en la etapa también conocida como de Transición. También se adelantó en una hora el inicio del toque de queda, que ahora comienza a las 22 horas en todo el territorio nacional.

A nivel provincial, seis de las siete comunas están confinadas totalmente, lo que refleja el difícil escenario generado por la pandemia. Y las cifras reflejan la gravedad de la emergencia en nuestro territorio: el informe entregado el domingo 29 por las autoridades de Salud mostró que 15 personas fallecieron producto del covid-19, una cifra alarmante.

Más allá de los negativos efectos que implica la restricción de la movilidad, es importante insistir en que se debe hacer un último y gran esfuerzo para que las cifras comiencen a disminuir, de la mano de una mayor conciencia ciudadana, medidas acordes al complejo escenario por parte del Gobierno y el efecto que se espera tener a mediano plazo del proceso de vacunación.

¿Cuántos años? Casi toda la vida. Si sólo fuéramos espíritu no sería problema, pero aquí estamos dale que dale, suda que suda, juntando chaucha a chaucha, cada peso. Todo con la noble misión de no joder a nadie cuando seamos más viejos y podamos mantenernos solos.

¿Y podemos? Listo, aquí se avinagra el artículo. Como se sabe después de mucho andar y probar diferentes métodos llegaron las AFP. Sistema vilipendiado y demonizado por un sector político, pero que a la hora de retirar el primer 10 por ciento, demostró no sólo que el dinero estaba, sino aumentado con creces. Sin embargo, la pelea sigue y los políticos insisten en meter las manos a nuestros bolsillos para "darnos a gastar nuestros propios ahorros" que en países como el nuestro tanto cuesta obtener. Algunos dicen que es un robo, otros, una estafa.

¿Estafar? Quitar a una persona dinero o algo de valor mediante engaño. Dar a una persona menos de lo que le corresponde o cobrarle más de lo justo.

Robar: Quitar a una persona algo que le pertenece.

La diferencia entre estafar y robar es tan sutil como contundente; el ladrón entra a la casa con violencia, cara cubierta, busca, encuentra y se va. El estafador usa la persuasión, mira a los ojos, escudriña, localiza y abandona. En ambos casos nos quitan lo que hemos ganado honradamente.

En fin, seguir gastando nuestro dinero es la solución, según los políticos.

¿Políticos?, ¿cuántos años de democracia a Parlamento lleno? ¿No sé si será idea o esta tole tole al que llaman con tanta pompa Congreso, más parece una sala de clases de impúberes mal educados, caprichosos e incapaces hasta de hacer las tareas. Salvo honrosas excepciones, esta casta política nos tiene hasta el cuello, se lo pasan malgastando nuestra plata, diciendo una cosa y haciendo otra, dándose vueltas de carnero o calentando la silla… Todo en nombre de la próxima elección…

¿Y? Y nada, si hicieran bien la pega, otro gallo nos cantaría. Pero aquí estamos, pagando ineficiencia y privilegios. Aunque al menos ahora sabemos para quién tendremos que trabajar el doble ¿O usted cree que van a sacar plata de su bolsillo para pagar la deuda?

Vivian Arend