Los desafíos del año que ya inició
La crisis sanitaria y la recuperación económica sin duda seguirán acaparando la atención de la opinión pública. A no equivocarse. La llegada de la vacuna no significa en lo absoluto que se puedan relajar las medidas de autocuidado en la población.
El sentimiento de esperanza en torno a que este año será mucho mejor es lo que ha prevalecido en las últimas horas. Si bien es algo natural, resulta evidente que los desafíos que enfrenta la región y el país son complejos y requieren el compromiso de la ciudadanía y de los diversos líderes. La urgencia de la situación de salud obliga a poner como prioridad el control de la pandemia. Una tarea que resulta especialmente compleja en este periodo por varios factores.
El primero es lo que implica la época de verano, ya que es natural que en este tiempo se genera cierto relajo y muchas personas pretendan vivir una mayor normalidad que, lamentablemente, no puede cumplirse debido a las condiciones sanitarias actuales. Otro factor que aumenta las complicaciones es la baja en la percepción de riesgo sobre el covid-19 derivada de la llegada de las primeras dosis de la vacuna al país. Aunque este hito representa una gran esperanza, para que el proceso de inoculación tenga real efectividad deben pasar todavía bastantes meses.
Pero más allá de la situación derivada de la pandemia hay otras dimensiones en que también asoman muchos desafíos. Uno de ellos es el plano económico, dada la necesaria reactivación, asociada especialmente a la posibilidad de recuperar parte de las plazas laborales perdidas en 2020. Para ello, se requerirá seguir avanzando en materias asociadas al impulso de la micro y pequeña empresa, la cual requiere con especial intensidad los incentivos para volver a confiar en el futuro, reanudar las inversiones y -ojalá- volver a realizar contrataciones.
Esta tarea resulta muy significativa en las áreas más golpeadas en los últimos meses, como el sector gastronómico y turístico, que si bien deben estar supeditados al cumplimiento de las normas sanitarias, requieren iniciar su reactivación a la brevedad. Junto con lo anterior, 2021 llega con una intensa agenda electoral donde lo más importante será poder encauzar las distintas campañas en un clima de respeto tal que permita ir reduciendo la lamentable polarización que caracterizó al año recién pasado y todo el proceso que se inició con la crisis de octubre de 2019.