La importancia de donar sangre
La pandemia llevó a cerrar las universidades, y las empresas que no adoptaron el teletrabajo generaron estrictos protocolos para controlar el ingreso de personas a sus instalaciones. Uno de los elementos que incidió en la baja de donaciones tiene que ver con las colectas móviles que se realizan en empresas o en centros de estudios superiores.
La pandemia trajo una serie de complicaciones que han derivado en problemas económicos y en el colapso de ciertas unidades de los centros de salud, como las UCI y UTI, donde se tratan los pacientes más graves. Algo quizás menos visible pero igual de complejo es la caída que registró la donación de sangre en el país. A fines de marzo, al inicio de la pandemia, en la Región Metropolitana los centros que reciben plasma ya daban cuenta de una baja crítica de sus reservas, pues la cantidad de donantes se había reducido a un tercio.
La donación de sangre es tan relevante que fue considerada dentro de los 17 permisos que actualmente se pueden obtener en comisariavirtual.cl para salir durante la cuarentena. La sangre, en general, y los elementos que se pueden obtener de ella (como las plaquetas, por ejemplo), sirven para transfusiones a enfermos de cáncer, personas que sufren accidentes traumatológicos, niños prematuros, casos con quemaduras y afecciones respiratorias severas, tratamientos y requerimientos que se mantienen durante todo el año. Incluso, las reservas se han utilizado en personas con covid-19.
Uno de los elementos que incidió en la baja de donaciones tiene que ver con las colectas móviles que se realizan en empresas o en centros de estudios superiores. La pandemia llevó a cerrar las universidades, que volcaron sus actividades a la web, y las empresas que no adoptaron el teletrabajo generaron estrictos protocolos para controlar el ingreso de personas a sus instalaciones, lo que dificultó la realización de estos operativos.
En medio de este escenario cobró relevancia el trabajo que hace cuatro años iniciaron con fuerza para conseguir a estos donantes altruistas, comprometidos con acudir hasta cuatro veces al año, en el caso de los hombres, y tres en el de las mujeres.
Como dijo Daniela Ceballos -futbolista y defensa de la Universidad de Concepción, quien desde 2011 es donante altruista- este aporte requiere tan poca inversión de parte de quienes lo hacen y se puede lograr algo tan importante como salvarle la vida a una persona.