Hace unos días se conmemoró el Día Mundial de la Salud Mental, fecha instaurada por la OMS (Organización Mundial de la Salud) para la reflexión sobre este importante tema, que influye de manera gravitante en la calidad de vida de las personas y en cuya alteración caben desde trastornos como la depresión hasta las adicciones. Es decir, aquellas realidades que conforman la mayoría de las razones de licencias médicas en el mundo y las que provocan una muerte cada 40 segundos por suicidio; acción extrema que no es su única consecuencia, pero sí la más conocida, dolorosa, impactante y trágica.

La tasa (minsal.cl) de personas que se quitan la vida es de 11,8 por cada cien mil habitantes; mientras que la nacional es de 9,7; según dijo el ministro Enrique Paris, aunque admitió que las circunstancias actuales, probablemente harían subir esa cifra, que ya es la más alta del continente.

Por lo mismo -dijo Paris- existen planes de aumentar las inversiones en esta materia, para ampliar las atenciones especializadas. De hecho, esa fue la propuesta del Día Mundial 2020 emanada desde la OMS a los países miembros. Y Chile tiene mucho por hacer al respecto: hoy se llega solamente a un 20% de los pacientes que requieren ayuda y el presupuesto nacional anual del área es un 3% del total destinado a Salud.

Se reconoce, sin embargo, que entre las estrategias frente al covid-19 el gobierno creó la página https://www.gob.cl/saludablemente/ donde existe una guía para la prevención en distintas áreas, incluida la laboral, que se ha visto profundamente resentida.

De acuerdo a un estudio publicado por la plataforma Laborum.com, el 82,4% de las personas en Chile reconoce hoy sentirse "extremadamente cansada" y el porcentaje de quienes se declaraban "felices" ha bajado de 41% a 34%, en un año. Otro análisis de la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) arrojó que el 83% de 269 trabajadores encuestados aseguró sentirse estresado o ansioso con la situación del país. Con claridad, hay una tarea política para cumplir ahora.

Este 16 de octubre se celebra en todo el país el Día del Profesor, momento propicio para efectuar un reconocimiento al trabajo de los docentes, quienes han sido un actor clave en la continuidad del proceso educativo durante la pandemia del covid 19.

Es de conocimiento que las nuevas exigencias y el drástico cambio de escenario que requirió la adaptación de las clases ya planificadas de manera presencial a un sistema 100% online o virtual, fue un tremendo desafío que los docentes asumieron con real compromiso, lo cual valoramos y destacamos.

Estos meses hemos sido testigos sin distinción de edades e independiente de la familiaridad con las nuevas tecnologías, que gran parte de nuestros profesores han adoptado el compromiso de educar en pandemia mediante prácticas innovadoras y creativas, asegurando con ello el derecho a la educación de jóvenes y niños. Los docentes cumplen un rol importante en la primera línea, como punta de lanza de las instituciones y establecimientos educacionales, manteniendo el contacto con los alumnos y conociendo la realidad de sus familias en momentos de crisis.

Esto no ha sido fácil, adoptar un sistema absolutamente diferente y que todos abrazamos de la noche a la mañana con el propósito dar continuidad al proceso formativo de nuestros estudiantes, convocó la voluntad de muchos actores, incluidas las familias.

Esta realidad, en que destacamos las hermosas experiencias de los docentes como un testimonio del compromiso profesional, de igual forma nos invita a repensar el aula y las prácticas educativas de cara al futuro.

El masivo uso de la tecnología en todos los ámbitos de la vida, proceso acelerado producto de la pandemia, es una ola transformadora en las relaciones sociales, instalándose también en la esfera de la educación. Así, la docencia mixta (presencial-virtual), se sitúa como unos de los puntos que logra mayor consenso y claridad al momento de analizar el modelo, el cual debe asegurar al mismo tiempo la calidad e inclusividad de niños y jóvenes.

Innovar en educación es un permanente desafío que nos anima a seguir adelante, espacio en que los docentes tienen un rol fundamental. Por eso hoy más nunca valoramos y respetamos su aporte al desarrollo de una sociedad en constante cambio.