Transporte público disminuye su frecuencia por menor demanda
LOCOMOCIÓN. Se trata de uno de los efectos que ha tenido la crisis social que remece al país desde hace más de un mes y que ha repercutido en las utilidades del gremio que presta un servicio fundamental, especialmente para las familias más necesitadas. Entre un 20% y 50% de pérdidas declaran luego de cumplido el primer mes de movilizaciones.
"El lunes 18 tuve un compromiso y recién pude regresar pasadas las 12 de la noche, desde el centro a Rahue Alto norte. Se escuchaban disparos, nos afectó el gas de las lacrimógenas y el primer colectivo que pasó no me llevó y el que sí lo hizo, me preguntó si podríamos pasar a dejar a dos personas a Francke para que valiera la pena la carrera. Por supuesto accedí, pero con harto miedo y creo que ese temor es compartido por la mayoría de la gente que está haciendo todo lo posible por llegar temprano a sus casas".
Con este testimonio, la presidenta de la junta de vecinos de la población Quinto Centenario, Marcia Sobarzo, reflejó la precaución que está teniendo la comunidad, especialmente la población trabajadora que, desde que estalló la crisis social en el país, prefiere regresar temprano a sus hogares para evitar toparse con eventuales disturbios violentos y, además, asegurarse de conseguir transporte público que llegue hasta sus sectores.
Y es que uno de los efectos de los desórdenes, destrozos y enfrentamientos luego de las movilizaciones, es el término adelantado de las jornadas laborales y, por ende, una menor demanda de transporte público después de las 18 horas.
En eso coincidieron los dirigentes del transporte público de Osorno, quienes aseguraron que este fenómeno ha golpeado duramente al gremio en las principales ciudades del país y se han visto en la necesidad de disminuir la frecuencia de las micros y colectivos desde hace más de un mes.
Colectivos
Humberto Ulloa, vocero de los taxicolectivos de la ciudad, explicó que desde que empezaron las movilizaciones, su actividad ha tenido una importante baja, con pérdidas que superan el 20%, porque circulan menos pasajeros diarios.
"Nos hemos visto en la necesidad de disminuir la cantidad de vehículos, aproximadamente en un 20%, y cuando se anuncian movilizaciones a nivel nacional, tenemos un 40% menos de autos en las calles por temor a sufrir algún daño", recalcó.
A pesar de todo, aclaró que la comunidad sigue contando con su servicio, 24 horas al día, sólo que con menor frecuencia. "Cubrimos todos los sectores, el único cambio ha sido en la frecuencia que responde a la menor demanda. En este último mes, después de las 20 horas, casi no se ve gente en la calle", añadió.
Hasta ahora no se han producido despidos, sin embargo, como una medida paliativa transitoria, los propietarios de vehículos han disminuido la cuota (el precio diario que pagan a sus conductores). "Así ganan ambas partes, menos, claro está, pero se mantiene el trabajo", recalcó.
Microbuseros
Arturo Arriagada, presidente de la Asociación de Empresas de Transporte Urbano (Aetur) Osorno, comentó que también se han visto en la necesidad de disminuir la frecuencia de los recorridos, pues las pérdidas del sector alcanzan un 50% en comparación a un mes normal.
"Si antes pasaba una micro cada 5 minutos, ahora es cada 7, así que la gente efectivamente está viendo menos máquinas en la calle", indicó.
Detalló, además, que las micros están haciendo menos recorridos en el día, porque después de las 18 horas es riesgoso y, por lo mismo, casi no hay pasajeros. "Luego del estallido social, hemos sido fuertemente perjudicados en nuestra labor. Hasta ahora no hay habido despidos, pero tanto empresarios como conductores hemos disminuido fuertemente nuestros ingresos", aclaró Arriagada.
Los empresarios del transporte urbano están viviendo semanas complicadas porque, independiente de las circunstancias del país, deben cumplir con sus obligaciones y no sólo como empleadores, sino también con importantes inversiones que aún están pagando.
"Muchos habían comprado máquinas nuevas, tienen que cumplir con las cuotas y estamos tan afligidos, que estamos viendo la posibilidad de que los bancos tengan cierta flexibilidad con el gremio", manifestó el dirigente.
Proyecciones
Humberto Ulloa aseguró que la esperanza que mantiene el gremio de los colectiveros es que "independiente de lo que ocurra en torno a las demandas sociales, esperamos que en diciembre terminen los disturbios y actos de vandalismo que, finalmente, son los que han causado la disminución de pasajeros".
Arriagada no tuvo el optimismo de plantear una fecha, pero subrayó que "el panorama futuro dependerá mucho de cuándo termine todo el asunto de los daños y disturbios, porque entonces las empresas y servicios públicos retomarán sus horarios, la gente no tendrá miedo de salir y contaremos con el flujo habitual de pasajeros".
Ayer en la tarde, el presidente de los microbuseros participó en una reunión con la ministra de Transportes, Gloria Hutt, en Santiago, en la que representantes de todo el país tratarían los efectos que está teniendo la crisis social en el transporte público, entre otros temas, como el perímetro de exclusión que debería comenzar en el año 2020.
Los vecinos
Sergio Valderrama es uno de los dirigentes vecinales del sector de Ovejería, donde las familias reclaman desde hace unos 20 años por la poca frecuencia en el día y prácticamente nula en la noche.
Confirmó que en las últimas semanas ven menos micros y colectivos, pero a la vez reconoció que en el sector viven muchos adultos mayores que, generalmente, están temprano en sus casas.
Similar es la percepción de Juan Carlos Gajardo, presidente de la Junta de Vecinos Kolbe Alto, quien agregó que han implementado una estrategia efectiva para que los vecinos no se queden sin locomoción colectiva, gracias a la excelente relación que tienen con el propietario de la línea de microbuses número 7.
"Él nos avisa, por ejemplo, cuando los recorridos terminan más temprano por eventuales disturbios en el centro de la ciudad, yo lo publico en Facebook y rápidamente, entre todos, lo vamos difundiendo", aclaró.
Marcia Sobarzo, presidenta de la junta de vecinos Quinto Centenario, comentó que "se ha notado que, desde que comenzaron las movilizaciones, la locomoción demora mucho más entre una y otra. En Rahue Alto Norte somos 28 villas y la mayoría trabajadores que la ocupamos para movilizarnos".
Enfatizó, sin embargo, que es efectivo que muchos vecinos prefieren llegar temprano a sus hogares para no coincidir con los disturbios, como le pasó a ella el lunes pasado.
Jeanette Silva vive en Los Abedules, en el sector de Francke, y es usuaria de la locomoción colectiva. "Acá la frecuencia siempre es baja, pero en el último mes efectivamente se ha notado una mayor demora, así que deben andar menos colectivos. En este tiempo de movilizaciones, cuando me atraso en algún trámite, prefiero optar por un Uber para llegar rápido a casa", concluyó.
"Hemos tenido una importante baja, con pérdidas que superan el 20%".
Humberto Ulloa, Representante de los taxicolectivos de Osorno
"Muchos (empresarios) habían comprado máquinas nuevas y tienen que cumplir con las cuotas y demás obligaciones".
Arturo Arriagada, Presidente de Aetur Osorno