Estudiantes sacrifican sus vacaciones para construir salón parroquial en Las Quemas
COMPROMISO. Se trata de jóvenes que integran el proyecto Trabajo País, coordinado por la Pontificia Universidad Católica, que a nivel nacional levantan diversas obras, además de generar un lazo con los habitantes beneficiados.
sergio.silva@australosorno.cl
Con mucho ánimo y entusiasmo, soportando la lluvia, el viento y el frío, más de 30 jóvenes universitarios, principalmente de la Universidad Católica, Los Andes y la Chile trabajaron en la construcción de la tan anhelada sede social de los vecinos del sector de Las Quemas Centro, en la comuna de Osorno.
Los muchachos dejaron de lado sus vacaciones de invierno y premunidos de ropa para enfrentar el clima de la zona, viajaron hasta Osorno para sacar adelante el proyecto de los vecinos.
Rosario Lira, jefe zonal del proyecto Trabajo País, expresó que hombres y mujeres de entre 18 a 24 años, se encuentran concretando la edificación de este inmueble. "Estamos muy contentos, nos han tratado muy bien. Estamos construyendo este salón parroquial con mucho cariño y amor. Los vecinos se han portado bien con los chiquillos, nos han regaloneado con mucha comida y eso nos da más ganas de sacar adelante este proyecto que servirá y quedará como legado para ellos", comentó la alumna que cursa tercer año de Bachillerato de la UC.
Trabajo País es un proyecto de la Pastoral de la Pontificia Universidad Católica de Chile, que busca desarrollar a lo largo del país diferentes obras sociales vinculadas con la Iglesia que permitan dejar una huella en todos quienes participen y se beneficien de esta valiosa experiencia.
Durante estos días han dormido en la Escuela Emilio Surber y, aparte de realizar la construcción, los jóvenes interactúan con los menores a quienes les realizan actividades recreativas, mientras que otros de los integrantes de la comitiva social, interactúan con los pequeños parceleros con quienes intercambian conocimientos en materia agrícola y veterinaria, como señaló Pablo Donoso, quien ya ha participado de varias actividades sociales.
"Pedí especialmente venir al sur porque me encanta mucho, su gente, el cariño de ellos, y podemos apoyar con los conocimientos que uno estudia (en su caso Agronomía); no obstante, uno se da cuenta que la experiencia de ellos muchas veces es más avanzada", subrayó.
Sueño hecho Realidad
Olaya Garcés reside en el sector de Las Quemas y se mostró emocionada al ver el interés de los jóvenes por sacar adelante un proyecto que ellos veían como imposible.
"Nos servirá para hacer charlas de catequesis; en caso de un fallecimiento poder cederla para un velatorio; realizar confirmaciones de los niños y muchas otras cosas. Antes debíamos recurrir a los dirigentes vecinales para pedir su sede, ahora tendremos algo que es nuestro y eso se lo debemos a estos chicos que hicieron nuestro sueño realidad", detalló.
Olaya como otros vecinos abrieron sus puertas y compartieron con los estudiantes, quienes durante estos días pasaron a ser parte de la familia de los residentes.
Carlos Mora, ex dirigente social, expresó que serán más de 200 las familias que se verán beneficiadas con esta importante obra. "Haciendo un poco de historia, entre 1998 al 2000 se hizo la copa de agua, de ahí la vecina Nora Bernier (antigua dirigente) gestionó un terreno con el agricultor Ferrando Killing, quien donó este sitio para el bienestar de la comunidad. Tenemos nuestra capilla pero faltaba este espacio. Nuestro aporte fue el radier y ellos finalizaron la obra", explicó.
La construcción se estima en más de 4 millones de pesos, quedando algunos detalles que serán finiquitados por los vecinos, ya que los jóvenes deben regresar a la capital, con la satisfacción de haber levantado una obra de importancia para los residentes del sector.
Hasta Osorno llegaron dos grupos de voluntarios, quienes han volcado todas sus fuerzas para sacar adelante estas construcciones. El otro proyecto se concretó en la población Santísima Trinidad de Rahue Alto. Ahí Sofía Carpentier, coordinadora de esa iniciativa, dijo que "la idea no es construir y dejar un lugar vacío. El sentido que tiene Trabajo País es dejar una huella, desarrollar lazos que perduren en el tiempo, es por ello que impregnamos tanto amor y compartimos con todo quienes rodean el lugar de la obra".