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ven que las prendas de sus hijos rápidamente les quedan pequeñas y necesitan comprar más. "Yo recurría a comprar ropa utilizada a mi hijito, jeans, polerones, camisas y pantalones de pijama, porque veía que manchaba su ropa, la rompía y al final el precio no lo valía", expresó.
De esta manera, Marcia Bahamondes comenzó con este emprendimiento, comprando fardos y seleccionando minuciosamente la ropa, ya que en esa modalidad sale un alto porcentaje de merma de ropa que ya no sirve.
La otra forma de elegir es a través de proveedores que le llevan ropa ya revisada y en excelente estado; y también realiza trueques.
Sin duda una de las mayores motivaciones en este caso es el ahorro, donde las familias llegan a comprar unas cuatro prendas al precio de una que se vende en el retail.
"Por ejemplo, el otro día en una tienda x andaba mirando la ropa de niños, porque ahora me llama mucho más la atención. Vi un jeans para bebés de 12 meses y costaba $15.990, pero los jeans que tengo yo no superan los tres mil pesos, es decir, con esos $15.990 un bebé se puede vestir prácticamente completo y a la mamá le queda plata. Mis precios, más o menos, los barajo en eso, pero algunos días libero 40 prendas en mil pesos. En general mis precios no superan los cinco mil pesos y lo más caro que se puede encontrar a veces son las chaquetas", explicó.
Los meses que lleva con esta experiencia han sido muy positivos, según relata Marcia, ya que ha tenido muy buena aceptación este concepto y por eso tiene diversos encargos de ropa, sobre todo desde la talla 2 a la 14.
"He tenido muy buena recepción. Con quien pasa y converso me comentan que esto era necesario, porque encuentran ropa muy bonita para sus hijos y que está muy bien cuidada. Es que a eso me dedico harto, porque reviso muy bien la ropa cuando llega", expresó.
Esta apuesta ha tenido tal éxito en dos meses, que ya se encuentra en dos locales: uno en el edificio Rombocol, de calle Ramírez y también en un espacio de la tienda "Casa Raíz", ubicada en calle Freire, entre Bilbao y Mackenna.
Transformación y estilo
Caterina Palma es la creadora de "Moda Tik Tak", que es ropa customizada, concepto que quiere decir que a partir de prendas de segunda mano realiza un nuevo diseño, utilizando otros elementos que la hacen una pieza única.
"Siempre me ha gustado esto, cuando era chica me hacía mi ropa. Iba a la americana y los pantalones de los viejitos, por ejemplo, que me gustaban las telas, los arreglaba para mi. Siempre he usado ropa que me he arreglado, casi nada de lo que tengo es comprado en tienda, toda es de tiendas americanas y la que no me queda, la arreglo", relató.
Fue así como de tanto pasar en tiendas de ropa de segunda mano, buscando en todos los colgadores, cuando vio unos vestidos de la India, quedó maravillada, pero no sabía cómo usarlos, porque eran muy pequeños y otros muy grandes.
"Vi en una tienda ropa customizada con pasamanería y otros accesorios, y me dije: ¿y si me hago una chaqueta con pedrerías?. Tenía solo ocho mil pesos, pero me arriesgué y compré dos chaquetas de jeans y dos vestidos, por lo que tenían que quedar lindas sí o sí. Las hice, me hice un Instagram, las subí y las vendí altiro. De ahí empecé a hacer más chaquetas y también a cachurear más en las tiendas", relató Caterina Palma.
Esta creadora autodidacta ahora pasa un buen tiempo en los locales de ropa reciclada, buscando ropa hindú, de donde saca pedrerías y bordados, pero también diseños africanos para las chaquetas.
"Son todos diseños propios, ninguno es copiado, igual el tema de las chaquetas, los pantalones y las bandanas. Hace un tiempo me invitaron a un desfile en Maicolpué, San Juan de la Costa, tal vez no habré vendido nada, pero mucha gente vio mis diseños", añadió.
Así han pasado cuatro años desde que empezó con este emprendimiento creativo, donde no solo se hacen chaquetas, sino también pantalones.
"Con los pantalones, de los dos que compro saco uno; a uno le añado tela del otro y los pinto a mano. Todas las telas son recicladas y las chaquetas también. Veo un vestido hindú y hago lo mismo que se hace con la carne: lo voy separando por pedrería, por bordado y la tela lisa. Así las voy aplicando en las chaquetas, hay personas que les gusta más el bordado que la pedrería y con lo que sobra de las piedras hago amuletos y bandanas. También hago cuadros con tiritas de tela y también he hecho telares con palos naturales. Al final ocupo todo", detalló.
Luego de esta experiencia de trabajo, Caterina Palma expresó que muchas personas valoran esta labor, por la dedicación y lo amigable que es con el medio ambiente, sobre todo en ferias o exposiciones de otras ciudades, mientras que en Osorno aún falta un poco por avanzar y que la gente comprenda este concepto.
"Cuando he dicho que es reciclado, hay personas que se decepcionan, pero cada vez son menos; en cambio hay otras que les gusta para ayudar al planeta", concluyó.
"Me comentan que esto era necesario, porque encuentran ropa muy bonita para sus hijos y que está muy bien cuidada".
Marcia Bahamondes, Tienda infantil "Roperito"
"Voy separando por pedrería, por bordado y la tela lisa. Así las voy aplicando en las chaquetas".
Caterina Palma, Creadora de "Moda Tik Tak"