Ya sé que estoy vieja para escribirle, pero esta carta no es para pedir que me traiga algo, todo lo contrario, en vista y considerando que usted vuelve al Polo Norte con las bolsas vacías, tal vez puede usted llevarse un par de cosas del camino que lleva a Belén y de toda esta zalagarda de Rodolfo el Reno, panes y galletas de miel.
Por otro lado, debe saber que en estas fechas su foto está en todas partes, y moros y cristianos andan descontrolados comprando, encalillándose, ladrando y mordiendo, a nombre suyo obvio. ¿Los niños? Bueno, muchos deben creer que usted vive en las multitiendas.
Así, entre Hanukkah, Ramadanes, Navidades y usted en medio de esta tole tole, tenemos un montón de personas, situaciones y cosas que dificultan mucho el trabajo de vivir.
A modo de ejemplo, le cuento que en España se está proponiendo que eliminen el "Belén" de plazas y oficinas públicas. Eso sí, sacarían el Belén, pero se quedarían con el feriado.
En fin, como puede ver querido Viejito, la estupidez humana está pasando de castaño a requeteoscuro. Estamos rodeados de cabezas de chorlito, con ideas "chorlidianas" que tienen esta tierra sobrecalentada a punto del derretimiento, el espacio taconeado de chatarra y satélites, y a todo ser vivo infectado con virus y bacterias, intratables a pesar de tanto adelanto científico.
¿Qué llevar? Bueno, tal vez podría llevarse las cabezas de pescado que pululan en todo animal, incluido el acuático con sus merluzas y jureles; el mal sentimiento de algunos empresarios que se coluden, evaden y eluden impuestos; las malas costumbres de empleados de oficinas públicas y privadas que no hacen la pega si no los fiscalizan. Las malas prácticas de profesores y trabajadores de la salud. El espíritu corrupto de algunos jueces, las querellas y otros engaños de las actuales autoridades, las volteretas de un presidente, el cinismo y acomodamiento de la izquierda, la cobardía y acomodamiento de la derecha, el discurso de los políticos, la perversión de la democracia, entre otros males. Y este si que es un pedido personal: ojalá al Congreso completo. Si ya sé que es imposible, pero es Navidad y uno sin querer sigue siendo niña disfrazada de mujer.
Vivian Arend