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partió en octubre, unos 15 ó 20 días después.
"El problema es que vamos a tener una primavera más corta, porque si partimos más tarde no significa que vamos a terminar más tarde, porque la sequía empezará casi igual que el año pasado, a fines de diciembre", manifestó Klocker.
Alimento irremplazable
Leonardo Orrego, quien también es prestador de servicios agrícolas y productor lechero, comentó que las faenas se debieron retrasar por el exceso de lluvia, como también el tener que enfrentar los altos costos de producción, por lo que una de las estrategias para enfrentar esto último es cambiar de silos en formato de bolos al silo parva, ya que es más barato. Según explicó, el primero lleva un film o nylon que lo envuelve, producto que actualmente tiene un muy alto precio.
En cuanto a la demanda actual que tiene el forraje, Leonardo Orrego señaló que hay bastante interés, aunque lo que generalmente se comercializa es el bolo; no obstante ahora esa venta está más lenta precisamente por el alza de este producto, por ello en este momento es requerido más que nada por empresas grandes, como es el caso de Manuka.
"Generalmente si uno gasta 20 mil pesos por hacer un bolo, en servicio completo, la venta se transa en el doble, en 40 mil pesos. Las ventas están un poco frenadas, porque la mayoría está esperando ver si en sus propios predios logran satisfacer sus necesidades y compran solamente el saldo. Pero tampoco se sabe si va a volver a llover, si va a haber otro corte, lo que regula un poco el mercado", remarcó.
Agregó que si no llueve, no habrá más cortes y como los costos están tan altos, tampoco hay otras prácticas para hacer forraje, como por ejemplo sembrar tritricaleso centeno, ya que los insumos para ello también son muy caros.
"El problema también ha estado en que como el verano pasado fue seco, se empezó a ocupar la comida en verano, por lo tanto cuando en invierno la gente empieza a rezagar pastos para cortarlos a la salida del invierno a primavera, se los tuvo que volver a comer; y de un talajeo de animales o un corte, pasan 30 días", explicó.
Alza por sobre el 50%
El también prestador de servicios agrícolas que se dedica a la producción de forraje, Diego Catalán, comentó que ha sido una buena primavera para esta actividad, ya que las temperaturas han sido buenas, con una humedad óptima.
"Han habido bastantes lluvias intermitentes que han permitido la humedad en el suelo, para que las praderas y los forrajes tengan un muy buen desarrollo. Aquí en esta época se juega toda la guarda de forrajes del invierno que viene, así que en ese sentido ha sido bien provechoso, porque hay bastante pasto", expresó.
Catalán agregó que por estos días estamos en el peak de praderas a nivel de la zona de Los Ríos y Los Lagos, donde todos los prestadores trabajan a toda máquina, aunque deben enfrentarse al factor negativo que es el costo de producción.
"Aquí el único factor que ha cambiado y que ha sido una competencia muy alta son los costos de producción, tanto para el agricultor como para nosotros los que prestamos servicios en la cosecha de forraje, porque están muy altos en comparación hace tres años atrás", manifestó Catalán.
El profesional detalló que el año pasado los costos de producir forraje ya habían subido un 30% sobre el 2019 y 2020, mientras que ahora se agrega un 30% más sobre el valor que tuvo en los periodos anteriores.
"Ya estamos en un acumulado de más del 50% en el aumento de los costos de producción de forraje de confección de éste en todos los campos. Sin duda el insumo que más ha subido es el combustible, pero el que más ha encarecido todo es el plástico o film para guardar y conservar los bolos", concluyó.