Una preocupación más

Si bien el costo de la calefacción es un problema que se arrastra desde hace años, se suma al alza en el costo de la vida tras la pandemia y el aumento de la cesantía. Este adverso escenario también genera consecuencias ambientales negativas, debido al aumento del consumo de leña húmeda (con niveles de agua internos de la madera que sobrepasan el 25%) lo que incrementa la contaminación del aire por material particulado fino (MP 2.5). Ello deja en "jaque" el objetivo del Plan de Descontaminación Atmosférico (PDA) vigente en Osorno desde 2016, que apunta a mejorar la calidad del aire a través de cuatro ejes principales: la aislación de las viviendas, recambio de calefactores, mejoramiento de la calidad de la leña y la educación de la comunidad.

Eliana Catrilef, presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos de Osorno, expresó que las bajas temperaturas que actualmente se registran se han transformado en un problema económico para cientos de familias que deben continuar comprando leña o pellets.

"La realidad es que las familias están comprando en pequeñas cantidades, lo que termina siendo más caro, pero no tienen otra opción, porque el presupuesto familiar está muy ajustado e incluso sobrepasado. Comer, vestirse y calefaccionarse está carísimo y el Estado como tal mira para el cielo, porque la ayuda concreta no existe. Los más afectados son las familias de bajos ingresos, adultos mayores y hogares vulnerables, porque no pueden comprar en grandes cantidades y, por lo tanto, deben hacer filas, comprar más caro o quedarse sin productos. Porque ya comenzaron a guardar para el otro año los que pueden comprar más pellets y la gente que está viviendo el día a día queda en desventaja, como siempre", expresó la dirigenta vecinal.

Carlos Mendoza, presidente del Consejo Consultivo de Salud del Adulto Mayor, enfatizó que la situación para los adultos mayores es cada día más complicada, porque las pensiones no son suficientes para satisfacer las necesidades reales. Actualmente la mayoría está subsistiendo.

"Esto pasa porque las autoridades de los distintos gobiernos toman las decisiones en sus oficinas sin ningún conocimiento de la realidad de los adultos mayores. Creen que con subir un porcentaje las pensiones están cambiando la vida de la gente y eso está lejos de ser así. Son más de 38 mil adultos mayores solo en la comuna de Osorno, de los cuales la mayoría depende de su pensión, no tienen redes de apoyo y deben escoger entre comer, medicamentos o calefacción. Eso no es justo, muchos se acuerdan para las elecciones y en el mes del adulto mayor, pero el resto del año somos muy pocos los que tratamos de apoyar", indicó Mendoza.

Una de las soluciones que trabaja el gobierno es el proyecto de ley de biocombustibles sólidos (leña, pellet, briquetas, carbón vegetal y desechos agrícolas declarados combustibles) lo que permitirá, entre otras cosas, aumentar la fiscalización a la venta informal y las exigencias de calidad para la comercialización, además de regular los precios, que es uno de los grandes problemas de la actualidad.

Los productores y comercializadores de leña seca abastecen el comercio establecido, donde la disponibilidad de leña de calidad y seca no supera el 10% de la oferta total de la comuna, aunque actualmente cuentan con una disponibilidad máxima de 3%.

2016 abril entró en vigencia el Plan de Descontaminación Atmosférico (PDA) de Osorno, el cual tiene una duración de 10 años y el objetivo es mejorar la calidad del aire y reducir el Material Particulado Fino MP 2.5.

16 de septiembre nevó en la provincia de Osorno, lo que sorprendió a la comunidad por la belleza del paisaje cubierto por un manto blanco y por las bajas temperaturas.

38 mil adultos mayores viven en la comuna de Osorno, de los cuales la gran mayoría enfrenta un complicado escenario económico que los obliga a elegir entre calefaccionar sus hogares, comer e incluso medicarse.