Fallece el padre Gerardo Broeders, religioso en la misión Quilacahuín y vicario de la Jesús Obrero
DECESO. El holandés llegó a la zona en 1974 e impartió clases en el colegio misional. También tuvo una destacada labor social en Rahue Alto, donde ayudó a levantar el templo de la población García Hurtado de Mendoza.
En Tilburgo, Países Bajos, falleció el pasado 23 de julio, a los 85 años de edad, el padre Gerardo Broeders H.P.S.F., superior general de la Congregación de Hermanos Penitentes de San Francisco, orden que sirvió desde 1964 en las misiones de Quilacahuín, San Juan de la Costa y Rahue.
El religioso llegó a la zona en 1974 y trabajó como profesor de inglés en el Colegio de Quilacahuín, bajo la dirección del hermano Alfonso van Kempen, donde además levantaron el hospital, al igual que en la Misión San Juan, para brindar asistencia médica a la población de dichos sectores.
Labor en Rahue Alto
Fue ordenado sacerdote por monseñor Miguel Caviedes Medina, tras lo cual se desempeñó como vicario en la parroquia Jesús Obrero de Rahue Alto, donde realizó una amplia labor social, como un taller artesanal, comedor parroquial, club de ancianos, atención a pacientes con Sida y catequesis. También se encargó de la construcción de la actual iglesia parroquial y la capilla Santa Clara.
Luego de 3 décadas, al ser elegido superior general de la congregación, regresó a los Países Bajos (Holanda), donde mantuvo contacto con los hermanos que permanecían en la provincia de Osorno.
Volvió a nuestra ciudad por última vez en 2014 para participar en los actos por los 50 años de servicio de la congregación en las misiones de Osorno.
Luego de cumplidos los ritos fúnebres, se efectuó su funeral este viernes 29 de julio, siendo sepultado en el cementerio de la congregación en la ciudad de Tilburgo, donde permanecen los últimos hermanos de esta rama franciscana.
El padre Gerardo era el tercer sobreviviente de los 16 hermanos que sirvieron en las misiones hasta 2019, año en que falleció el último que permanecía en Osorno, Humberto Ploumen.
85 años tenía el hermano penitente de San Francisco, que desempeñó una destacada labor social en la zona.