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a los turistas", manifestó.
Ejemplo familiar
Durante 12 años "La Casa de la Abuela" ha entregado una experiencia dulce a los clientes de Osorno, con preparaciones que incluyen chocolates, pan y pastelería. Roxana Barría, madre de tres niños, empezó a incursionar en este mundo como una tradición familiar y frente a la necesidad de no continuar atada a un horario en su cargo de secretaria ejecutiva.
La emprendedora necesitaba tiempo por los constantes viajes que debía hacer con su hijo a la Teletón, donde recibió el impulso para hacer crecer su emprendimiento. Allí, tras conocer que tenía una página llamada "Rox Barría Dulce Delivery", una de las educadoras la incentivó a postular un proyecto de alianza entre Fosis y Teletón, en el cual quedó seleccionada entre 25. El financiamiento le ayudó a adquirir un horno y, posteriormente, incorporarse al Centro de Negocios.
"Partí haciendo niditos y conejitos, cuchuflis y alfajores. Hace cinco años nos formalizamos para poder entregar a locales nuestros productos, en pastelería tengo hartos años también. Mi idea era buscar una opción extra, siempre he tenido el bichito de trabajar, de hacer cosas. Es un tema de independencia económica y en la actualidad soy la proveedora principal del hogar, hemos avanzado mucho", mencionó.
Además de seguir el ejemplo de la familia, Barría tomó cursos, capacitaciones y se fue especializando para convertirse en una pastelera de oficio. Para sus preparaciones ha aprendido diferentes técnicas y se ha asesorado con maestros pasteleros, no obstante considera que lo fundamental es el cariño que le pone a cada una de ellas, ya que trabaja sólo con pedidos personalizados.
"La Casa de la Abuela' se llama en honor a mi abuela. De hecho, el taller principal está en la que era su casa antes. Todo es en honor al cariño, trabajamos con hartas recetas familiares en las tortas, con ese recetario antiguo que tiene la letra de mi abuela que es una cursiva súper elegante. Hubo que trasladar recetas que venían en libras a gramos, por ejemplo, así que todo es en honor a ella", aseguró.
Sumado a gestionar los pedidos de tortas, chocolates, por el número +56 9 6701 4496, con siete días de anticipación, tiene convenio con dos clínicas de diálisis y comercializa pan, cuchufli, alfajores, mini volcanes, galletas de avena gracias al local La Hormiguita.
Aunque normalmente trabaja sola, en esta época recibe el respaldo de su mamá y su hermana, quienes la apoyan en la elaboración de los huevitos de Pascua, ya que invierten alrededor de 12 horas diarias en este proceso. "Estamos con un catálogo de Pascua de Resurrección que tiene niditos, la base de medio huevo y chocolate, así como conejitos. Tenemos una novedad desde hace dos años que es el huevo cuchara, que consiste en medio huevo con una crema de chocolate y arriba tiene unas trufas, eso se come con una cucharita. Las tortas depende del tamaño: tenemos de $12 mil hasta grandes de 50 mil pesos; en chocolates hay conejitos desde $2.500 y después vienen desde $4.500. Trabajamos con chocolates puros, chocolates sin azúcar, veganos, tenemos esas tres alternativas", detalló.
Barría ha logrado un gran reconocimiento en este largo trayecto, sin embargo su idea es continuar emprendiendo con pedidos, ya que ha consolidado una clientela que valora los productos personalizados. "Ha estado bastante movido, a pesar de la competencia que es súper sana. Pertenezco a una asociación de emprendedoras y tenemos también pasteleras que trabajamos bien unidas. Ahora vamos a tratar de tener productos de Pascua listos para que la gente los pueda pasar a buscar", enfatizó.
"Trabajamos con hartas recetas familiares en las tortas, con ese recetario antiguo que tiene la letra de mi abuela"
Roxana Barría, Emprendedora