Apicultor resiente los efectos del déficit hídrico: mermó su producción de miel
LOS RISCOS. El emprendedor Guido Gallardo analizó en tono crítico el momento que vive su sector y anunció que, pese a todo, enviarán la miel comprometida a California, en Estados Unidos.
Los expertos señalan que la flor del ulmo emerge entre febrero y marzo en los bosques nativos de Los Ríos y Los Lagos y que la producción de ese tipo de miel es fundamental para la conservación, debido a que la polinización que realizan las abejas durante la cosecha ayuda a que esos bosques no se extingan. Por lo tanto, es válida la preocupación de los apicultores de Los Riscos, precordillerana localidad de la comuna de Purranque.
Allí, el conocido apicultor Guido Gallardo confirmó su aprehensión por lo que ocurre actualmente a causa del déficit hídrico: "En mi sector siempre esperamos en esta época la floración del ulmo, pero este año todo indica que no será buena, porque el ambiente está muy seco y no hay miel de ulmo. Las altas temperaturas han complicado a nuestras abejas". La miel de olmo es producida por las abejas cuando recolectan el néctar de las flores del mismo árbol, que se caracteriza por una flor blanca muy llamativa y perfumada, lo que se traduce en una miel aromática.
"Lo que sí tenemos es el resultado de la cosecha de la miel de tineo y tiaca. Fueron cinco tambores a finales de enero, lo que está bien si lo comparamos con el período 2021. Pero uno siempre cosecha todo lo que hay primero y espera la floración del ulmo. Y ayer revisé mis cajones y vi que hay muy poca. Por lo general cada temporada sacamos otros 5 tambores más, pero de ulmo. Perdí las esperanzas de que esto se pueda revertir", aseguró .
-¿Y han conversado los apicultores de la zona sobre este tema?
-Sí y dicen que están en el mismo problema. Es que el ulmo es el árbol más explotado en el sur. Y eso que estamos en plena precordillera. La gente de la ciudad lo que desea es leña de ulmo. Da más temperatura, mejor brasa, aunque ulmo casi no queda para leña. La gente usa principalmente eucaliptus hoy en día.
Gallardo es uno de los 11 socios apicultores de la Cooperativa Mieles del Sur, con base en Frutillar y Colonia La Radio, integrada por familias de emprendedores disgregadas entre Los Ríos y Los Lagos, que exportan el producto a Estados Unidos y Europa, por lo que viven y se desvelan por producir miel pura, libre de transgénicos, agricultura industrial u otros contaminantes. Aunque como señalan, en esta temporada no ha sido "miel sobre hojuelas".
Lo que sí cosechó fue miel de tiaca, árbol nativo siempre verde de nuestra zona que florece entre los meses de diciembre y febrero con sus frutos maduros incluso hasta marzo. Tiene importancia local como flora apícola y es fuente de néctar para la producción de miel. Y también cosechó miel de tineo, la más intensa en cuanto a aroma y sabor. Es miel monofloral cosechada durante la floración del tineo, otro árbol nativo del sur de Chile.
-Pese a la pandemia y baja floración de ulmo, siguen exportando…
-Tenemos un convenio con Prochile para colocar miel en California, Estados Unidos. La que cosechamos se exporta. Aunque igual dejamos una parte para nuestros clientes habituales de Purranque, Osorno y Santiago. Vendemos el kilo a $5 mil.
-¿Ustedes se reunirán en su acostumbrado simposio nacional?
-Sí, la próxima semana vienen desde la Red Apícola a realizar algunas grabaciones en mi predio para ese simposio. No tengo la fecha todavía, pero eso va todos los años. Se efectúa en diferentes regiones. Sólo por la pandemia se ha suspendido.
-¿Cuáles son los desafíos para este año en el trabajo apícola?
-Plantar más árboles nativos con el apoyo de la Conaf e Indap. A ver si me resulta, porque también tengo problemas con el riego. Esto tiene alta importancia en la producción apícola. Una colmena consume un litro de agua diaria y eso no es poco, porque donde hay doscientas colmenas se necesitan 200 litros diarios en este tiempo de calor. Ellas obtienen el agua de las vertientes, entre otras fuentes. Pero yo les tengo en su propio apiario un sistema de acceso al agua, pero de la que me vienen a dejar desde la municipalidad para consumo humano.
-¿Cómo califica esta última temporada apícola entonces?
-No ha sido buena. Se ha reducido a la mitad. En 2021 coseché 3.500 kilos de miel de tiaca y tineo. Y unos 1.200 kilos de ulmo.
-¿Cómo califica la ayuda del Estado para el rubro?
-No interviene en lo que debe normar. En regularizar y fiscalizar mejor los apiarios que llegan desde el norte con enfermedades y cosas raras. Aquí se instaló un apiario de fuera a 200 metros de mi propiedad. No se toman en cuenta los esfuerzos que realizamos los pequeños productores sureños para combatir la chaqueta amarilla, observando y cuidando los árboles en floración para que se desarrollen como corresponde. Debiera existir una ley que indique que los apiarios foráneos a un lugar se instalen a lo menos seis kilómetros de distancia, porque las abejas buscan néctar en un radio de hasta 3 kilómetros. En otras comunas esto está normado para no perjudicar a los apiarios que ya están funcionando. Acá no es así.
Tradición y normativa
Guido Gallardo ha dedicado 22 años de su vida a la apicultura. "Los Gallardo nos hemos dedicado por generaciones a la apicultura. Unos primos producen en Rupanco. Otro tío entregaba miel a Ambrosoli antiguamente. Y uno de mis hijos siguió en este rubro y en la actualidad tiene colmenares en la Región del Maule. No a todos les gusta la apicultura, porque le temen a la picada de la abeja. Personalmente me encanta. Es medicinal", aclara.
Y precisó que "en otros países desarrollados exigen plantar flores melíferas en el 5 por ciento de las propiedades, porque tienen claro que si se termina la abeja se termina el mundo. Tres años duraríamos. Las plantas melíferas son aquellas que participan de manera directa o indirecta en el proceso de elaboración de miel de abeja. Y es que las abejas recogen 4 ingredientes importantes de este tipo de plantas: néctar, polen, própolis y melaza. De todos ellos, los dos primeros son los más importantes. El néctar, que es la materia prima necesaria para que las abejas elaboren la miel; el polen, que sirve de alimento a las abejas. Pero además de elaborar miel, las abejas cumplen una función incluso más importante. Para realizar su tarea, visitan numerosas flores una tras otra, depositando en cada una de ellas el polen que se ha adherido durante su visita anterior. De esta manera, las abejas aseguran la polinización de numerosas especies vegetales".
Esto justifica, según Gallardo, la importancia de la labor de estas pequeñas polinizadoras, aunque es cierto que otros insectos contribuyen en menor medida en la fecundación de las flores.
"Y ojalá que la nueva Constitución regule esto como corresponde. Me refiero a la distancia de los apiarios. Aquellas abejas que las traen al sur con hambre y crías por nacer. Que salen y atacan a nuestras colmenas. Eso se llama pillaje. Se comen las abejas. Para efectuar una buena producción apícola entre agosto y septiembre hay que dar incentivo a la postura de abejas. A la reina en este caso. Para que exista una buena población cuando llegue la floración. Acá tenemos tres meses de flor nada más: diciembre, enero y febrero".