Acusan falta de un plan de apoyo para enfrentar el retorno de los turistas a la provincia de Osorno
FALENCIAS. Operadores y usuarios de Puyehue, La Costa y Puerto Octay aseguran que factores como la incertidumbre sanitaria, protocolos covid, informalidad, falta de mano de obra, entre otros, han influido para que los territorios tengan deficiencias en los servicios para responder a la gran demanda durante el verano. Seremi de Economía asegura que la región ha tenido un auge histórico de personas que se debe aprovechar.
Las comunas de Puyehue, San Juan de la Costa y Puerto Octay están entre las más visitadas a nivel país durante los meses de enero y febrero, con una tasa de ocupación superior al 80% en los recintos de alojamiento turístico, sumado a un alza exponencial en la actividad gastronómica, recreacional y comercial de los territorios.
Esta realidad es un factor positivo para operadores y familias, cuyos únicos ingresos están asociados a la llegada de visitantes a la zona, aunque aseguran no hubo estrategia de planificación desde las autoridades para enfrentar el retorno masivo de los turistas y apoyar al gremio. Esto, debido a que el aumento en la demanda turística evidencia falencias en los territorios en disponibilidad de alojamiento, oferta gastronómica, ordenamiento urbano, entre otros factores logísticos y operacionales.
Dirigentes del rubro aseguran que estos problemas son la consecuencia directa de los efectos causados por la pandemia del covid-19 al sector turismo en la provincia, que entre marzo del 2020 y septiembre del 2021 fue afectado por una gran depresión económica y social que provocó la quiebra en muchos emprendedores o la reconversión de sus negocios para sobrellevar la crisis.
Durante los primeros 18 meses de pandemia, las comunas de la provincia se mantuvieron la mayor cantidad de tiempo entre Fase 1 de cuarentena total y Fase 2 con cuarentenas de fines de semana, sumado a las restricciones de movilidad y desplazamiento de las personas, medidas implementadas por el Ministerio de Salud (Minsal) con el objetivo de intentar controlar la proliferación del covid-19 entre la población.
Fue precisamente a consecuencia de las restricciones y medidas sanitarias que distintos actores políticos, sociales y gremiales de la provincia advirtieron del perjuicio económico y daño irrecuperable al turismo en la zona, lo que hacía fundamental crear un plan de rescate y soporte especial para quienes ejercen este giro económico. Sin embargo, fue una solicitud que no se concretó
Masivo regreso
Karina Carrasco junto a su marido y sus dos hijos de 12 y 8 años, optaron por tomar vacaciones en la zona de Puyehue y Puerto Octay la primera quincena de febrero, encontrándose con graves problemas para encontrar un lugar donde hospedarse, lo que los obligó a solicitar pernoctar en casas particulares conseguidas por familiares desde Santiago.
"No pensamos que íbamos a tener problemas para encontrar un lugar donde dormir, por lo que viajamos directo de Santiago a Puyehue, pero las cabañas donde habíamos estado en otras oportunidades estaban ocupadas por trabajadores. Y si bien había oferta, eran valores muy desproporcionados, ya que eran como lugares "piratas". Así que unos amigos se pusieron en contacto con un conocido y logramos dormir dos noches en Osorno, pero no es lo mismo. En Octay la situación fue similar, por lo que fuimos por el día. Andaba mucha gente en la misma condición que nosotros, en general, si no tienes una casa de algún conocido donde llegar a vacacionar es complicado", señaló la profesora santiaguina.
Experiencia similar a la vivida por Josué Cárdenas, quien con un grupo de amigos llegó desde la Región del Maule hasta la provincia para disfrutar de una semana de vacaciones. Relató que si bien siempre tuvo considerado dormir en la casa de los abuelos de uno de ellos en Osorno, sus visitas a Maicolpué y Puerto Octay estuvieron marcadas por atochamientos viales en los accesos, falta de oferta en lugares para comer y un aspecto descuidado en las playas.
"Se ve poco orden, tachos de basura llenos por días y en los lugares recomendados para comer la espera era de horas para entrar. Entendemos que es por los aforos, pero igual hay menos oferta. Como siempre aparecen los servicios 'alternativos', pero con mucho aprovechamiento en precios. En general, se ve mucha gente, principalmente en espacios abiertos, pero que terminan igual aglomerados en los baños públicos, en los restaurantes o almacenes", indicó el estudiante de Antropología.