Elecciones y Pandemia son dos de las palabras que mejor podrían resumir lo ocurrido durante 2021 en Chile y la región. La primera ha significado cambios profundos y revisiones sobre la vida política y ciudadana nacional; la segunda, acompaña desde 2020 y tiene un potencial transformador sobre el transcurrir cotidiano: trabajo, estudio, vínculos, tecnología, entre otros, que nunca más se entenderán igual que "antes" de sumarla al hablar colectivo.

La crisis sanitaria ha sido profunda y ha cobrado -hasta ahora- 39 mil 059 vidas en el país. Los números por sí mismos impresionan, pero se pueden dimensionar mejor si se comparan con algunas referencias. Por ejemplo, el total de fallecidos a nivel nacional supera a la población completa de la comuna de La Unión, donde viven 37 mil personas, de acuerdo al último censo.

Pero más allá de los índices, cada punto en ese gráfico, implica el dolor de una familia, una tragedia que no se puede cuantificar, sino observar con solidaridad. También obliga a comprometer mayor responsabilidad, para que los contagios no se sigan multiplicando. En los últimos días, lamentablemente, se aprecia un alza exponencial de afectados en el país. Afortunadamente en la provincia, durante los últimos días varias comunas han ido avanzando en el plan Paso a Paso, desde Transición a Preparación, lo que da cuenta de un descenso en el número de contagios.

Aun asumiendo que el tema sufre de saturación informativa, conocer más antecedentes no busca alarmar, sino recordar que todavía es necesario mantener la prevención y que las mayores libertades logradas gracias a la exitosa campaña de vacunación, no deben generar sensaciones de falsa seguridad.

Por lo mismo, el vocabulario compartido todavía necesita el término "pandemia" para describir la experiencia actual, que se proyecta a 2022. En ese paso al próximo año se mezclará con las palabras herederas de "elecciones" (nuevo gobierno, por ejemplo) y, juntas, mantendrán en las conversaciones a otra no menos importante: "reactivación".

Hace unos días se realizó un homenaje de parte de Corpcarne y Sago A.G. al destacado investigador,. Ljubo Goic. Oriundo de la Región de Coquimbo, nos cuenta que su familia siempre trabajó ligada al comercio de vacunos, que en aquellos años eran traídos en arreo desde Argentina con muchísimo sacrificio. Si bien existía tren, el transporte terrestre era escaso. Por ello el trabajo a caballo tenía una importancia enorme para cualquier negocio pecuario. Estudió Agronomía en la Pontificia Universidad Católica de Santiago, y optó, entre varias ciudades, por venirse a trabajar a Osorno. Realiza su postgrado en Argentina y se casa con Norma Arend.

Todos los seres humanos tenemos la capacidad de desarrollar nuestra capacidad innovadora. Para don Ljubo, esta condición ha resultado innata a lo largo de su vida. Importante cualidad para un investigador, rol que desempeñó durante varias décadas en INIA Remehue. Quienes aún no saben, Ljubo tuvo injerencia directa, entre otras innovaciones, en el mejoramiento de suelos degradados para la zona centro-sur del país. Y como toda idea nueva, costó trabajo, hasta que productores clave comenzaron a mejorar su productividad gracias a sus sugerencias.

Posteriormente se desempeñó como director en Frima S.A. Como director de Corpcarne presidió el Cluster Cárnico Bovino, entre los años 2008 y 2011, período tremendamente fructífero en materia de gestión ganadera, valorización de los atributos nutricionales de la carne bovina, estudios econométricos para determinar las brechas de los diferentes eslabones productivos, estudios de normativas necesarias de modificar en el ámbito cárnico, exploración de alternativas para machos lecheros, entre otras.

En forma generalizada, ya sea como académico, profesor guía para tesistas de Agronomía, investigador, asesor y miembro de mesas sectoriales, se agradece la visión clara y oportuna para detectar el problema base, el más determinante para mejorar la ganadería, una visión apuntando a la vanguardia. Un ejemplo de que la experiencia, gentileza y asertividad son necesarias para modelar positivamente cualquier conglomerado sectorial.

Sergio Willer, presidente de Corpcarne