Correo
El cuello de botella
La situación mundial en época de pandemia no hizo más que acentuar los obstáculos del mundo laboral para lograr el estado de "pleno empleo" y los números están a la vista. Ya no sólo hablamos de la escasez de talento más aguda de los últimos 15 años y las cifras lo avalan. Actualmente, el 51% de las oportunidades laborales en el mundo requieren más de 8 años de experiencia, pero en contraste, solo el 35% de la fuerza laboral califica como "senior".
Esta disparidad entre la demanda y la oferta es todavía más pronunciada en una de las industrias sensibles del siglo XXI. Según nuestros reportes, el 88% de las oportunidades de empleo del sector tecnológico exigen un título técnico o universitario, condición que sólo cumple el 34% de los trabajadores de ese sector.
Otro efecto que hemos podido apreciar es la volatilidad del empleo. Desde 2016 a 2020, los puestos de trabajo transitorios han aumentado en un 16%, mientras que los puestos permanentes disminuyeron en igual proporción.
Estos números nos dejan una gran conclusión: La tarea pendiente tanto para candidatos, como para empresas es una sola: capacitación y formación continua.
Jorge Gamero
Dudas relevantes
La acusación de acoso que rodea a Gabriel Boric tiene un importante problema de tiempos, porque más allá de las declaraciones que hoy han emitido el candidato Boric, la electa diputada Emilia Schneider y la joven involucrada, no se entiende por qué no se hicieron antes. Hablamos de una denuncia que se realizó hace años y de un reportaje, el cual reavivó el tema, que se publicó hace más de un mes. Entonces, ¿por qué no se aclaró antes? ¿por qué las involucradas no realizaron estas mismas declaraciones apenas se realizó el reportaje?
Las dudas suman y siguen, y más allá de criticar las preguntas que realizan alrededor de un tema grave que las mujeres intentamos erradicar de nuestra sociedad, queda claro que se manipuló el silencio para no empañar las campañas políticas de Boric y Schneider.Pilar Riesco, socióloga
No repetir errores del pasado
El 4 de noviembre de 1970 los chilenos fuimos a las urnas para elegir un nuevo Presidente de la República. Los candidatos fueron: Jorge Alessandri Rodríguez, Salvador Allende Gossens, Julio Durán y el "Cura de Catapilco". Ganó Salvador Allende con un 34% de los votos; Julio Durán salió segundo, razón por la cual hubo que efectuar una segunda vuelta. En esta fase, los demócrata-cristianos decidieron apoyar, y votar, por Salvador Allende en el Congreso Pleno. Allende se comprometió, por escrito, a respetar y hacer cumplir la Constitución que nos regía; con posterioridad le dijo al periodista francés Regis Debrais, en una entrevista realizada en Chile, que este compromiso había sido sólo un mero trámite para llegar al poder. Lo que sucedió entre el momento en que Allende juró respetar la Constitución y el 11 de septiembre de 1973 es ampliamente conocido.
El domingo 19 de diciembre en curso los chilenos iremos a las urnas para elegir un nuevo Presidente. Nótese que a nuestra democracia "no le dio el ancho" para que una mujer pudiera competir en esta fase. Aunque el candidato Borich ha hablado duro en la campaña de lo demócrata que él es, ahora se pasea por todas partes con los comunistas, sus fieles amigos, repartiendo besos y abrazos a diestra y siniestra.
En la elección que nos espera el domingo 19 votemos por la libertad, por la seguridad de las generaciones por venir. No repitamos errores del pasado. ¡Viva Chile y nuestra democracia!Mauricio Pilleux Dresdner
5G en Chile
Chile tiene todo listo para estar a la vanguardia en la implementación de 5G SA en la región, incluso por sobre Brasil, y fue de los primeros a nivel mundial en presentar casos reales del uso de esta tecnología, como una primera mamografía remota exitosa. Esto se debe a que la pandemia no detuvo el proceso de licitación de frecuencias 5G.
El 5G no trae nuevas amenazas, como se ha planteado últimamente: si bien puede aumentar el riesgo de ciberataques porque habrá más gente conectada, también facilitará la creación de nuevas herramientas de seguridad para prevenir ataques con nuevas funcionalidades.
En lo positivo, las antenas tendrán un mayor alcance y permitirán llevar internet a zonas rurales y extremas. Cambiará la forma de cuidar a los enfermos, la telemedicina se impondrá y dispositivos tipo smartwatch podrán monitorear a distancia a los pacientes y alertar ante un comportamiento inusual.El futuro está a la vuelta de la esquina.
Juan José Oliver