Redacción

El actor Dwayne Johnson habló por primera vez públicamente de su conflicto con Vin Diesel que derivó en su abrupta salida de la saga "Rápidos y Furiosos".

En Vanity Fair, la estrella de Hollywood conocida como "La Roca" desde sus años en la lucha libre profesional, se refirió a las diferencias que los enfrentaron y aseguró que "somos totalmente opuestos, filosóficamente dos personas distintas y nos acercamos al negocio del cine de diferentes maneras".

La disputa comenzó en 2016 tras el estreno de la séptima película de la saga y mientras se preparaba el spin-off "Hobbs & Shaw" que debutó finalmente en 2019 con Johnson y Jason Statham. La tensión con Diesel era tal que el exluchador solo aceptó volver en la octava entrega de "Rápidos y Furiosos" si no compartía escenas con el protagonista histórico de la saga.

Una semana antes de concluir el rodaje, "La Roca" se descargó en Instagram, donde llamó "candy ass" a su compañero, insulto que se traduce literalmente como "trasero dulce" y que en Estados Unidos se usa para aludir a una persona cobarde.

Años después, el musculoso actor asegura que "ese no fue uno de mis mejores días, no debí haberlo compartido porque no va conmigo. A mí me gusta lidiar con la mierda lejos del público".

"Causó un estallido, pero fue interesante que todos los miembros del equipo encontrasen su forma de agradecerlo sin hacer ruido", añadió.

Encuentro no pacífico

Tras el estreno de "The Fate of the Furious" en 2017, octava cinta de la saga, la pelea entre ambas estrellas ya era conocida públicamente y la salida de "La Roca" de la franquicia era un hecho. Pese a ello los actores intentaron remediar la situación en una reunión "a la que yo no llamaría precisamente algo pacífico", según Johnson.

"Lo llamaría una reunión de aclaración. Él y yo conversamos en mi tráiler y lo que me quedó clarísimo de esa conversación es que somos totalmente opuestos. Y estuvimos de acuerdo en dejarlo ahí. Somos filosóficamente dos personas distintas que nos aceramos al cine de dos formas diferentes", detalló.

Sobre las declaraciones de Diesel acerca de la disputa en las que el actor afirmó que se debió a que como intérprete le exigía mucho a su contraparte, pues se siente "felliniano", Johnson afirmó que "una parte de mí siente que de ninguna forma dignificaría esa clase de tonterías con una repuesta. Soy diferente y me han criado diferente. Si siento que hay algunas cosas que hay que revisar y ocuparse de ellas, lo hago. Cuando leí eso, como todo el mundo, me reí, y estoy seguro de que de Fellini también está riéndose en algún sitio".

El actor William Shatner, que encarnó al capitán Kirk en la inmortal serie de ciencia ficción "Star Trek", viajó ayer al espacio a bordo del cohete New Shepard, desarrollado por la compañía Blue Origin del multimillonario Jeff Bezos.

A sus 90 años, Shatner se convirtió en la persona de más edad que ha viajado al espacio.

Junto a Shatner hubo otros tres astronautas a bordo: dos viajeros que pagaron por la experiencia -Chris Boshuizen, cofundador de la compañía de nanosatélites Planet Labs, y Glen de Vries, cofundador de una plataforma de investigación clínica-, además de Audrey Powers, vicepresidenta de Misiones y Operaciones de Vuelo de Blue Origin.

El New Shepard partió desde el oeste de Texas (EE.UU.) a las 9:50 hora local. Y los viajeros espaciales se situaron en una cápsula en el extremo superior del cohete que se elevó hasta más de 100 kilómetros de altura antes de regresar a la Tierra, en un periplo que duró unos 10 minutos.

Una vez en el espacio la cápsula se desprendió del cohete antes de descender sin ningún contratiempo.

A su regreso a la Tierra, Shatner tuiteó una cita de Isaac Newton: "No sé lo que puede parecerle al mundo, pero para mí ha sido como un niño jugando en la orilla del mar que se divierte ahora y después encontrando un guijarro más suave o una concha más bonita que las normales, mientras el gran océano de la verdad se extiende sin descubrir ante mis ojos".

Experiencia profunda

Una vez que aterrizaron, los viajeros espaciales fueron recibidos por el propio Bezos, que los fue abrazando conforme fueron saliendo de la cápsula.

Shatner estaba visiblemente conmovido por la experiencia y le dijo a Bezos que espera no olvidar lo que ha sentido.

"Es la experiencia más profunda que podría haber vivido, es extraordinario", afirmó el actor a Bezos, al tiempo que destacó cómo había visto "la vulnerabilidad del aire" que mantiene a la humanidad viva.

Shatner voló por primera vez en la vida real al espacio, tras hacerlo en la ficción a bordo de la mítica nave "Enterprise" en la serie "Star Trek", que emitió su primer episodio en 1966 y duró tres temporadas.

Más tarde, el artista volvió a encarnar al capitán Kirk en seis películas entre 1979 y 1991.

La "Niña con Globo" que Banksy autodestruyó tras ser subastado hace tres años vuelve hoy a la venta en Sotheby's y se prevé que multiplique varias veces su precio original. De esta forma el mercado del arte atrapa de nuevo al grafitero inglés que se resiste a ser parte de él pero rompe sus propios récords.

La historia se ha convertido en una de las más famosas del mercado de las subastas en los últimos años: "Niña con Globo" se remató el 5 de octubre de 2018 por 1,38 millones de dólares y minutos después de que cayera el martillo un sistema oculto en el marco rasgó el dibujo y lo convirtió en trizas de papel.

La obra debía haberse autodestruido completamente pero el sistema falló, según explicó el propio Banksy en su cuenta de Instagram: lo que trataba de ser un acto de resistencia ante el mercado del arte se dio la vuelta y convirtió la obra en una más mediáticas de todos los tiempos.

La coleccionista que compró la pieza tardó una semana en confirmar su postura y la obra, medio rasgada y más mediática que antes, fue renombrada por el propio Banksy como "Love is in the Bin" ("El amor está en la papelera").

En estos tres años, la obra se ha paseado por varios museos internacionales y ahora regresa a la casa de subastas donde se hizo famosa para venderse con un precio mínimo de 5,4 millones de dólares.

En marzo de este año, el artista vendió su obra más cara, "Game Changer", un dibujo que donó para recaudar fondos destinados al sistema de salud inglés tras la pandemia, que alcanzó los 22,4 millones de dólares.