La pandemia del sobrepeso
Uno de los efectos que ha dejado el covid-19 es el aumento de peso de los chilenos, que en promedio subieron 7.1 kilos en el último año y medio. Se trata de un problema preocupante, toda vez que se sabe que el aumento de peso generado por la poca actividad física puede convertirse en una bomba de tiempo para la salud de las personas.
Uno de los efectos que ha tenido la pandemia de covid-19, que ya se extiende por más de un año y medio en nuestro país, es el aumento de peso de la población nacional. De hecho, se calcula que los chilenos subieron en promedio 7,5 kilos, lo que ubica a Chile entre los cinco países con los mayores aumentos, superando la media global, que llega a 6,1 kilos. La razón de este problema de malnutrición podría hallarse -entre otros motivos- en las medidas implementadas para combatir el avance del covid-19, con extensas cuarentenas que fomentaban el sedentarismo al impedir el desplazamiento de las personas, y por consiguiente, frenar la posibilidad de realizar actividad física fuera del hogar. A ello se debe agregar también el trabajo de gran parte de la población desde sus mismos hogares, el incremento en el consumo de comida a pedido, generalmente poco saludable, y la preparación de comidas caseras altas en calorías.
Otro factor que incide, a juicio de los especialistas, es el poco consumo de agua, del que da cuenta un estudio realizado por la Universidad de La Frontera, que indica que la baja ingesta de líquidos también se asocia a un aumento de peso corporal. Este mismo estudio de la Ufro entrega cifras regionales del problema, al detallar que un 38,1% de las mujeres sostiene haber aumentado de peso y el 58,7% del mismo sexo declara haber disminuido su actividad física por el confinamiento.
Se trata de un problema preocupante, toda vez que se sabe que el aumento de peso generado por la poca actividad física puede convertirse en una bomba de tiempo para la salud de las personas, y podría ocasionar enfermedades cardiovasculares, diabetes, trastornos del aparato locomotor e incluso algunos cánceres, como el de endometrio, mama, ovarios, próstata, hígado, vesícula biliar, riñones y colon.
De ahí que sea necesario revertir a la brevedad este problema, en el entendido que retomando buenos hábitos de alimentación y ejercicio físico constante podrá lograrse un peso adecuado, lo que incidirá en la salud de las personas.
Cambiar malos hábitos es posible, pero para ello se requiere un férreo compromiso que involucre a toda la familia, ya que si se trabaja en equipo, es más fácil lograr objetivos que beneficien a todo el grupo.