Correo
Arturo Merino Benítez
En esta nueva conmemoración del natalicio del comodoro Arturo Merino Benítez, es oportuno referirme a este insigne aviador que a inicios del siglo pasado dejó una huella indeleble en beneficio del porvenir de Chile y sus habitantes.
Baldo Porkurica, ministro de Defensa Nacional
Juventud y libertad
Hoy en día, el ideal de libertad está muy presente cuando de juventud se trata. Desde pequeños se nos inculcan valores asociados al pensamiento crítico, liderazgo y autodeterminación, para aumentar la tolerancia y respeto de nuestras sociedades futuras.
Al mismo tiempo, no se puede hablar de juventud sin mencionar la tecnología, una herramienta tan poderosa y a la vez tan destructiva si no se le da un buen uso. Aparatos tales como, celulares, computadores, tabletas, televisores, videojuegos, entre otros, los cuales rápidamente van tomando un espacio considerable en nuestras vidas, comenzando por alteraciones en los ciclos de sueño, luego cambios repentinos en los comportamientos afectivos, un progresivo aislamiento social y luego… ¿y luego que vendrá? A raíz de esta alarmante problemática me cuestiono, ¿somos realmente libres los jóvenes de este moderno mundo?.
Antonia Porfiri Fanta
Hay que trabajar unidos
Es cierto, los resultados del pacto Vamos por Chile no fueron los esperados. Los 37 convencionales elegidos no fueron previstos ni por el más pesimista de los analistas. Sin embargo, este desenlace no puede desmoralizar a la derecha. Vamos por Chile no deja de ser el conglomerado más grande de la Convención. Si los 37 son capaces de mantenerse unidos, mayores serán las posibilidades de influir en los contenidos de la nueva Constitución. Es mucho más fácil negociar con un grupo de 37 convencionales que hacer lo mismo con 37 independientes con agendas propias.
Si los convencionales de derecha son capaces de entender que la única forma que tienen para influir en la Convención Constitucional es hacerlo unidos; entenderán que 37 convencionales no son tan pocos en un escenario tan complejo como el actual.
Juan Lagos Fundación para el Progreso