Comercio osornino en crisis: exige igualdad de condiciones para trabajar y el fin de la cuarentena en la zona
ECONOMÍA. Locatarios del Barrio Lynch aseguran estar al borde de la quiebra por restricciones en venta de productos. Emplazan a las autoridades a deponer confinamiento y tener las mismas oportunidades las que grandes cadenas de supermercados. Intendente Harry Jürgensen respondió que la prohibición es a desplazarse y no a comercializar.
El comercio local está en crisis a causa de todas las restricciones, fiscalizaciones y obligaciones que han enfrentado durante la pandemia que se transformó en la "tormenta perfecta" en el ámbito económico, familiar y de salud para cientos de personas que ven con impotencia y desesperación cómo están al borde de la quiebra sus negocios y emprendimientos, a los cuales han dedicado años de esfuerzo. Para todos es su única fuente de ingresos para sostener a sus familias.
Manifestación
Por estas razones dirigentes y locatarios del Barrio Lynch salieron ayer a las calles para exigir a las autoridades de Salud y Gobierno que pongan fin a la segunda cuarentena que enfrenta Osorno desde hace un mes, la que obligó a cerrar más del 80% de los locales y restringió la venta de productos en otros. Además, las emplazan a que generen igualdad de condiciones para trabajar- ya que según dijeron- existe una disparidad de criterios y una desventaja en las oportunidades laborales frente a las grandes cadenas de supermercados, a las que no se les imponen las mismas prohibiciones que al comercio detallista, lo que dicen, atentaría contra la libre competencia y el derecho de la comunidad de elegir dónde comprar sus insumos.
Desde el viernes que los más de 200 comerciantes de calle Lynch han instalado en sus vitrinas y fachadas banderas y globos negros, letreros con frases como "queremos y necesitamos trabajar para pagar arriendos y mantener a nuestras familias", "estamos viviendo una pandemia económica", "estamos solos en esta crisis sanitaria y económica las autoridades nos abandonaron", entre otras que reflejan la envergadura de la crisis que también impacta al resto del comercio de la zona centro, tal como ya lo han manifestado públicamente desde el sábado 3 de octubre con el inicio del confinamiento territorial en Osorno.
Trabajar es un derecho
Cerca de la 15 horas de ayer un grupo de locatarios del Barrio Lynch realizó una manifestación pacífica en representación de todos quienes trabajan en el tradicional sector para exigir públicamente a las autoridades que se implementen soluciones para controlar y prevenir la pandemia, las que incluyan a toda la comunidad y las actividades económicas que se realizan en la comuna.
"No existe un criterio claro de las autoridades para fiscalizar. Un día nos dicen que podemos, por ejemplo, comercializar por internet y entregar en nuestros locales los productos, pero cuando lo hacemos nos cierran ya que eso no se puede. Acá es pura gente que depende de sus negocios para su sustento y el de sus familias. No estamos pidiendo bonos ni ayuda del Gobierno que tampoco nos han apoyado en eso, lo que exigimos es nuestro derecho a trabajar tranquilos", manifestó Fabiola de la Hoz locataria del sector.
Mario Uribe, presidente de la Cámara de Comercio de Lynch, argumentó que el objetivo no es cerrar los supermercados que también son fuente laboral para muchas personas, sino que generar condiciones de igualdad para trabajar, lo que no ha ocurrido hasta ahora dejando al borde de la quiebra al comercio más pequeño.
"Estamos de acuerdo en que deben haber medidas de control, pero exigimos se termine con una cuarentena que sólo cumplen algunos y que están enriqueciendo a los dueños de grandes cadenas de supermercados. Siempre hemos tenido la voluntad de cuidarnos y a la comunidad, lo que se demuestra en las inversiones para cumplir con las medidas sanitarias, pero necesitamos igualdad de condiciones para trabajar que se permita que todo el comercio funcione y sean las personas quienes elijan dónde comprar y no un instructivo de desplazamiento que las lleva sólo a los supermercados", enfatizó Uribe.
Rodrigo Ibáñez, presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Osorno, comparte la molestia y preocupación, ya que asegura existe una disparidad en los criterios de fiscalización que están aplicándose de forma dispar entre las grandes cadenas y el comercio local.
"Le planteamos el tema a las autoridades regionales y nacionales porque estamos por la seguridad y salud de todas personas ante todo, pero debemos avanzar con urgencia en generar igualdad de condiciones laborales y a la hora fiscalizar. No vamos a coincidir nunca en qué es un artículo de primera necesidad, porque eso es muy personal y no corresponde entrar en esa libertades de cada individuo, pero acá existe un claro perjuicio del comercio local y el llamado a las autoridades nacionales es a corregirlo a la brevedad", expresó Ibáñez.
Restricción
El intendente regional, Harry Jürgensen, reiteró que las actividades no están restringidas en su desarrollo sino que el desplazamiento de las personas, las cuales deben contar con permisos para realizar ciertas actividades incluidas para ir hacia un trabajo que vende, distribuye o comercializa productos esenciales.
"Entonces si un supermercado vende productos esenciales, los trabajadores pueden llegar a cumplir sus labores. Ahora si el supermercado además vende otros productos puede hacerlo ya que no está prohibido. También los clientes pueden desplazarse a comprar productos esenciales pero no está prohibido comprar otras cosas si están en el mismo local, aunque no sean esenciales", detalló el intendente.
Agregó que en todo negocio pequeño o grande que venda productos esenciales y otros productos lo pueden hacer sin inconveniente. "Eso puede ser en el Barrio Lynch y cualquier otro barrio de Osorno y el país. Además, los negocios que no son de productos esenciales y los atiende la misma persona porque está en su casa lo puede hacer, porque no significa desplazarse que es lo que está restringido (…) esperamos la movilidad esté baja, la cifras sigan disminuyendo y así terminar con la fase 1 (cuarentena) y ojalá pasar a fase 2 de transición. Comprendo que muchos comerciantes pequeños y medianos no pueden desplazarse a atender sus negocios, pero acá el bien es superior que es la salud de todos", explicó el jefe regional.