Desafíos para la vejez en el país
Mucho puede hacerse para seguir mejorando indicadores, sobre todo en salud y ofrecer panoramas y programas de alimentación más saludables. Según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), seis de las regiones del país podrían superar el millón de habitantes para el año 2035.
Estudios de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) indican que una persona que nace en América puede aspirar a vivir 75 años, casi cinco más que el promedio mundial, aunque las enfermedades, entre ellas el covid-19 que con carácter de pandemia ataca en todo el mundo, son los principales retos.
Hay que poner atención en las enfermedades emergentes, como la obesidad y el sedentarismo, que sin lugar a dudas se han incrementado durante las cuarentenas. La obesidad, por ejemplo, es uno de los principales factores de riesgo para padecer una enfermedad crónica. Así, en el continente la tasa de obesidad duplica el promedio global: 26,8% frente a 12,9%. Además, el 15% de la población mayor de 18 años vive con diabetes, un porcentaje que se ha triplicado durante la última década.
Y aunque la mortalidad por enfermedades cardiovasculares ha disminuido en promedio en América, sigue siendo la principal causa de muerte. El cáncer, en tanto, provocó en el continente la muerte de 1,3 millones de personas en 2012, y el 45% de ellos antes de los setenta años. Según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), seis de las regiones del país podrían superar el millón de habitantes para el año 2035.
Chile envejece a tasas aceleradas. El fenómeno tiene repercusiones de salud, económicas y sociales que exigirán repensar la forma en la que hemos construido el país y cómo lo haremos en el futuro. El envejecimiento poblacional presenta desafíos de cómo preocuparse de esa gran masa ciudadana que vive más años, y que a la vez exige más atención. Sin embargo, mucho puede hacerse para seguir mejorando tales indicadores, sobre todo en salud y ofrecer panoramas y programas alimentación más saludables para la población, con el fin de que ese aumento de expectativas de vida sea con calidad.
Al observar indicadores simples como las pensiones promedio, o el acceso a la salud, nos damos cuenta que Chile no facilita la vida de la tercera edad. Y esto podría ser peor conforme pasen los años y observemos un incremento de este segmento.