"Nunca he ido al Dakar pensando que no soy capaz de competir por un objetivo importante"
Estos últimos días, Pablo Quintanilla afinó los últimos detalles antes de embarcarse rumbo a un nuevo Dakar. Y es que ayer, el deportista viajó hacia Arabia Saudita con una maleta cargada de ilusiones.
Y no es para menos. Después del brutal accidente y grave lesión de tobillo sufrida en el Dakar 2019, que lo sacó del podio de la competición que se desarrolló íntegramente en tierras peruanas, el piloto viñamarino pasó por un extenuante proceso de recuperación.
Fueron siete largos meses de esfuerzo, de levantarse una y otra vez, y de mucha paciencia, antes de volver a competir sobre una moto. Su regreso fue en gloria y majestad en el Atacama Rally, dando un golpe impensado en su retorno arriba de las dos ruedas.
El último tiempo, "Quintanilla" estuvo entrenando en España y Marruecos junto al Team Husqvarna, sesiones que lo invitan a ilusionarse para un Dakar que lo encontrará más fuerte y maduro, justo cuando la carrera abandonará Sudamérica después de 11 años para disputarse por primera vez en Medio Oriente.
"Quedé con muy buenas sensaciones, en general sentí que fue la continuación del ritmo y el nivel que había recuperado en el Atacama Rally, y que después también mostré en Marruecos. Probamos el nuevo sistema de roadbooks, que es muy distinto al que veníamos usando por años, y no tuve mayores problemas, salvo las confusiones habituales de empezar a trabajar con nuevas herramientas, como le pasa a todo el mundo cuando se parte con algo nuevo", explicó "Quintafondo" sobre las últimas prácticas con el equipo.
-Luego de la larga recuperación de su lesión, salió primero en el Atacama Rally y segundo en el de Marruecos, en las últimas fechas del Campeonato Mundial de Rally Cross Country de la FIM. ¿Cuáles han sido las claves para volver de esa manera tras la grave lesión, y si este momento da para pensar en grande en el Dakar 2020? ¿Esperaba encontrarse en este nivel en tan poco tiempo después del accidente?
- No existe una sola clave que explique cómo saqué adelante este año, porque es la suma de muchos factores: ganas de superar la lesión y de salir adelante, compromiso, esfuerzo, perseverancia y amor por mi deporte. Además, hubo un grupo de personas que estuvieron siempre a mi lado en los siete meses que tardé en volver a competir, que me apoyaron desde diferentes veredas. No fue poco tiempo, todo lo contrario, fue un proceso progresivo y que demandó todo mi compromiso, pero que valió la pena porque cuando estuve listo, regresé ganando el Atacama Rally y terminé segundo en Marruecos. Y sobre pensar en grande en el Dakar, la verdad es que siempre lo he sentido así. Nunca he ido al Dakar pensando que no soy capaz de competir por un objetivo importante; mi meta siempre fue y será estar adelante.
- Después de una versión recortada en Perú, el Dakar en Arabia Saudita tendrá una distancia que ya se acerca a la habitual de esta prueba. ¿Siente que su tobillo y su cuerpo ya están a tope como para soportar un nivel de exigencia mayor a la que tuvo después de su recuperación?
- Físicamente estoy en condiciones de enfrentar la carrera al máximo nivel desde el primer al último día, aunque obviamente en el Dakar también hay factores externos que te ayudan o te restan: la extensión de la etapa, una navegación precisa, un piso que te acomoda más y otro que te complica, o sentir que a veces corres en tu día y al siguiente no vas tan fino en la moto. El tobillo aguanta, el doctor Manuel Pellegrini me revisó y me dijo que estamos listos para competir durante dos semanas. Ahora solo tengo que hacer mi trabajo.
- La organización del Dakar entregó un detalle sobre el recorrido en Arabia Saudita: el 75% será en arena. ¿Qué espera de una carrera con esas características?
- La primera semana será por caminos y rutas de montaña, partes rápidas, pero también rompedoras, por lo cual no puedo descuidarme. Después del descanso, cuando pasemos a la arena y las dunas, estaré en un piso que domino mejor y seguramente podré subir el ritmo y atacar más seguido.
- Un tema no menor será que no habrá prólogo ni toma de contacto, con una primera etapa de 319 kilómetros contra el crono y nada menos que 752 en total. ¿Qué tan complejo es arrancar así, sin tiempo para entrar en sintonía ni especular mucho?
- Para serte franco, con el nivel de los pilotos que me toca competir, no existe un día o una etapa más fácil que otra, estás al límite del kilómetro uno al último. Así que es complejo siempre, exigente desde que te levantas hasta que te acuestas. El Dakar te demanda el máximo esfuerzo físico, técnico y mental, porque además de ir rápido y soportar la presión que ponen, sabes que no puedes equivocarte en la navegación o les darás ventaja.
- Mucho se ha comentado que la carrera puede ser menos exigente que las de Sudamérica, pero eso se compensará con una navegación más complicada, que se suma al hecho de que anochecerá temprano, con el consecuente riesgo de terminar las etapas en plena oscuridad. ¿Cómo se ha preparado para enfrentar esos escenarios?
- En general, los pilotos de punta, al menos los de moto, compartimos una visión totalmente opuesta y pensamos que este Dakar será más complicado por varios factores: nadie conoce los terrenos, no tenemos referencias geográficas porque jamás hemos pasado por ahí, hay varias etapas maratón y, más encima, con el nuevo formato de navegación en algunas etapas nos entregarán el roadbook 15 minutos antes de largar. No veo por dónde esta carrera pueda ser más fácil que las anteriores.
- Me imagino que ya leyó la guía práctica del Dakar 2020 que se disputará en Arabia Saudita. Habrá que ser bien consciente y respetuoso de la ley islámica, con las prohibiciones con ciertas comidas y el alcohol, consideraciones especiales con la vestimenta y tatuajes, y el recato con las muestras de afecto...
- Son reglas que debemos respetar al pie de la letra, y en ese sentido las fechas del Mundial en Abu Dhabi y Marruecos ya nos han enseñado el camino a seguir. En mi opinión, esto se trata de asumir que eres visita en una tierra islámica, donde las reglas las pone el dueño de casa y hay que asumirlo con la mejor actitud. Estoy seguro que sabremos convivir con las restricciones que ponen a nuestro estilo de vida occidental, pero principalmente porque vamos a competir y la mayor parte del tiempo estamos enfocados en preparar la carrera o arriba de la moto.
5 al 17 de enero se disputará el Dakar, que tras 11 años en Sudamérica se correrá en Medio Oriente.
7.856 kilómetros de extensión total tendrá el itinerario del Dakar2020, con más de 5 mil de ellos contra el reloj.