El secretario general de la Ocde, Ángel Gurría, ha alertado sobre los efectos de la desigualdad educativa, que puede generar "una escasa movilidad social hacia arriba, reducir la participación democrática, fortalecer el extremismo democrático y el populismo que vemos actualmente". Las declaraciones las ha formulado en la presentación del último informe Pisa de su organismo, a partir de la aplicación de la prueba en 2018 a 600 mil alumnos de 79 países, incluyendo Chile.

Pisa es el Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes, destinado a examinar cada tres años a los alumnos en Lectura, Matemáticas y Ciencias, pero sobre todo evaluar cómo pueden aplicar lo que saben. Las pruebas de la edición de este año se enfocaron en la comprensión lectora y reflejaron que el 10% de los alumnos más favorecidos superaron en 141 puntos al 10% de los más desfavorecidos, lo que equivale a tres años de escolarización.

Sólo siete países de los 79 analizados mejoraron en los test, pero en general se vio que difícilmente los estudiantes pueden diferenciar entre un hecho y una opinión al leer un texto de algo que no le resulta familiar. China desplazó a Singapur como el país con la mejor educación: sus estudiantes lograron mejores resultados en las tres asignaturas. El tercer puesto en las tres materias fue para Macao, una región especial administrativa de China, confirmando así el predominio educativo asiático. Chile lideró el puntaje en América Latina en Lectura y Ciencias, con 452 y 444 puntos, respectivamente, pero estando bajo los promedios Ocde, de 487 y 489. En Matemáticas, fue segundo en Latinoamérica, tras Uruguay. El promedio general de Chile fue 457 y ocupó el lugar 49 de los 79 participantes.

Más allá de las estadísticas, resulta preocupante que un porcentaje alto de nuestra población no cuenta con las competencias básicas para su vida, especialmente en términos laborales. Preocupa que estos problemas se agudicen debido a una educación incompleta o deficiente. Inquieta, porque al carecer de competencias básicas, se les dificulta avanzar en capacitaciones más específicas, definiendo así una fuerza laboral limitada y eventualmente poco productiva.

Cuando se dice "nadie quede afuera" estamos hablando de inclusión que es la actitud, tendencia o política de integrar a todas las personas en la sociedad, con el objetivo de que puedan participar y contribuir en ella y beneficiarse en este proceso.

La inclusión busca que todas las personas o grupos sociales puedan tener las mismas posibilidades y oportunidades para realizarse como individuos.

La sociedad actual promueve la equidad en un sentido amplio, afirmando el valor de la diversidad y la necesidad de la inclusión. Los conceptos de Necesidades Educativas Especiales (NEE) y de inclusión cobran fuerza, con la reafirmación del derecho fundamental de todos los niños y jóvenes a acceder a la educación, reconociendo que cada uno de ellos "posee características, intereses, capacidades y necesidades de aprendizajes que le son propios".

En términos generales, se considera que un estudiante presenta necesidades especiales cuando por "una amplia variedad de razones" muestra dificultades mayores en comparación al resto de sus compañeros para acceder a los aprendizajes que le corresponden y requiere de apoyo extraordinario y especializado. Y debemos ser capaces de incluir a todos los individuos en el proceso educativo, sin importar su condición, origen, raza, religión o género.

Es por esta razón que la formación de los estudiantes de Técnico en Educación Especial es tan importante, ya que se forman profesionales alineados con temáticas actualizadas. Son capaces de colaborar e integrar equipos que trabajan con estudiantes con Necesidades Educativas Especiales de carácter transitorias y permanentes, demostrando manejo de grupo y resolución de conflictos en escuelas, colegios con proyectos de integración, hogares de niños, centro de estimulación temprana, salas de cunas, jardines infantiles con integración, ejercicio libre de la profesión en instituciones privadas y públicas, aplicando competencias técnicas propias del área y las relacionadas con la adaptación, comunicación, la colaboración eficiente con el equipo de trabajo y el compromiso personal y grupal.

Karina Sandoval, jefa de carrera Técnico en Educación Especial Instituciones Santo Tomás Osorno