Ex intendentes analizan el actual escenario y proponen soluciones
CRISIS SOCIAL. Coinciden en que se debe escuchar las demandas de la gente, pero también en hacer cambios constitucionales para un nuevo contrato social.
Conscientes que el estallido social que se viene registrando hace más de una semana en el país, no se soluciona de la noche a la mañana, tres ex intendentes de Los Lagos analizaron ese movimiento, al mismo tiempo que deslizaron algunas propuestas con las que pretenden colaborar a superar esta crisis.
Leonardo de la Prida, quien lideró el Gobierno Regional entre 2015 y 2018, comentó que "lo importante es seguir escuchando a las personas" y descartó la existencia de una confabulación tras esta señal de descontento. "Lo que hay es un sentimiento espontáneo de la comunidad, que ya no quiere más con la desigualdad".
A su parecer, ya no es suficiente "con cambios cosméticos, como el de gabinete". De la Prida planteó que en su lugar "debe haber un gobierno de unidad nacional, porque lo que pasó fue muy grave. Hay personas muertas en la calle".
Dijo sentirse extrañado que ningún líder político haya expuesto la necesidad de modificar la conformación del Tribunal Constitucional, además de devolver a la Corte Suprema la facultad de decretar recursos de inaplicabilidad. "No puede ser que haya un tribunal (Constitucional) por sobre la Corte Suprema. Eso me parece grave. Está bien que haya un control de las leyes si son inconstitucionales o no, pero que se haga un control preventivo, no cuando la ley está vigente", postuló el abogado.
Asimismo, se mostró crítico respecto de la aplicación del toque de queda. "Algunos podrán opinar que fue necesario en algún minuto; yo opino que fue un detonante de mayor rabia y de cosas incontroladas a las que no sabemos cómo se llegó. Hay muchas cosas que se nos escapan, cuando generamos un estado de emergencia y un toque de queda", reflexionó.
Responder a la demanda
De su lado, Sergio Galilea, ex intendente de Los Lagos entre 2008 y 2010, postuló que se debe entender que hay una voluntad ciudadana mayoritaria, que se ha movilizado en forma masiva. "Y eso tiene un norte, que busca justicia social, mejores salarios y una sociedad igualitaria. Este es un país que se ha vuelto caro, abusivo y desigual".
Estimó necesario concentrar los esfuerzos "en atender esa demanda", lo que considera debe incluir un concepto de descentralización. "Hay que buscar con urgencia, antes de la elección de gobernador regional (en octubre de 2020), una modificación de aspectos fundamentales para dotar a esa autoridad de más atribuciones y disminuir el rol del delegado presidencial", expuso.
Para Galilea, el país requiere de un nuevo contrato social, "que tiene que expresarse en un nuevo marco constitucional", que debería considerar "mecanismos institucionales que encaucen esta movilización ciudadana".
Sobre las acciones que ha emprendido el gobierno, dijo que "son insuficientes" ya que "todavía no procesa una lectura, que muestre una respuesta que sea equivalente al alcance de esta movilización social".
Nueva constitución
Patricio Vallespín, quien dirigió el Gobierno Regional entre 2002 y 2004, sostuvo que primero se debe hacer una autocrítica, en cuanto a que "no se hizo todo lo que se podía hacer; otras cosas se hicieron mal".
En cuanto al cambio de gabinete, opinó que no es suficiente. "Es lamentable, porque era una gran oportunidad para decir que Chile empezaba a construir las bases de una nueva Constitución, sobre la cual realizar un nuevo pacto social. Siento que no hay ninguna razón de fondo, clara, para que la gente se desmovilice", adujo.
A su parecer, además se requiere "la revisión de todos los temas en que haya abusos y hacer los cambios legales". Sin embargo, aseveró, "nada de eso se anuncia. Por tanto, no veo muchas salidas positivas, en lo que se viene para el país".
Vallespín estimó que la agenda social que presentó el Presidente Sebastián Piñera "es algo que hay que hacer. Pero la pregunta de fondo es: ¿cambia la sensación de abuso de la gente, de que ahora sí vamos a tener un país más igualitario? Mi impresión es que no y por eso la autocrítica genuina que tiene que hacer toda la clase política, de que no se hizo todo lo que se pudo. Veo con preocupación el futuro del país. El gobierno no dio ninguna señal que permita a la gente visualizar que se viene un cambio estructural", añadió.
Al ser requerida la participación de otros ex jefes regional, no hubo respuesta de Nofal Abud a los llamados telefónicos; mientras que Jaime Brahm se restó de entregar sus comentarios sobre este tema.