Nestlé cerrará su planta en Llanquihue: operaciones serán hasta fin de mes
ECONOMÍA. Trabajadores ya fueron informados y se les ofreció un plan de salida y reubicación. Empresa dice que concentrará producción láctea en Osorno y Los Ángeles.
La decisión estratégica de Nestlé Chile de concentrar su producción láctea en sus plantas de Cancura (Osorno) y Los Ángeles (Biobío) implicará el cese de operaciones en Llanquihue, efectivo desde el próximo sábado 31 de mayo, fecha en que finalizará la producción en estas instalaciones.
Esta medida responde al plan de modernización y eficiencia de la compañía e implicará el traslado de los procesos productivos de su fábrica en Llanquihue.
Patricio Cumilef, presidente del Sindicato de Trabajadores N° 1 de Nestlé Chile Fábrica Llanquihue, confirmó que el cierre ocurrirá "la próxima semana. Trabajaremos hasta el 28 o 29, arreglaremos todo lo legal con la gente y al día siguiente ya no habrá trabajo".
Precisó que en la planta existen dos sindicatos y que el N° 1 agrupa a 56 operarios que perderán su fuente laboral.
"Para mí es una pena, una tristeza, por todo lo que Nestlé ha significado en Llanquihue. Es difícil que llegue otra empresa como Nestlé a Llanquihue. Anoche no pude dormir hasta las cinco de la mañana. Me preocupa eso, como dirigente", admitió.
Cumilef dijo que el fin de las operaciones de la planta obedece "al avance de la tecnología. La fábrica ya no reúne las condiciones para implementar los estándares que Nestlé necesita para sus procesos". Añadió que las instalaciones de Cancura son nuevas y modernas: "Desde que esa fábrica se inauguró, hace más de diez años, sabíamos que todos los procesos lácteos se concentrarían allí". Por esta razón, Cumilef, quien trabaja en el área de bodegas y logística, aseguró que este anuncio no los sorprende.
Especificó que, tras la paralización de la torre de secado en septiembre de 2023, la planta dejó de producir leche en polvo, limitándose desde entonces a elaborar crema y precondensados que eran enviados a la fábrica de Los Ángeles.
Respecto a las condiciones de salida, resaltó que lograron un acuerdo satisfactorio para el pago de las indemnizaciones. "No podemos reclamar. Nestlé es una empresa que ha cumplido con todo, por lo que no tendremos motivos para reclamar algo el día de mañana. Ya nos mostraron los números y no veo a nadie disconforme", sostuvo.
Finalmente, el líder sindical comentó que otra empresa ocupará esas dependencias y concluyó: "Creo que vienen a prestarle soporte a la fábrica de Cancura. Creo que están muy relacionados con Nestlé. De todos los que nos vamos, quedarán unos 60 trabajando, haciendo lo mismo, pero para otra empresa".
Modernización
Gerardo Imbarack, gerente de Comunicaciones de Nestlé Chile, explicó que en Cancura y Los Ángeles se concentrará y optimizará la producción de lácteos. El cese de la actividad en Llanquihue responde a "un proceso de modernización. Estamos invirtiendo fuertemente en fábricas más nuevas, con mayor tecnología, trasladando la producción hacia ellas".
Consultado sobre la posibilidad de elevar dichos estándares en la planta de Llanquihue, Imbarack sostuvo que "el escenario más adecuado era la venta, proceso que está muy avanzado con una empresa del sector que tomaría el control de esta fábrica, lo que garantizaría la continuidad laboral y operacional. Queda como un polo industrial que se mantiene. Nestlé Chile seguirá trabajando con ese operador", aseguró.
No reveló el nombre de la empresa compradora, ya que "se está negociando y cerrando el proceso de compraventa de activos".
Especificó también que este cierre tampoco afectará la compra de leche fresca a los productores locales.
Respecto al impacto en los empleados, el vocero de Nestlé indicó que el viernes pasado se comunicó la decisión y se presentó el plan de desvinculación para 107 personas, "con quienes se están analizando caso a caso las opciones para ofrecer las mejores condiciones posibles. (...) Este es un número aproximado, porque todo comenzará a analizarse la próxima semana".
Esto también implica que una parte reducida de los trabajadores podrá ser reubicada en las otras dos plantas que asumirán la producción láctea. "El número exacto aún se está definiendo, porque el proceso de reubicación no ha concluido", especificó el ejecutivo.
Con todo, Imbarack afirmó: "No es un adiós, sino un hasta luego, porque seguimos presentes en la región".
Los Productores
Por su parte, Eduardo Schwerter, presidente de Agrollanquihue, entregó la visión del gremio productor: "De acuerdo con lo informado por ejecutivos de la firma, la medida correspondería a un reordenamiento interno de la empresa. Sin embargo, lo importante para nuestro gremio y para los productores de la provincia de Llanquihue es que la industria se mantendrá como poder comprador de la leche producida en el distrito entre Purranque y la provincia de Chiloé, operando a través de un nuevo procesador, que trabajará bajo el mismo estándar y requerimientos de Nestlé, lo que no afectaría, según se nos informó, la relación con los productores de leche cruda de la zona".
El Peso de la Historia
Para comprender el peso histórico de la industria láctea y de Nestlé en la zona, el historiador local Pablo Fábrega aporta una perspectiva crucial: con la instalación de IANSA (Industria Azucarera Nacional) por parte del Estado, el pequeño pueblo de Estación Llanquihue se transformó en el primer polo industrial de la Provincia de Llanquihue.
Esto reforzó una industria propia de la región que compitió a nivel nacional en su rubro: la Lechera del Sur, fundada en 1950, con 1572 socios locales y enormes plantas en Nueva Braunau, Fresia, Los Muermos, Frutillar y Riachuelo, dando trabajo a miles de personas al comprar leche a pequeños ganaderos.
Hacia fines de la década de 1960, la Lechera del Sur, con sede principal en Llanquihue, se había convertido en pionera en Chile, "pero esto cambió rápidamente en 1975 con el drástico proceso de apertura de mercados impuesto por la dictadura cívico-militar, lo que significó mayor competencia y alza en los costos de producción". Ya en 1958 se había instalado en Llanquihue la empresa Chiprodal, subsidiaria de Nestlé, la cual adquirió en 1993 la Lechera del Sur para cerrarla y transformarse en la empresa de productos lácteos más importante a nivel nacional. "Con ello, el círculo virtuoso de apoyo a los pequeños ganaderos se cerró, pues sólo los grandes, con capital suficiente, podían abastecer a Nestlé", dice.
Cierre en Osorno (2015)
El cierre de la planta de Nestlé en Llanquihue tiene un antecedente regional: el de la planta de Ovejería, en Osorno, que operó durante 70 años (desde 1945).
Este cierre se debió también a la decisión de potenciar las instalaciones inauguradas en 2012 en el sector de Cancura (Osorno), con una inversión de 140 millones de dólares. Este movimiento representó una clara estrategia de consolidación y modernización.
En Ovejería cesó el secado de leche en polvo, pero se continuó recibiendo leche fresca para su despacho a otras fábricas. De los 113 trabajadores de Ovejería, 64 fueron despedidos y 49 fueron reubicados en otras instalaciones de Nestlé. En su momento, la reacción de la Federación Nacional de Productores de Leche fue calificar cualquier cierre de planta como "lamentable" por su impacto social, aunque reconociendo que Nestlé debe tener claros sus planes productivos.
Actualmente, la compañía opera ocho fábricas en el país, incluyendo la de Llanquihue (próxima a cerrar). Las otras siete localizaciones son Maipú, Graneros, San Fernando, Los Ángeles, Teno, Cancura (Osorno) y Macul.