Crónica El Austral
E pasado 23 de marzo, a las 6 de la mañana hora de Bélgica, falleció el sacerdote fray Remo Pistrín Bertuzzi, de la Orden Franciscana Misionera Capuchina, quien estuvo a cargo de diversas parroquias de Rahue Alto y Osorno, donde los fieles católicos recuerdan con cariño su constribución social y religiosa en aquel sector de Osorno.
El padre Remo nació el 1 de septiembre de 1935 en Rivignano, localidad y comuna de la provincia de Udine, Región de Friuli-Venecia Julia, Italia, hijo de Pietro Pistrín y Gentille Bertuzzi. Con dos hermanos y una hermana, cuando tenía 5 años su familia emigró a Bélgica, a la región de Valonia, donde su padre se desempeñó en las minas de carbón.
Labor religiosa
A los 14 años, el joven Remo ingresó a la Orden Capuchina, donde hizo su profesión perpetua el 21 de septiembre de 1956. Ya ordenado sacerdote, llegó a Osorno en 1964 por invitación de fray Francisco Valdés para colaborar en la diócesis, al igual que otros capuchinos belgas.
Fue destinado a la Misión de Rahue, en la Ruta U-220, desde donde atendió la naciente Bahía Mansa, erigió la capilla de la localidad costera e introdujo la fiesta de San Pedro.
En 1970 fue trasladado a la nueva parroquia Jesús Obrero, en la población García Hurtado de Mendoza, en Rahue Alto Sur, donde asumió como párroco y organizó nuevas actividades pastorales, tales como el grupo juvenil, scouts, implementó la catequesis familiar, terminó la primera iglesia parroquial, y las capillas San Pedro y San Pablo, y Virgen de los Pobres.
Desde 1975 fue el último vicario general del obispo Francisco Valdés, a quien sucedió en el gobierno de la diócesis como vicario capitular tras el deceso del obispo en enero de 1982; ejerció aquel cargo hasta enero de 1983, cuando asumió el nuevo obispo de Osorno, Miguel Caviedes Medina.
En San Leopoldo Mandic
En 1986 fue nombrado el primer párroco de la nueva parroquia San Leopoldo Mandic, en población Las Vegas, donde amplió la actual iglesia parroquial, construyó la residencia y la casa pastoral. También erigió las capillas de Fátima, Santa Teresa de los Andes y Jesús Misericordioso; e implementó el comedor Mateo 25. Permaneció en el cargo hasta 1996, cuando regresó a su país, donde su congregación lo destinó a la acción parroquial y a la formación de novicios.
1970 fue trasladado a la parroquia Jesús Obrero, en la población García Hurtado de Mendoza, donde organizó actividades pastorales, tales como el grupo juvenil, scouts y catequesis familiar.