Locales cerrados y escasa visibilidad: la realidad que afecta al Pueblito Artesanal
ZONA CENTRO. Pese a estar en un punto neurálgico de la ciudad, la mayoría de los negocios están cerrados casi permanentemente. Urbanista apunta a que se desconectó de los espacios que identifican a Osorno, por el tipo de comercio que se instaló.
Un importante punto de la ciudad, como lo es el Pueblito Artesanal de calle Mackenna, se encuentra por años funcionando en su mínima expresión, ya que muchos de sus locales permanecen con las cortinas cerradas, sin mayores explicaciones de quienes arriendan estos espacios al propietario del recinto, que es el municipio de Osorno.
El espacio fue inaugurado el año 2002 para mostrar la artesanía local y oficios, pero poco a poco fue perdiendo fuerza, lo que se atribuye a que por un lado los locatarios no le dan uso diario y, por otro, su ubicación detrás del mall Portal Osorno lo deja desconectado de importantes puntos del sector centro de Osorno.
Muchos deciden cerrar
El presidente del Pueblito Artesanal, Andrés Mancilla, señaló que el problema está en que los comerciantes no van a trabajar a los locales, pese a que sí llega público al lugar buscando principalmente obsequios fuera de lo común.
"No es que el Pueblito esté malo, porque yo estoy allí desde que se abrió. Llevo 23 años trabajando y vendemos, vivo de esto, llega gente, quizás no tanta, pero los que llegan andan comprando o buscando reparaciones. El problema es que si los locatarios no van, menos gente nos llega", aseguró
El dirigente señaló que este es un problema que se ha tratado durante años, ya que la municipalidad tampoco exige que los locales se abran.
"Lo que sucede es que hay gente de la tercera edad y entiendo que es difícil para ellos en invierno, pero también pueden mandar a los hijos, nietos o sobrinos. Creo que tenemos que tener una reunión con el alcalde y que se revisen los contratos", sostuvo.
Mancilla agregó que en la práctica, a muchos de estos locales que permanecen cerrados se les está dando uso de bodega, mientras los arrendatarios siguen vendiendo en sus casas.
Un lugar desconectado
La arquitecta, magister en urbanismo de la Universidad de Chile y docente de la Universidad de Los Lagos, Isabel Alt, comentó que este es un espacio estratégico de la ciudad, sin embargo, la evolución urbana de Osorno lo terminó dejando como un remanente de la urbe.
"No se ha considerado su puesta en valor como un elemento importante de la identidad local y es un lugar con historia, que anteriormente fue mucho más activo y atractivo para las personas. La ciudad ha crecido, ha evolucionado, han llegado nuevos comercios y este espacio ha quedado ahí sin evolucionar en su historia y en su entorno adyacente", manifestó.
La experta añadió que antiguamente el Pueblito Artesanal se encontraba conectado con la plazuela Yungay, que es un espacio muy importante para Osorno y para los turistas, por lo que desde ese punto de vista había una mayor permeabilidad hacia el sector de pueblito.
Al otro lado está el bandejón, que si bien permite un paseo a pie o en bicicleta, mostrando elementos muy típicos de la ciudad, como las casonas, luego se corta por algunas edificaciones comerciales como el mall por ejemplo, que no tienen mucho que ver con la identidad local, que es donde debiese ubicarse un recinto como el Pueblito Artesanal.
"Hay muchas personas que ni siquiera se enteran de que está ahí. En realidad, quienes somos de Osorno lo conocemos porque hemos vivido mucho tiempo aquí y sabemos que existe. El pueblito pudiese ser un punto atractivo para el turista, pero realmente no está conectado con los puntos que el turista visita", indicó.
Otro de los aspectos a considerar, según la urbanista, es que el auge del comercio barato y de la digitalización de los pedidos ha hecho que muchas veces la mayoría de las personas prefiera lo rápido, dejando de lado el valor de la compra de un artículo con identidad local.
"Algo importante a considerar es revisar cómo este entorno, que en algún momento fue un potencial para este lugar, ahora lo está bloqueando y cómo desde esa mirada se le puede dar una solución", destacó.
Inclemencias del tiempo
El alcalde Emeterio Carrillo indicó que la razón del cierre de la mayoría de los locales se debe a dos factores: por un lado el clima; y por otro, hay muchos adultos mayores que no aguantan las inclemencias del invierno.
"Tenemos gente que nos ha presentado sus antecedentes y están enfermos. A nosotros nos juega muy en contra el clima en invierno, en las obras, en nuestros espacios públicos, porque la gente se enferma. Hoy día las enfermedades de invierno están mucho más complejas que otros años y el clima se ha portado bastante mal. Nos gustaría que todos los locales estuvieran abiertos y fuimos a ver qué estaba pasando, la respuesta fue que varios están con licencia médica y hay otros que tienen miedo de enfermarse", dijo.
El alcalde agregó que tampoco se puede obligar a los locatarios a permanecer ahí, ya que también ellos cumplen con pagar sus arriendo y se entiende que las ventas bajan en todo el comercio.