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La comuna de Río Negro tiene un plan regulador con 58 años de antigüedad (es de 1966), por lo que están en proceso de gestión de recursos para contratar una consultora que realice el trabajo técnico; San Juan de la Costa lleva más de 5 años trabajando en la creación de un plan regulador que involucra las zonas urbanas en Puaucho, Bahía Mansa y Maicolpué.

Será el primer plan regulador comunal, ya que actualmente sólo cuentan con planes seccionales que son considerados de planificación.

Sebastián Cruzat, alcalde de Río Negro, explicó que es un proceso extremadamente lento y que permite que el crecimiento de la ciudad no sea armónico ni ordenado.

"Eso ocurre no porque no existen intenciones desde los municipios, sino que es muy complejo desde la normativa, requiere personal técnico que no tenemos, pero aun así, las ciudades crecen fuera de sus zonas urbanas, más aún con las famosas parcelaciones que son el punto de partida a lo que en poco tiempo serán barrios consolidados, pero fuera de la normativa urbana y quedando sin servicios, equipamiento y redes viales adecuadas. En nuestro caso estamos a tiempo, pero se requiere mayor rapidez en los procesos, no podemos estar 10 años tramitando la actualización, eso debe cambiar", manifestó el jefe comunal rionegrino.

Osorno

La ciudad de Osorno es sin duda el mejor ejemplo de este crecimiento sin mayor ordenamiento, donde hay más de 25 poblaciones construidas durante los últimos 30 años que están fuera de las 3.383 hectáreas definidas como zona urbana en el Plan Regulador comunal vigente desde 1992. Si bien se han concretado modificaciones de forma parcial, la mayoría ha sido para la construcción de viviendas estatales e inversión privada.

La normativa señala que fuera de los límites urbanos definidos por el plan regulador comunal está permitida la construcción de conjuntos habitacionales de viviendas sociales o de hasta un valor de mil Unidades de Fomento (UF) y que cuenten con requisitos para obtener subsidios del Estado para su adquisición.

Gracias a esto se han logrado construir sectores como Alto Osorno, Portal Osorno, en todas sus etapas, las villas Cautín, Lololhue, La Cumbre, Santísima Trinidad, Atlántico, entre otras, lo que da cuenta del crecimiento demográfico y territorial que ha tenido el sector de Rahue, que supera los 70 mil habitantes, de los cuales más de 30 mil están fuera del límite urbano marcado técnicamente por el plan regulador.

Las últimas dos propuestas se vieron frenadas en 2012, cuando entró en vigencia la nueva normativa medioambiental, lo que obligó al municipio local a someter todo el trabajo realizado durante 11 años a una evaluación ambiental que no fructificó. En el caso de la propuesta formal del 2016-2018, estuvo muy cerca de lograr su objetivo, lo que finalmente no pudo ser por la situación de las viviendas construidas en zona inundable de Francke. Actualmente trabajan en su actualización.

Complejidad

Ismael Rivera, arquitecto, explicó que desde el punto de la urbanización el objetivo del plan regulador está totalmente desvirtuado, dejando al planificador un margen muy limitado para realizarlo. Precisó que esto, considerando, por ejemplo, que para la inversión pública y privada en equipamiento y servicios se requieren permisos de edificación que se otorgan por la zonificación del suelo dado en el plan regulador y al no existir información fuera de la zona urbana, todo se demora más, aunque sean barrios que aparentemente son una prolongación de la ciudad.

"Muchas familias ni siquiera saben que están fuera de la zona urbana para muchos fines y con justa razón solicitan para sus sectores más equipamiento y servicios, como por ejemplo ocurre en Rahue Alto, pero resulta que es todo tan engorroso que finalmente quedan segregados. Por eso es importante que estos instrumentos estén actualizados, para la rapidez y certeza del inversionista y del propio Estado en el uso de suelos", indicó Rivera.

Agregó que los planes reguladores no tienen carácter legal, pero para su actualización deben cumplir con toda la normativa que involucra a un territorio, lo que resulta demoroso y muchas veces inviable.

"Finalmente las ciudades terminan construyendo y creciendo de acuerdo a las necesidades del mercado y por eso en algunos sectores, que son densamente poblados y están fuera del plan regulador, resulta más sencillo construir equipamiento, porque aquí entra otro factor, que es el socioeconómico de cada barrio. Y aunque no quieran asumir, la segregación social va acompañada de la falta de servicios. En Osorno lo vemos en sectores de la zona oriente, que están fuera del Plan Regulador, pero igual tienen servicios al lado, al menos comerciales, y en Rahue Alto, donde hay más gente, esto no ocurre", precisó el profesional.

Agregó que es importante fortalecer los equipos municipales de las comunas pequeñas para que puedan contratar personas que realicen estas actualizaciones.

"Antes que la realidad los supere, como ocurre en comunas más grandes y densificadas. Más aún con el tema de las parcelaciones, que son la antesala del crecimiento sin orden de las ciudades", argumentó el arquitecto.

1966 entró en vigencia el Plan Regulador de la comuna de Río Negro, siendo el más antiguo de la provincia, seguido del plan de Purranque, con 56 años, aunque está a punto de lograr su actualización.

1992 data el plan regulador de la comuna de Osorno, el cual se ha intentado actualizar al menos en dos ocasiones, pero sin éxito. Actualmente se trabaja en un nuevo intento para su renovación total.

7 comunas están en distintas etapas para actualizar sus planes reguladores con años de trabajo, pero sin lograrlo por razones técnicas o burocráticas.