El baile nacional
Un nuevo aniversario de nuestra Patria ha dejado un rastro de esperanza y la posibilidad de convertirnos en una comunidad más fraterna no puede quedar en una utopía inalcanzable. Más allá de las tradiciones folclóricas y gastronómicas típicas de esta fecha, los estudiantes de educación básica y media han tenido la oportunidad de recrear diversas acciones que resaltan nuestra identidad.
No deja de llamar la atención y de generar expectativas el verlos trabajar en equipo para coordinar bailes y juegos, las habilidades de trabajo en equipo y de colaboración surgen no sólo para abordar una coreografía, sino que para enfrentar en un futuro próximo los desafíos que el mundo nos impone.
Chile necesita de las nuevas generaciones, su futuro sólo existe en la medida que hoy nuestros niños y jóvenes se conviertan en mejores personas y que este esfuerzo se instale en sus memorias, con valores como la tolerancia, el respeto a la diversidad, la igualdad de trato y la búsqueda del bien común ayudando a construir un Chile que permita a todos ser felices.
Algo bueno está sucediendo porque muchos niños, niñas y jóvenes participan activamente de estas actividades de celebración, voluntariamente utilizan atuendos típicos, dejan de lado sus diferencias para unirse en la realización de una coreografía folclórica, siguen las instrucciones de sus profesores, a pesar de no estar del todo convencidos, vencen sus propios temores e inseguridades y se disponen a enfrentar todo aquello que se interponga en la ejecución de lo que está planificado.
En ello, comprenden que para que todo salga bien es necesario coordinarse con los otros y que no dará lo mismo lo que otros realicen, por lo que es de suma importancia apoyarse mutuamente. Por tanto, es posible reconocer que la educación se juega un trascendental objetivo en estas fechas de Fiestas Patrias al intentar imprimir no sólo temas culturales identitarios con nuestras costumbres, sino que habilidades para el siglo XXI que tanto requiere nuestra sociedad como el trabajo en equipo, comprensión intercultural y comunicación, entre otras.
Muchos, como yo, con más años, se conmueven al ver a los jóvenes que nos evocan recuerdos de nuestras Fiestas Patrias, cuando niños, en nuestros hogares, con quienes ya no están… Y, de un momento a otro, las imágenes se superponen entre todas las danzas de la rica variedad folclórica de Chile haciendo de la esperanza el único baile nacional.