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Vecinos conviven con basurales tras años de denuncias no resueltas

DESPERDICIOS. La situación se repite en el sector de Putabla, en San Pablo, y Rapaco en La Unión, donde existen acopios de residuos principalmente agrícolas, los que se han transformado en focos de insalubridad. Se han tomado diferentes acciones para terminar con el problema sanitario, pero hasta ahora no hay soluciones.
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Paola Rojas Mendoza

Un problema al que no encuentra solución es el que por más de dos años afecta a vecinos del sector de Putabla, en la comuna de San Pablo, ya que el basural que fue denunciado en marzo de 2022 en el diario El Austral de Osorno, permanece ahí mismo e incluso la cantidad de desechos crece periódicamente.

En este caso, el sitio está repleto de desperdicios, los que son recibidos por la empresa Mi Gran Chile, la cual ha mantenido estas prácticas en distintos puntos de la provincia.

Los malos olores, los roedores y el riesgo de incendios acompañan a los residentes de Putabla día a día, pero es un problema sanitario que no sólo afecta a este grupo, sino que se presenta en diversos lugares del país, ya que por la zona de Rapaco, en la comuna de La Unión, en la Región de Los Ríos, los habitantes de ese lugar viven exactamente con un problema igual: la lado de sus casas hay un sitio lleno de desechos que vienen de actividades agrícolas y sin que nadie se haga responsable de la situación.

Sigue igual o peor

En el caso del basural de Putabla, es visible desde la estación de servicios que se encuentra en la Ruta 5, en dirección norte a sur, donde el año pasado se hicieron las denuncias, sin solución hasta ahora, por lo que los vecinos siguen conviviendo con el riesgo sanitario a la puerta de sus casas.

Así lo confirmó nuevamente Aquiles Mardones, quien señala que entre su casa y el basural solo hay una calle de por medio.

"Esto no tiene remedio, las autoridades ya están enteradas de todo, pero no ha pasado nada. Creo que la solución pasa por la inversión y utilizar todo esto al estilo de cualquier país europeo y no es tan difícil. Es una solución que la tienen los ingenieros, los inversionistas, las facultades de derecho, tienen conocimiento sobre legislación medioambiental y las empresas que van a contaminar tienen ese conocimiento, de tal manera de no contaminar", dijo.

El vecino señaló que el responsable de este basural no ha respetado de ninguna manera la legislación ambiental existente, pese a poder hacerlo gracias a los buenos dividendos que deja el negocio de retirar los desechos del trabajo agrícola o de las industrias, sin embargo, la basura se deja abandonada en el sitio sin inversión para reciclar.

Aquiles Mardones señala que el problema se acrecienta en el verano, ya que los plásticos que vienen de algunos productos que se usan para labores agrícolas, quedan con residuos vegetales y animales, lo que con el calor comienza a fermentar, emanando un olor fétido.

A eso se le suma la plaga de ratones y moscas que existen en el lugar producto de la basura.

"Esta persona gana mucha plata con esto, pero no es el único, hay otros en Puerto Montt, Puerto Varas, Valdivia y La Unión. Esto es un riesgo enorme, se puede producir un incendio y hay una estación de servicios cerca", manifestó.

Denuncias

Quienes en marzo del año pasado, junto a los vecinos, presentaron una denuncia sobre este grave problema fue la Red Ambiental Ciudadana de Osorno, por lo que el presidente de esta entidad, Ricardo Becerra, señaló que esta acción fue presentada el año pasado ante la Superintendencia de Medio Ambiente, donde les informaron que harían la respectiva investigación.

"Esta situación persiste y está provocando malos olores y molestias en las casas aledañas. El tema está estancado, no hay avances sustanciales e incluso sabíamos que los vecinos se iban a unir para hacer una demanda por lo que estaba pasando. A nosotros nos llama la atención que esta situación se mantenga inalterable, tal cual se denunció hace algún tiempo atrás", expresó Ricardo Becerra.

El ambientalista hizo hincapié en que no es una situación exclusiva de ese sector rural determinado, ya que en Osorno se ha repetido en Chuyaca, donde hace más de dos años también se denunció un basural clandestino a orillas del río Damas, el cual se mantiene en el lugar y sin solución de parte de los organismos competentes.

El Austral consultó a la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) sobre qué avances ha tenido la denuncia hecha por el caso de Putabla, con el sitio con desechos que ha dejado el empresario osornino Jaime Pinninghoff , dueño de Mi Gran Chile, donde informaron que el caso fue derivado a la Seremi de Salud, ya que se trata de un acopio de material reciclado que se habría convertido en basural, tratándose de un proyecto sin Resolución de Calificación Ambiental, por lo que la SMA no tiene competencia en él. En la Seremi de Salud señalaron que el lunes 30 (ayer) entregarían información sobre el vertedero en Putabla, no obstante, ello no sucedió. Tampoco fue posible establecer contacto con el empresario Jaime Pinninghoff.

Se repite en La Unión

Un problema muy similar afecta a los vecinos del sector Rapaco, a 9 kilómetros de la ciudad de La Unión, donde también hay un terreno repleto de desechos que provienen de labores agrícolas, el que se ha mantenido por años, sin ninguna solución, pese a las denuncias de los residentes afectados.

Sonia Leal, que vive hace más de 30 años en el antiguo poblado de Rapaco, comentó que por más de seis años un privado acumula desechos un terreno situado al lado de las casas, sin ninguna responsabilidad ni conciencia del daño sanitario que implica para los habitantes.

"Yo ni siquiera vivo tan cerca, pero de repente se sienten algunos olores que no son ni de chancho ni de pollo, sobre todo ahora con el calor. Y ni hablar de los ratones y las moscas. Así tenemos que vivir todos los días", expresó.

Entre los desperdicios, el principal material que se deja en el lugar es plástico de bolos, con residuos que provocan olores y gases.

La vecina agregó que han denunciado este hecho a las autoridades en diversas ocasiones, donde algunos personeros se presentaron en el lugar, pero la solución nunca llega y así no tienen otra alternativa que seguir viviendo entre la basura abandonada.

La presidenta de la Junta de Vecinos Rapaco El Molino, Benilde Vega, coincidió en que este es un problema que persiste desde hace varios años, con denuncias ante la Autoridad Sanitaria de Los Ríos, pero sin solución.

En este caso se trata de un particular que también presta servicios de retiro de desechos, los cuales va depositando en este lugar, con las consecuencias que describen los residentes.

"Un año hubo un incendio en el terreno y llegaron los bomberos, que pudieron controlar el fuego. Fue en un par de segundos y comenzó una inmensa fogata. Por eso es muy peligroso, porque puede haber vidrios o cualquier otra cosa y esto se va a quemar rápidamente. Esa vez salía un humo negro muy tóxico, por todo ese plástico de bolos acumulado", indicó la dirigenta.

Además, el pozo del sistema de agua potable rural se encuentra a unos 300 metros del acopio de residuos, por lo que Benilde Vega teme una contaminación de este vital elemento.

"Creo que ese puede ser el problema más grande, porque uno puede controlar las moscas o las ratas, pero si se contamina el agua serían más de mil personas afectadas", expresó.

El Austral de Osorno consultó por este tema al alcalde de La Unión, Andrés Reinoso, quien hasta el cierre de esta edición no dio respuesta.