Mal uso y falta de señalización en la red de ciclovías complica a ciclistas y peatones en Osorno
TRÁNSITO. Los principales problemas son la obstrucción de las vías exclusivas para bicicletas, utilizadas como estacionamientos o veredas. En otros casos, la demarcación que separa ambas vías está borrosa o no existe y hay falta de señales, lo que termina con el uso de aceras donde se mezclan peatones y ciclistas, como en avenida República.
Osorno cuenta con más de 17 kilómetros de ciclovías que recorren y unen distintos barrios, siendo una de las comunas con la mayor red de vías exclusivas para la circulación de bicicletas en la región. Es precisamente esa ventaja urbana lo que ha permitido que el flujo de personas que transita en bicicleta vaya en aumento en la ciudad.
Es así como cada año son más los dejan de ser peatones o automovilistas para convertirse en ciclistas, pese al rigor de los elementos invierno, otoño y primavera, lo que evidencia una serie de problemas asociados a las vías exclusivas para bicicletas, donde es común ver automóviles de distintos tamaños estacionados sobre las ciclovías, personas caminando, falta de demarcación y señales de tránsito, deterioro de la zona exclusiva para ciclista (hay hoyos, baches, etcétera). Ello, además de falencias técnicas como discontinuidad, presencia de letreros, estructuras, alcantarillados, desniveles, entre otros problemas que son visibles a lo largo de toda la red que va desde avenida Argentina en Rahue Alto hasta el final de avenida René Soriano.
Bicicleta
Iker Muñoz utiliza la bicicleta como medio de transporte y vehículo de trabajo, "con la masificación de la entrega a domicilio, el uso de la ciclovía se intensificó, pero también nos damos cuenta de las falencias, porque es típico toparse con gente caminando que se enoja como que fuéramos mal nosotros los ciclistas y para qué decir los autos estacionados. Ahora es verdad que en algunos tramos no se nota la ciclovía, como los accesos al puente San Pedro, donde ya ni se ve la línea que así lo marcaba y nadie se preocupa de cambiar esa realidad", dijo el joven que trabaja para una aplicación delivery.
Según los registros del Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu), Osorno está entre las ciudades del país con mayor extensión de ciclovías, con 17,65 kilómetros entre Rahue Alto y el sector oriente. Su construcción ha sido por etapas, considerando un plan maestro que incluye una red que supera los 30 kilómetros en toda la zona urbana.
En efecto, hay vías para bicicletas en calle Argentina, avenida Real, calle Concepción, Santiago, Inés de Suárez, las avenidas Rodríguez, Mackenna, República (parte a la altura del colegio Emprender), René Soriano, el puente San Pedro, Zenteno, César Ercilla, Julio Buschmann, Guillermo Holstein, entre otros.
Cientos de personas circulan en bicicleta por esas vías diariamente, principalmente en horas punta de la mañana y tarde, ya que es su medio para desplazarse entre sus hogares y el trabajo.
"Lo que se supone debería ser expedito, termina siendo una zona de muchos obstáculos, porque la gente se cruza, no tiene continuidad o señalética y en algunos tramos está sin demarcación. Eso nos obliga a tener que cumplir tramos por la vereda, que es más seguro que andar en la calle con autos y microbuses. Aquello pasa en varios puntos de avenida Mackenna, donde las bicicletas van por la vereda y si sigues hacia Rahue Bajo nadie se mete hacia la ciclovía de Santiago, todos usamos la avenida República. Eso ocurre porque quienes las diseñan no piensan que somos personas y cualquier desvío nos retrasa y no tenemos motor como los automóviles", indicó Mario López, que vive en la villa Mirasur, en Rahue Alto, y trabaja en el sector de calle Errázuriz