Contadores Colegiados:
Desde sus inicios como Registro Nacional de Contadores, y actualmente como Asociación Gremial, el Colegio de Contadores de Chile ha tenido la misión de asegurar, a través del desempeño de sus colegiados, que los sistemas de información económica, financiera, social y medioambiental de las organizaciones públicas y privadas del país estén preparadas para trasmitir confianza, demostrar transparencia y dar garantía que la información registrada proviene de hechos verdaderos y la confección de sus registros e informes responde a valores justos y razonables. Con ello, buscan otorgar la seguridad para basar la toma de decisiones más convenientes para todos, y además, con esta información de calidad dar cumplimiento a todas las obligaciones personales y empresariales que corresponden.
La información que resulta de la gestión empresarial privada y de los organismos públicos debe cumplir con ser objetiva e imparcial. Y para ello, el Contador Colegiado que participa en la elaboración y entrega de dicha información, debe demostrar y ser un profesional competente, ético, íntegro, responsable socialmente en todas sus dimensiones, como persona, ciudadano, o como miembro de una organización.
Para dar garantía de la fe pública, el profesional Contador Colegiado debe estar en condiciones de asegurarla. Para ello cuenta con el respaldo que le otorga su inscripción y pertenencia en los registros del Colegio, apoyándolo además para mantener un nivel de competencias que le permitan tener un correcto desempeño en el registro de los hechos económicos ocurridos en las organizaciones, administrar los sistemas de información, dictaminar sobre los Estados Financieros para garantizar una toma de decisiones basado en la confianza y la transparencia de la información que reciben los usuarios de la misma.
Para lograr que la información sea reconocida como verdadera, transparente y consecuentemente justa, el Colegio de Contadores mantiene las atribuciones que le asignan las disposiciones legales de dictar las normas contables que se aplican en el país y para las cuales, sus asociados deben estar preparados y actualizados permanentemente.
En ese plano, la globalización de las actividades empresariales, ha dado lugar a la aplicación de Normas Internacionales de Información Financiera para todas las empresas obligadas a reportar su información, así como también las Normas Contables para el Sector Público o para las micro, pequeñas y medianas empresas. Es el Colegio de Contadores el que debe supervisar que este marco normativo internacional sea pertinente y aplicable a la realidad nacional.
Asimismo, en forma complementaria a las atribuciones del Colegio de Contadores de Chile, es fundamental que el Sistema de Educación Superior del país forme a los profesionales del área contable con los conocimientos y la capacidad de satisfacer las necesidades reales de las organizaciones, preparándolos con buenas prácticas que permitan mitigar los impactos económicos, ambientales y sociales que ocasionan las actividades de las organizaciones públicas y privadas del país.
El Contador Colegiado que observa y da cumplimiento a las exigencias de desempeño ético de la profesión, dará garantía a la sociedad, es decir fe pública sobre los datos y la información entregada por las personas, los empresarios y los organismos públicos, asegurando que ésta sea verdadera, fidedigna y justa y por lo tanto, contribuirá a la sociedad y al buen funcionamiento de la economía del Estado en democracia, independientemente del modelo macro o micro económico que nos conduzca como país.
Carlos Paillacar Silva,
Contador Colegiado del Colegio de
Contadores de Chile A.G.;
Doctor en Ciencias Económicas
y Empresariales (UCM);
Contador Público y
Contador Auditor (UFRO);
Profesor Titular, Universidad de
Santiago de Chile (USACH)