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Creciente robo de perros de raza afecta a vecinos de la comuna

DELITO. Dueños y dirigentes de agrupaciones animalistas aseguran que las mascotas son sustraídas desde sus domicilios para luego comercializarlas en el mercado negro. Afectados relatan los difíciles momentos que han vivido buscando al animal que consideraban un miembro más de la familia.
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Verónica Salgado

Con carteles en negocios, fotos en redes sociales y recorriendo la ciudad, muchas personas intentan recuperar a sus mascotas extraviadas o que han sido sustraídas desde sus hogares o en las inmediaciones cuando paseaban con sus dueños.

En la comuna es creciente el robo de perros de raza que afecta a los vecinos de distintos barrios, muchos de ellos con historias similares de cómo opera este delito, que si bien tiene larga data, las redes sociales y el alto costo monetario que pueden tener algunas razas de canes han incrementado la comercialización de mascotas a precios muy lucrativos y sin ningún tipo control o fiscalización.

Si bien el robo de mascotas está tipificado como delito en nuestro país, por el cual se arriesgan penas que pueden llegar hasta 3 años y 1 día de prisión efectiva y multas de hasta las 20 UTM (alrededor de un millón de pesos), el aumento de este tipo de ilícitos durante los últimos años da cuenta de mafias que trafican y comercializan mascotas de ciertas razas, la mayoría de las veces por redes sociales o en ferias libres de ciudades cercanas desde donde son sustraídas, así como también trasladan a los perros desde regiones hacia la zona Metropolitana.

Así lo han manifestado las distintas estimaciones realizadas a nivel nacional por las policías, con cifras que pueden llegar a 7 mil robos de mascotas al año, siendo las razas más buscadas por los hampones el bulldog francés, bulldog inglés, yorkshire terrier, pug, french poodle, chihuahua, pitbull, rottweiler, dogo, pastor pirineo, entre otras.

La finalidad es vender a los perros como animales de compañía, aunque en el caso de los canes de mayor tamaño principalmente son utilizados en el mundo de las peleas y las apuestas clandestinas.

Triste realidad local

Tania Álvarez hace unos menos sufrió el robo de "Tábata", una perra de raza poodle toy, de 4 años, que fue sustraída mientras jugaba en el jardín de su casa en el sector oriente de la comuna.

"Teníamos mallas para que no pudiera salir, ya que era muy pequeño. Ese día estaba con mi hija que entró un momento a buscar su teléfono y al salir la 'Tábata' ya no estaba. La buscamos, pusimos letreros, preguntamos a los vecinos y nada. Simplemente se la llevaron porque imposible que un perro de ese porte pueda arrancar solo tan lejos y rápido. El drama de esto es que para nosotros era uno más de la casa y no saber qué pasó con él o si estará bien, es bastante triste", señaló la mujer.

Una experiencia parecida vivió David Quidel, a quien desde una parcela emplazada en el camino a La Costa le robaron un "Thor", un pastor pirineo de 9 meses.

"Thor era hijo del perro de mis papás de toda la vida y lo trajimos porque son excelentes compañeros con los niños. Era juguetón y nunca salía de la casa, aún si estaba la reja abierta. Por eso nos extrañó cuando un domingo, cuando volvimos de la playa, no salió a nuestro encuentro. Lo buscamos por todos lados y nada, pusimos avisos en redes sociales y hasta ofrecimos recompensa, pero nunca apareció. Estos perros no son chicos, así que claramente se lo robaron y lo peor de todo es pensar a dónde fue a parar, porque se lo robaron y lo sacaron de la zona, porque de lo contrario lo hubiésemos encontrado", explicó Quidel.

En redes sociales como Facebook hay varias páginas para mascotas perdidas donde regularmente aparecen imágenes de perros que son buscados por sus dueños. Lamentablemente, también hay sitios de venta de perros, los cuales no están certificados ni autorizados, aunque son fiscalizados y de generarse una denuncia en su contra son borrados los perfiles del ciberespacio. Hay casos de personas que relatan que han comprado perros considerando que son de cierta raza, sin embargo, con el paso de los días se dan cuenta que tenía su pelaje teñido, por ejemplo, y que fueron víctimas de engaño.