Autoridades incumplen promesa y Sri Lanka vuelve a ser un caos
CRISIS. En lugar de renunciar, como habían anunciado tras las protestas del sábado, el Presidente huyó y designó como interino a su ex primer ministro. Miles volvieron a las calles e invadieron su oficina, haciendo caso omiso al toque de queda que decretó.
Agencias/Redacción
Un giro inesperado dio ayer el hasta ahora presidente de Sri Lanka, Gotabaya Rajapaksa, a la crisis de la nación, al designar como presidente interino al primer ministro Ranil Wickremesinghe el día que ambos debían presentar su renuncia, como habían anunciado, provocando el caos en el país.
La decisión fue hecha pública horas después de Rajapaksa abandonara el país en un avión de la Fuerza Aérea y aterrizara en el paradisíaco archipiélago de Maldivas, en cuyas calles de sus capital, Malé, se iniciaron protestas en su contra, exigiendo que el mandatario se enfrente a la Justicia y a la gente que reclama su dimisión. Incluso, medios locales de ese país apuntaron a la posibilidad de que Rajapaksa viajara durante la noche a Singapur, para refugiarse definitivamente.
Rajapaksa, que fue elegido finales de 2019, anunció su renuncia a través del presidente del Parlamento tras huir de su residencia oficial el pasado sábado, antes de que fuese asaltada por miles de personas en una revuelta popular.
La renuncia del jefe de Estado era pedida por decenas de miles de personas en las calles desde hace meses, que culpan al Gobierno de la debacle económica que ha sumergido a la nación es la peor crisis de su historia.
De esta forma, ayer, mientras el país esperaba con relativa calma que se hicieran efectivos los anuncios, Wickremesinghe, que había prometido también su renuncia ese mismo día, fue como presidente en funciones. lo que unido a la huida de Rajapaksa, provocó que miles de manifestantes volvieron a encender las calles para exigir la dimisión inmediata de ambos.
Pese a que el presidente encargado ordenó un toque de queda en la capital, Colombo, para tratar de contener la situación, miles de personas volvieron a instalarse frente a varias instalaciones gubernamentales, tomando el control la oficina del primer ministro a pesar de la fuerte represión.
Los manifestantes se dirigieron también hasta el Parlamento, poco después de que Wickremesinghe, actuando en calidad de "presidente en funciones", solicitara a la Cámara la designación de un nuevo primer ministro que asumiera el cargo.
Descarta renunciar
Asimismo, el presidente en funciones anunció que solo entregará el control del país una vez todos los partidos, incluyendo el gobernante de Sri Lanka Podujana Peramuna (SLPP), se pongan de acuerdo para la formación de un nuevo Gobierno.
Wickremesinghe celebró el lunes una reunión con los miembros de su gabinete donde acordaron que "en cuanto haya un acuerdo para formar un Gobierno de todos los partidos, entregará las responsabilidades a ese Gobierno", dijo ayer el equipo del primer ministro.