Verónica Salgado
La pandemia cambió drásticamente las formas de enfrentar la vida y la muerte en los recintos asistenciales de todo el mundo. A la distancia física, uso de mascarillas y sanitización de espacios comunes, se suman protocolos que deben cumplir familiares y cercanos de quienes fallecen a causa del covid-19, entre los que se encuentra recibir el cuerpo sellado en el ataúd y realizar el sepelio dentro de un plazo determinado.
Hasta ayer habían fallecido 612 personas por covid-19 en la provincia. Uno de los casos, que ocurrió el sábado 19 de febrero, fue René Cerón, de 83 años. Sus hijos no pudieron reconocer el cuerpo de su padre debido a los protocolos de seguridad del Hospital Base de Osorno, donde ocurrió la muerte. Desesperados por la frialdad y despersonalización del personal frente a la muerte de su amado padre, ingresaron hasta la morgue del establecimiento para verificar que fueran los restos de su progenitor los depositados y sellados en la urna con que fue sepultado en un cementerio privado de la comuna.
"Tenemos claridad que no es algo que debíamos hacer, pero no nos dejaron otra salida. Los protocolos y restricciones implementadas son sólo para las familias y seres queridos de las víctimas, a las que se trata con una frialdad impresionante, sin una cuota de contención o empatía. Para el sistema es un fallecido más. Nosotros llegamos hasta la misma morgue y no hubo un solo control. Para nosotros fue una oportunidad, pero la realidad que es un riesgo la falta de controles internos, cualquiera llega a los cuerpos y hace lo que estime conveniente", dijo Aldo Cerón, uno de los 12 hijos del fallecido adulto mayor.
Dentro los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud (Minsal) para el manejo de cadáveres de personas fallecidas por covid-19 están: traslado desde la sala o zona de aislamiento donde ocurre el deceso hasta la morgue en una bolsa impermeable, la cual es pulverizada con desinfectante y sellada. La manipulación es realizada por personal provisto de vestimentas y equipamientos de seguridad.
El traslado al cementerio se debe realizar en un ataúd totalmente hermético e impermeable, el cual en ningún momento debe ser abierto, al igual que la bolsa.
Auto denuncia
La familia de René Cerón recibió el llamado de su fallecimiento sólo horas después de su ingreso al Hospital Base de Osorno el viernes 18 de febrero. En la conversación se les informó que la causa del deceso era covid-19, por lo que les solicitaron retirar el cuerpo desde la morgue en un plazo determinado de horas.
"Somos 12 hermanos y habíamos perdido a nuestra madre hace poco tiempo. Este llamado tan frío y distante nos pareció que es una forma muy cruel de dar una noticia así. No pudimos ver su cuerpo y, claro, en ese momento tienes la duda si es el cuerpo que te van a entregar y la esperanza que sea un error y que nuestro padre esté vivo. Decidimos retirar el cuerpo el día domingo y nos sorprendió que el Hospital y la funeraria ya tienen todo listo. Entonces, le dije a mi hermanos que no podíamos quedarnos con la duda", relató el doliente.
Agregó que tras intentar conseguir una autorización sin éxito, tomó la decisión de ir hasta la morgue del Hospital Base cuando la funeraria retirara el cuerpo la mañana del domingo.
"Así que con mi hermana entramos detrás del vehículo de la funeraria y llegamos hasta la morgue. Estuvimos junto a nuestro padre, no lo vestimos ni nada, pero era él y verificamos que estaba en la bolsa sellada depositada en el ataúd. Nos sorprendimos que tanto protocolo y restricción es sólo para la familia, porque nadie nos pidió una identificación durante el trayecto a la morgue, ni fue a ver qué cuerpo era, nada de nada. El caballero de la funeraria hizo todo con la misma ropa de seguridad, tanto dentro como fuera del hospital", comentó.
Precisó que el objetivo de hacer público el caso está muy lejos de querer perjudicar a alguien: "queremos evidenciar que las medidas, protocolos y restricciones sólo se aplican a un sector de la comunidad. Que el sufrimiento de la familia no está considerado y que el trato que dan es tan deshumanizado, que obliga a cometer imprudencias. Pedimos que mejoren la seguridad y que las familias sean acompañadas y contenidas, porque ellos no están despidiendo un fallecido por covid-19 más, hablamos del padre, esposo, hijo, hermano, amigo, ser querido de personas que lloran su partida", dijo Cerón.
Desde el Hospital Base de Osorno precisaron que están recabando los antecedentes para pronunciarse oficialmente frente al tema.