La continua ola de accidentes llama a la reflexión acerca de las causas que provocan estas tragedias, muy ligadas por lo general al comportamiento humano, sin desconocer que varias de las carreteras de la región podrían necesitar algunos reacondicionamientos.

Según el reciente balance anual de Carabineros, en 2021 fueron 79.520 incidentes viales a lo largo del país que provocaron la muerte de 1.687 personas, siendo el peor registro de decesos en 13 años.

Al revisar tales accidentes se constata a vehículos que aparecen intempestivamente desde caminos laterales; otros que adelantan en lugares y circunstancias cuestionables; se agrega la presencia de alcohol en los conductores; maniobras claramente prohibidas y el tradicional exceso de velocidad.

Es evidente que la falta de bermas, por ejemplo, la inexistencia de señalización o la mala calidad de una ruta conspiran en contra de un mejor manejo, pero es el factor humano lo fundamental para evitar estos dramas. Así lo indican las respectivas crónicas de estos hechos, desgraciadamente muy reiterados.

Si la calidad de una ruta fuera la única condicionante para evitar siniestros, no cabe la menor duda que la Ruta 5 Sur no sería escenario de ellos; sin embargo, se producen ante maniobras impropias de algunos conductores y un desapego absoluto de las normas del tránsito, entre ellas el máximo de velocidad. Tal cosa ocurre también en otras diversas vías del país.

Resulta natural pedir mejoras, pero son los conductores, básicamente, quienes deben mostrar un manejo más responsable, en especial en lo relativo al consumo de alcohol y el exceso de velocidad. Si estas conductas persisten de poco o nada valdrán los mejoramientos solicitados, que desde luego se justifican.

Estas irregularidades se observan también en las calles y avenidas de las comunas de la zona sur, sobre todo en las noches, y de ello hablan las crónicas policiales con excesiva frecuencia. El factor humano, entonces, es clave para evitar estos hechos.

Con el fin de proteger a los pacientes morosos que buscan empleo como a aquellos que necesitan acceder nuevamente a un crédito pese a sus cuentas impagas, desde la Comisión de Salud del Senado estamos promoviendo el proyecto de ley que prohíbe informar las deudas contraías para financiar atenciones de salud.

La iniciativa busca prohibir a los bancos de datos entregar información a las instituciones financieras relacionadas con pasivos que tengan relación con prestaciones sanitarias.

Este proyecto quiere ayudar a esas personas que, con ocasión de una atención de salud han debido endeudarse o incluso se han visto obligados a vender bienes o realizar beneficios para soportar los grandes gastos que estas atenciones traen y por esa razón se ven impedidos a acceder a créditos.

Tales deudas incluso impiden que las personas postulen a trabajos o accedan a nuevas atenciones de salud.

El proyecto, nacido de una moción parlamentaria que elaboramos en conjunto con la senadora Goic y los senadores Girardi, Quintana y Chahuán, cuenta también con el respaldo del Ejecutivo.

De hecho, el asesor del Ministerio de Salud Jaime González, reconoció en una reciente sesión de la comisión de Salud del Senado, que "la norma, tal como está redactada, sin duda que es en justicia y se gatilla producto que se genera una prestación de salud inesperada y que requiere de una resolución pronta. Así que el Ejecutivo no puede más que estar de acuerdo con este proyecto"

No podemos continuar permitiendo que las deudas por atenciones sanitarias dejen a las personas sin acceso a crédito, trabajo o salud cuando más lo necesitan. Estas no son deudas contraídas voluntariamente, sino en medio de un complejo proceso que afecta la salud, y muchas veces la vida de las personas y de sus familias.

Tal situación es otra expresión de la dificultad que enfrentan miles de personas en el marco de un modelo de salud que no ofrece garantías universales. Mientras no logremos reestructurar el sistema y avanzar hacia un plan de salud universal que resuelva todos estos nudos, iniciativas como ésta constituyen al menos un alivio necesario.

Rabindranath Quinteros, senador Región de Los Lagos