Zanjado el proceso eleccionario de este domingo, ya está absolutamente claro que los chilenos tendrán que volver a las urnas el próximo domingo 19 de diciembre, cuando José Antonio Kast, del Partido Republicano; y Gabriel Boric, del pacto Apruebo Dignidad, se enfrenten en un balotaje que será decisivo para el futuro del país, pues ambos representan posturas muy disímiles en cuanto al modelo de sociedad.

En los próximos días, qué duda cabe, cada uno de los comandos de los postulantes ganadores iniciará un intenso despliegue para difundir sus respectivos programas de gobierno y conquistar el electorado necesario para poder llegar en marzo del próximo año al Palacio de La Moneda.

Con todo, y tal como se demostró en la jornada del domingo 21, las regiones del país esperarán que sus demandas y problemas emerjan con fuerza en el debate político que se instalará en las semanas siguientes.

Más allá de los extramuros de Santiago, hay grandes anhelos para avanzar todavía más rápido y con mayor énfasis en el proceso de descentralización, que si bien este año anotó un hito significativo con la elección de los gobernadores regionales, es muy poco aún para la centenaria brecha que se ha ido instalando en el país, en lo que se refiere a desbalance del poder y escasa autonomía de los territorios.

En este contexto, será particularmente relevante en este período de campaña electoral, probablemente muy distinta a la anterior, conocer qué es lo que proponen José Antonio Kast y Gabriel Boric para el desarrollo de las regiones, en particular para acelerar un proceso que ya no se puede detener y que suele encontrar resistencias en amasijos del nivel central, sea cual sea la filiación política, que desconfían de las capacidades de los no santiaguinos.

Las regiones necesitan una atención especial, tanto para saldar las deudas en salud, educación y vivienda, por nombrar algunas, como también para explotar un potecial enorme en cuanto a sostenibilidad y energías renovables, por ejemplo, entre muchas otras materias.

El centro… ¿centro izquierda, centro derecha?… ¿Qué es ser de centro? ¿"Ni fu ni fa" "Entre Tongoy y Los Vilos"? ¿Existe realmente el centro en política? ¿Al centro de qué?, ¿más lejos de donde?

La política es el arte de lo posible, dicen los políticos. Tal vez tienen razón. Entonces, si la política es una actividad cuya razón de ser es alcanzar un fin preciso, el bien común, se supone que sí existe el centro.

¿Lo estamos? Sin duda, visto los resultados de esta elección estamos en medio de los extremos.

Aquí entre nos, si el centro es el punto donde se cruzan las líneas ideológicas, imposible no preguntarse el por qué de esta polarización artificial cuando la tendencia natural de todo ciudadano confluye en los mismos puntos de siempre: equidad; salud oportuna, educación de calidad, seguridad ante la delincuencia, terrorismo y narcotráfico, jubilaciones dignas, desarrollo cultural, protección de los derechos humanos, libertad de expresión y libertad en todas sus expresiones, en resumen, calidad de vida humana ¿por qué una mayoría que busca básicamente lo mismo tendría que estar dividida en dos bandos antagónicos?.

¿Y a pito de qué este pobre cuestionamiento histérico con ínfulas de sermón político? A pito de la segunda vuelta con perdedores y ganadores...

A pito de que por fin esa antigua estructura política anquilosada, con esa visión de odio, fijación en el pasado, avalada oficialmente por el terrorismo internacional (véase Foro de Sao Paolo) y que todavía prevalece en naciones vecinas y lejanas, hoy ese modelo acaba de empezar a destartalarse en nuestro país, quedando en evidencia que los chilenos somos capaces de discernir y priorizar el sentido común por sobre las aparentes diferencias políticas, de mirarnos y desearnos lo mejor. En fin, a los "homo electus" nos llegó la hora de definirnos sin miedo y el próximo 19 de diciembre hacerle la cruz a un chileno ponderado, correcto, experimentado, que habla sin gritar, diestro y hábil; ese candidato que además de tener buenas ideas, lo creemos capaz de ejecutarlas. Busque, porque el que busca encuentra y si lo encuentra "todo va a estar bien"! Viva Chile!.

Vivian Arend