Samoré intensifica controles para evitar contagios de variante Delta
COVID-19. Aduana y Autoridad Sanitaria indicaron que se realizarán más test de antígenos para controlar de manera más estricta a las personas que ingresen al país. Cierre de fronteras se extendió hasta el 14 de julio.
Hace unos días se detectó y confirmó en el país el primer caso de una persona con la variante Delta de covid-19, quien llegó el pasado 4 de junio desde Estados Unidos, en un proceso bastante polémico dado que la mujer al arribar a piso nacional, sólo cumplió un día de cuarentena en un hotel de tránsito dado que contaba con un permiso humanitario, por lo que se dirigió posteriormente a la Región del Maule.
La preocupación que existe sobre esta nueva cepa es evidente a nivel mundial, dado que fue designada por la OMS como una variante de interés, lo cual significa que puede ser más transmisible o causar una enfermedad más grave, no responder al tratamiento e incluso evadir la respuesta inmunitaria.
Esto mismo generó la alerta en el país y para frenar el contagio aumentaron los controles sanitarios en pasos fronterizos y aeropuertos para detectar algún posible positivo.
Con la renovación del estado de excepción constitucional se adoptó también la medida de la extensión del cierre de fronteras, en primera instancia hasta el 14 de julio. En virtud de ello, la restricción se mantiene tal como se implementó desde marzo de 2019 con el cierre asociado a personas naturales, por lo que quedó habilitado sólo para el transporte de carga y permitiendo el ingreso para chilenos y extranjeros residentes en el país.
Así lo indicó el administrador del paso fronterizo Cardenal Antonio Samoré, Germán Vidal, quien comentó que "ahora con motivo de las nuevas variantes se ha robustecido el proceso de testeo o la realización de test de antígeno para los transportistas que ingresan a territorio nacional, todo esto con personal de la Autoridad Sanitaria que está apostado en el complejo fronterizo".
Controles
Son en promedio unas 100 personas las que están ingresando a suelo nacional por el paso fronterizo ubicado en la comuna de Puyehue, en su mayoría conductores de camiones o vehículos de carga, y en menor grado personas que tienen domicilio en el país, según señalaron desde Aduana.
La encargada provincial de la Autoridad Sanitaria, Vania Rojas, comentó que se mantiene la exigencia de que todo transportista de carga extranjero que ingrese a territorio nacional debe portar un PCR negativo no superior a 72 horas de iniciado el viaje.
Junto con ello, personal de la Autoridad Sanitaria realiza muestreo de antígeno en forma aleatoria a los transportistas tanto chilenos como extranjeros; con motivo de esta nueva cepa, por instrucción de la Subsecretaría de Salud se tuvo que robustecer y aumentar la cantidad de muestreos a las personas que cruzan o transitan por este corredor internacional.
"En relación a las fiscalizaciones en Cardenal Samoré, ahora con la presencia de la nueva variante Delta, estas van a ser reforzadas independiente de que hemos contado desde el inicio de la pandemia con equipos fiscalizadores todos los días de la semana. Los usuarios deben ingresar con un PCR negativo y se toma el test antígeno de manera aleatoria; aquellos que no cuentan con el PCR, se les toma de manera obligatoria. Una de las medidas que se van a adoptar para controlar o fiscalizar de una manera más efectiva, consiste en aumentar la toma del test de antígeno a los que ingresan con PCR negativo", comentó Rojas.
En tanto Germán Vidal insistió en indicar que desde el punto de vista operacional, ningún transportista o persona