"The Father": el drama del olvido de una vida
Con seis nominaciones al Oscar, el drama protagonizado por Anthony Hopkins y Olivia Colman usa recursos interesantes para retratar la pérdida de la memoria.
"The Father" -nominada a 6 premios Oscar- puede ser fácilmente confundida por otra película dramática y lacrimógena sobre la pérdida de memoria al estilo de "Lejos de ella" o "Siempre Alice". Y no es que no lo sea. Su cometido emocional es evidente y también su intención de plantar el problema de la demencia senil en el contexto de la temporada de premios. La diferencia con producciones similares radica en la forma en que el director, el francés Florian Zeller, busca la empatía entre el espectador y su protagonista a través de una estrategia narrativa. Es un recurso que ya probó sobre las tablas y que ahora perfecciona gracias al lenguaje cinematográfico en este ejercicio de adaptación teatral.
La protagonista del filme es la cabeza de Anthony (Anthony Hopkins), un anciano que comienza a percibir desencajes en su realidad. Vive con su hija Anne (Olivia Colman) en un lujoso departamento londinense y, en los primeros minutos, manifiesta su preocupación ante un supuesto robo de parte de su cuidadora. Anne y la audiencia sabemos que no es verdad y que estamos frente a los primeros rasgos de una demencia. La cosa se agrava cuando ella le cuenta que debe mudarse a París por trabajo y que tendrá que dejarlo solo. La pena de Anthony será la antesala de un extravío existencial.
El asunto se complejiza cuando el octogenario encuentra en su casa a un desconocido que debe recordarle que es el marido de su hija y que juntos lo han acogido en su hogar. ¿Entonces esa no es su casa? ¿Lo están engañando para quedarse con su dinero? La escena depara otro golpe: Anne entre en escena y ya no se parece a Colman sino que a Olivia Williams. La noción de realidad del anciano se irá derrumbando progresivamente.
"The Father" sería no más que un artefacto repleto de trucos ingeniosos si no fuera por sus actuaciones. No estamos ante una nueva película de Charlie Kaufman ("Eterno resplandor de una mente sin recuerdos", "Pienso en el final") sino que frente a una obra que opera sin sobresaltos para no atentar en contra de su objetivo emocional. El juego no es para el espectador. Nosotros ya sabemos de qué va todo esto. Lo que importa, por sobre los engranajes narrativos, es el proceso doloroso del personaje central hacia el entendimiento de su propia degradación. Y en esto, Hopkins brilla con un actuación delicada y conmovedora. El resto del elenco -en especial Colman- lo acompaña con el mismo nivel de sensibilidad y contención.
A pesar de su naturaleza escénica, "The Father" es más que teatro filmado. Y en esto ayuda la colaboración del guionista Christopher Hampton ("Expiación, deseo y pecado"), quien sabe que solo el cine se puede acercar a los rostros afligidos del dolor. Valorable es que, tomando en cuenta el historial sentimental de este tipo de películas "oscarizables", Zeller no mete los dedos en las llagas ni acuda al golpe bajo. El filme es sobrio y no está invadido por música melosa, como dicta el manual. Al igual que en el teatro, el resultado depende exclusivamente de la dramaturgia y las actuaciones. Lo importante es que por este camino la cinta logra alcanzar la conmoción.
El estreno de la película "The Father" estaba programado para el 22 de abril de este año.
En resumen
"The Father", cuenta con 6 nominaciones: mejor película, mejor actor protagónico, mejor actriz secundaria, mejor guion adaptado, mejor montaje, mejor diseño de producción.
Por Andrés Nazarala R.
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