El ostracismo de O'Higgins
O'Higgins dejó como sabemos el poder el 28 de enero de 1823, no volviendo a ejercer cargos políticos, convencido que su tiempo como mandatario había pasado y que, por tanto, su mayor contribución a la Patria era mantener su voluntario ostracismo.
Desde Lima y Montalbán, donde tenía su hacienda, enviaba periódicamente cartas a Chile con innovadoras ideas destinadas al desarrollo del país, sin pedir que se le reconociera la autoría de ellas, pese a que habían nacido de su constante meditación, muchas de las cuales se implementaron con el correr del tiempo, como la toma de posesión y colonización del Estrecho de Magallanes.
Su prescindencia de lo público era tal, que cuando llegó a sus manos un periódico bonaerense en que se mencionaba que pretendía invadir con ayuda de soldados colombianos Chile, respondió indignado al Presidente de Argentina de la época, en una carta fechada el Lima el 18 de septiembre de 1826, día de nuestro aniversario patrio, en la cual señalaba: "Si yo hubiera aceptado repetidas ofertas que me han hecho desde Chile, hace tiempo que estaría ocupando el sillón presidencial, no por medio de las bayonetas colombianas, sino por aquellas de esos valientes soldados a quienes tantas veces llevé a la victoria".
Antonio Yakcich Furche, presidente del instituto O'Higginiano de Rancagua
Alimentos contra el estrés
Las nuevas realidades del teletrabajo, el desempleo temporal, la enseñanza en casa y la falta de contacto físico con familiares, amigos y colegas requieren tiempo para acostumbrarse. Adaptarnos a estos cambios en los hábitos de vida y enfrentarnos al temor de contraer la covid-19 y a la preocupación por las personas próximas más vulnerables es difícil, y puede resultar especialmente duro para las personas con trastornos de salud mental.
Afortunadamente, son muchas las cosas que podemos hacer para cuidar nuestra salud mental y ayudar a otras personas que pueden necesitar más apoyo y atención.
Existen algunos alimentos que ayudan a combatir el estrés como espárragos (ricos en ácido fólico, que es esencial para mantener la calma); naranjas (abundancia en vitamina C, además de estimular el sistema inmunológico, también frena los niveles de la hormona del estrés, el cortisol); yogur natural, que cada día regenera la flora intestinal y favorece la producción de serotonina, la hormona que produce el cerebro y que está íntimamente relacionada la regulación de nuestro estado de ánimo; avena ayuda a aumentar los niveles de serotonina en el cerebro. La serotonina es un neurotransmisor responsable de impulsar el estado de ánimo y también la relajación; tomar una pequeña cantidad de chocolate negro al día (40-50 gramos) reduce los niveles de hormonas de estrés.
Si buscamos el remedio más natural existente contra el estrés, sin duda sería el zumo de limón. Tomándolo en ayunas nos ayudará contra el estrés, la fatiga y el cansancio crónico
Finalmente, el té de manzanilla, junto con el tradicional vaso de leche tibia, son los mejores aliados contra el estrés antes de irnos a la cama.
Claudia Pérez Rubilar, académica Escuela Nutrición y Dietética U. Andrés Bello
¿El fin del mall?
Abrupta ha sido la caída en las visitas a los malls en el último tiempo. Los efectos de la pandemia en los hábitos de consumo han hecho lo suyo, pero ello no es más que la comprobación anunciada de una tendencia que se venía manifestando hace algunos años y que no hizo más que agudizarse para poner a los centros comerciales en un delicado punto de inflexión.
De acuerdo con un estudio de la consultora Kawésqar Lab, sólo un 24% de los consumidores considera hoy a un centro comercial como alternativa para ir de compras. El giro es notable si se compara con el 55% de preferencias que acaparaba el mall hace escasos seis años.
El aumento del comercio electrónico ha sido potente, sobre todo en la última década. De hecho, esa amenaza estaba prevista en el mundo del retail que ya venía buscando la manera de hacer frente a la caída en las ventas del comercio presencial, potenciando la atención multicanal y reestructurando, incluso, la disposición física de las tiendas. Pero la pandemia lo precipitó todo.
Las restricciones propias de los confinamientos, la depresión del consumo, el temor de contagios por covid, el aprecio por los productos de emprendimientos locales, estos últimos fuertemente influidos por internet, fueron elementos determinantes que han puesto a los centros comerciales en un punto crítico. Lejana están las décadas de los '80 y '90 cuando los malls eran vistos también como punto de encuentro, como instancia de relajo y socialización que permitía vivir toda una experiencia de consumo. Será la pandemia la que llegue a refundar una industria que está en la encrucijada: ¿renovarse o morir?
Catalina Maluk, directora Escuela de Economía y Negocios UCEN