No más violencia de género
Lo que importa es que esta situación debe denunciarse a tiempo para no tener que lamentar situaciones extremas. Entre los factores de riesgo que se deben considerar para frenar a tiempo este delito, se encuentran la violencia física, la amenazas de muerte o de suicidio por parte del agresor
El pasado 25 de este mes se recordó el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, que busca llamar la atención de todas las personas respecto de los ataques psicológicos y físicos que sufren, muchas veces en sus propios hogares. Esta fecha fue establecida en el año 1999 por la Asamblea General de Naciones Unidas.
La Cuarta Encuesta Nacional de Violencia Intrafamiliar Contra la Mujer y Delitos Sexuales, que se realizó en todo el país a mujeres de entre 15 y 65 años, reveló que este año se han agudizado los ataques físicos y psicológicos contra las mujeres.
Debido a la crisis sanitaria, muchas mujeres han tenido que convivir en forma permanente con su agresor y se les ha hecho más difícil acudir a las comisarías de Carabineros para concretar una denuncia. De ahí que autoridades han remarcado la importancia de realizar las denuncias respectivas mediante los canales correspondientes, que atienden las 24 horas.
Pese a las insistentes campañas que se han desarrollado durante los últimos años, los ataques a mujeres por parte de sus maridos, parejas, convivientes o pololos no han cesado.
Según la legislación chilena, un femicidio es el asesinato de una mujer realizado por quien es o ha sido su esposo o conviviente. Entre los factores de riesgo que se deben considerar para frenar a tiempo este delito, se encuentran la violencia física, la amenazas de muerte o de suicidio por parte del agresor, la presencia de armas, los episodios de celos constantes y en aumento, el abuso de alcohol y de drogas, la manifestación de la intención de terminar la relación por parte de la mujer sin concretarla, el excesivo control, los actos de dominación, la violación o sexo forzado e intentos de ahorcamiento.
Lo que importa es que esta situación debe denunciarse a tiempo para no tener que lamentar situaciones extremas, y puede superarse con la colaboración de todos, partiendo desde la formación de los niños, acerca del respeto a todas las personas.