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Pandemia en Osorno
La situación de la pandemia en Osorno está, aparentemente, descontrolada. El aumento en las cifras de nuevos contagios y de fallecidos no para. Las medidas tomadas parecen no dar abasto o no se adecúan a las nuevas circunstancias, que a no dudar, van empeorando. Parece necesario revisar la situación, ponderar las variables y explorar otras alternativas de manejo.
Las experiencias internacionales en el tratamiento de la pandemia, en general, parecen similares, pero sin embargo son variadas, atendiendo a la diversidad de realidades que conformamos en el mundo. Esto parece lógico y fácilmente entendible, por lo cual, la aplicación de un plan de tratamiento de la emergencia en nuestro país también debería considerar las diferencias territoriales y existir la posibilidad de adecuar este plan a las circunstancias locales, incluyendo mayores y reconocidas atribuciones a las autoridades correspondientes del área o territorio: ciudades, comunas, localidades.
La ciudad de Osorno, a nuestro entender, debería ser tratada con un plan diseñado por su gente, por sus autoridades locales, con información de base cercana y certera, y con evaluaciones de funcionamiento continuas, con la entrega de resultados comprobables y evaluables en plazos acotados.
Proponemos diseñar un mapa geo-refenciado (Sistema de Información geográfica) de toda la comuna, en base a la información existente (Plataforma Epivigila) de la presencia de covid-19 por áreas definidas (sectores, barrios o manzanas), estandarizando los diferentes niveles de gravedad de contagios en cada uno de ellos, a modo de un "Semáforo de Salud" o "Semáforo Covid".
El objetivo general consiste en acotar el grado de mayor o menor riesgo y vulnerabilidad, en los diferentes sectores de la comuna, de modo de, por un lado, generar un índice de atención y protección prioritaria focalizada y de urgencia, y, paralelamente, visualizar en forma más segura aquellos sectores cuyos riesgos estén mejor controlados.
Los beneficios esperados estarían dados por una mejor trazabilidad, conforme se tenga información cualitativa y cuantitativa de la situación en los diferentes sectores geo-referenciados de la ciudad. En sectores con Luz Roja: Focalizar la atención de personal de salud y de recursos económicos hacia donde están las urgencias, lo que conduce a reducir la propagación de la enfermedad en plazos evaluables, reduciendo los tiempos de cuarentenas estrictas, con todas las desventajas que implica y que ya hemos vivido. En sectores con Luz Amarilla: proponer la reactivación de las actividades sociales, culturales y económicas, con la aplicación de la normativa o protocolos que las circunstancias lo ameriten. En sectores con Luz Verde: establecer controles de fiscalización de las diferentes actividades ciudadanas, productivas y no productivas debidamente permitidas, considerando la aplicación del test PCR al personal de locales con atención directa al público.
En definitiva proponemos, que para que Osorno recupere sus variadas actividades, como todos lo deseamos, y para que esta recuperación no sea efímera, como lo hemos observado en otras localidades, Osorno debe focalizar su quehacer "sanitario" en forma sectorizada.
La ciudadanía osornina quiere y necesita, por salud mental, poder visualizar un camino más seguro, ojalá definitivo, por el cual volver a transitar sin tanto temor.
Teresa Donoso Lastra Consejo Asesor Ciudadano Seremi de Salud
Segundo retiro del 10%
Dos cosas preocupan al Gobierno respecto al segundo retiro previsional.
Lo primero es el impacto en las arcas fiscales futuras, al tener que compensar menores pensiones con un mayor aporte del pilar solidario; y lo segundo, la posibilidad de que altas rentas retiren el dinero y lo ocupen en APV, logrando dos beneficios tributarios simultáneos, pero las soluciones a ambas inquietudes son simples.
Para el primer punto, la solución es retrasar la edad de pensión y el ingreso al pilar solidario en al menos un año para quienes se acojan al segundo retiro, lo cual significa un ahorro compensatorio futuro para el Estado.
Para el segundo punto, la solución es dejar sin efecto cualquier beneficio tributario para quienes accedan al segundo retiro por dos o tres años tributarios, lo cual generará inmediatamente freno para las altas rentas.
El Gobierno está haciendo lo correcto de normar este segundo retiro, pero debe a la vez dejar normado para futuros retiros, pues claramente no será el último.
Eduardo Jerez Sanhueza