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serían uno o dos meses, pero no que sería tan largo, y tampoco sabemos hasta cuándo durará. Lamentablemente la gran mayoría de los basquetbolistas no tenemos contratos, entonces ni siquiera podemos recibir un seguro de cesantía, por eso estamos súper desprotegidos. No podemos recibir bonos, tampoco los que son con boletas de honorarios… siempre hay algo que deja desprotegido al jugador. Ahora obviamente yo soy súper agradecido de todo, pero si no fuera por mi vieja estaría sin apoyo", comentó el ex seleccionado.

Holt, quien es padre de dos hijos, dijo que no se podía quedar dormido esperando el retorno de la competencia, por lo que desde hace unos meses comenzó a trabajar en la venta de piezas de salmón de exportación y hace unas semanas agregó a su emprendimiento la venta de ceviche.

"Cuando estaba en Puerto Varas conocí a un amigo y ahí empecé a vender salmones. Le empecé a vender a Feestines, a Zbar, al Entre Amigos y todo esto antes de la pandemia. Después llegó la pandemia, pero nunca pensé que iba a durar tanto. Ahora simplemente lo retomé y le quise poner un valor agregado, así que estoy preparando ceviche, ya que antes lo vendía solamente por pieza", precisó el basquetbolista.

Detalló que entrega los salmones por kilo todos los días, "pero el ceviche lo quiero vender una o dos veces a la semana, ya que la idea es sumar de a poco, no estamos para perder", comentó el jugador osornino que ha defendido los colores de Español, Provincial Osorno y Osorno Básquetbol.

Dijo que su actual polola lo ayuda en este negocio, porque ha tenido que aprender a realizar las preparaciones. Precisó que las ventas de sus productos han sido positivas, no sólo por la calidad sino porque tiene muchos conocidos que lo apoyan, como su amigo Jorge Igor, quien tiene un local llamado "Popaltass" que le entrega este producto.

"Mi polola es la que empezó ayudándome. Uno a veces cree que se las sabe todas pero no es así y por lo mismo ella me ayuda. Mucha gente me conoce y eso me ayuda harto y seguiré en esto ya que falta mucho para que vuelva el básquetbol y no sabemos cómo va a ser. Todos creen que vamos a volver ganando lo mismo que antes y no es así, están equivocados", comentó.

Dijo que su retorno a la actividad también dependerá de cómo vaya su negocio, porque si recibe una oferta de algún elenco que es inferior a lo que ganando con su emprendimiento, no volverá a jugar, al menos que sea en su querido Osorno, donde podría compatibilizar ambas cosas.

"El básquetbol ya me demostró que de la noche a la mañana te dejan botado, o sea si yo no tuviera la familia que tengo estaría botado, entonces es difícil", remarcó el jugador.

Chocofruit

El jugador chileno- venezolano y seleccionado nacional, Juan Fontena (33 años), defendía la camiseta de Castro cuando de manera imprevista se dio fin a la Liga Nacional producto de la pandemia, aunque como tenía contrato se lo respetaron.

El ex ala-pívot de Osorno Básquetbol tiene un cariño especial por la ciudad, ya que acá está su hogar junto a su señora Carla Silva y sus dos pequeños hijos.

Precisamente su pareja creó en la comuna su negocio llamado de Chocofruit, emprendimiento donde ofrecen diferentes preparaciones en base a chocolate y frutillas.

"En un inicio, producto de la pandemia me tomé un descanso porque jamás pensamos que esto duraría tanto y, por lo mismo, me vino súper bien. El fin de semana siguiente que yo llegué acá nos fuimos a Pucón a pasar unos días en familia, ya que yo estaba en Chiloé entonces era difícil compartir. Estando en Pucón se suspendieron las clases, cerraron las fronteras y empezó a quedar el desastre", comentó.

Luego de un mes de vacaciones sin hacer absolutamente nada, sólo dedicado a su familia y la tienda, se puso a entrenar bajo la supervisión de un nutricionista, un preparador físico, pero se desilusionó a medida que la emergencia sanitaria se fue alargando.

"Ahora estoy entrenando, cuidando la alimentación y poniéndome de a poco a tono porque si Dios quiere deberían empezar los llamados. Ojalá sea pronto y podamos comenzar en enero, aunque lo veo bastante complejo", comentó Fontena, quien detalló que se levanta a las 5 de la madrugada para entrenar.

"Estoy entrando todos los días, me levanto a las 5 de la mañana porque es el único tiempo que tengo para entrenar tranquilo debido a que después tengo que dedicarme de lleno a la tienda. Hace poco tuvimos una guagüita, entonces mi esposa tiene que estar con ella y eso le quita muchísimo tiempo, así que ella de la casa gerenciando y yo en primera línea al mando de la tienda, haciendo todos los mandados, las entregas, de cabeza metido acá", recalcó.

Dijo que la tienda que arrendaban en Barros Arana la dejaron porque la dueña se las pidió, pero atienden en su local que se encuentra en el Pueblito Artesanal en Mackenna.

"Fue lamentable porque nosotros aguantamos toda la pandemia, la señora no nos rebajó ni un peso y le pagamos siempre al día. Luego, cuando ya venía la época de la frutilla, nos pidió el local y fue una puñalada por la espalda. Nos sentimos mal al principio porque fue nuestro primer local, pero no hay mal que por bien no venga. Ahora estamos habilitando otro local mucho más grande, estamos trabajando para una pronta inauguración. Por mientras tenemos una sala de ventas en el Pueblito Artesanal y mantuvimos vivos el local por lo que ahí vendemos frutillas con crema, tortas, entre otras preparaciones", explicó Fontena, quien comentó que los pueden ubicar en las redes sociales.

El espigado jugador añadió que su señora ha sido un pilar fundamental, porque el apoyo es mutuo y con mucho sacrificio han ido creciendo en su emprendimiento.

"Trabajar con fruta es complicado porque hay que levantarse muy temprano para buscar el producto, hay que saber seleccionar y almacenar para que dure, ya que no se puede congelar porque son naturales. Me entretengo haciendo las entregas, mucha gente me conoce del básquetbol y me saluda con cariño. Hay personas a las que les voy a realizar sus entregar y se terminan sacando fotos conmigo. El cariño del osornino siempre se mantiene y

"Cuando estaba en Puerto Varas conocí a un amigo y ahí empecé a vender salmones, todo esto antes de la pandemia. Pero debido a la situación que estamos viviendo lo retomé".

Julius Holt, Basquetbolista

"Estoy entrando todos los día a las 5 de la mañana porque es el único tiempo que tengo para entrenar tranquilo porque ya después tengo que dedicarme de lleno a la tienda".

Juan Fontena, Basquetbolista