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El Chile que necesitamos
Las elecciones de este domingo nos mostraron una bella y nueva cara en el camino de la democracia de nuestro país.
Si bien fuimos millones quienes nos expresamos personal, igualitaria, secreta y voluntariamente, nos faltó la otra mitad del país, esa mitad que hay que oír, entender el porque de su decisión y esforzarse por hacer participe.
Chile habló por el cambio y lo hizo de manera contundente. Pero es momento de que todos quienes formamos este país nos hagamos parte de que esta constitución sea tal como la calle y la ciudadanía la ha pedido.
Es momento de que construyamos juntos el Chile que necesitamos.
Juan Pablo Lira
Educación financiera
Estamos en octubre, mes de la educación financiera, y toca reflexionar acerca de las debilidades que existen en esta materia en nuestro país.
Según datos de la Comisión para el Mercado Financiero, Chile es el país con el mayor nivel de bancarización de Latinoamérica, con 12 millones 400 mil tarjetas de crédito vigentes. Sin embargo, de acuerdo al informe "Comparación social y decisiones de endeudamiento: evidencia para Chile", publicado por la Dirección de Presupuestos del Ministerio de Hacienda en junio de este año, a 2016 "sólo el 6,2% de una muestra representativa de la Región Metropolitana respondió correctamente tres preguntas relacionadas con conocimiento financiero, lo que está muy por debajo de economías como Australia (42,7%) y Nueva Zelanda (24,0%)".
Resulta preocupante que la mayoría de la gente sienta que no tiene nociones básicas para evaluar instrumentos de ahorro e invertir responsablemente sus recursos. Hoy en día ahorrar e invertir son actividades que se han vuelto más accesibles gracias a tecnologías digitales y de uso de algoritmos que podemos usar sin ser expertos en finanzas. Pero nada de eso sirve si la persona no tiene acceso a información básica sobre cómo funciona el sistema financiero y los actores que lo componen.
Nuestra tarea pendiente para 2021 debería ser sentirnos más seguros de que una mayor educación financiera puede ayudarnos a tomar mejores decisiones, con el fin último de cumplir con nuestros objetivos, ya sean ahorrar para una mejor pensión, obtener una propiedad o el que cada uno prefiera.
Rafael Donoso
Aristóteles y la Constitución
En la hora presente, convendría tener en cuenta la sabiduría antigua.
La constitución ateniense fue escrita por Aristóteles con la ayuda de sus discípulos. Para tal fin, tuvo en cuenta 178 constituciones. Realizaron un estudio histórico y comparado que les llevó nueve años.
¿Los nuevos sofistas quieren hacer algo semejante en sólo dos años?
El viejo y sabio Aristóteles enseñaba en el libro VIII de la Ética (que trata de la felicidad, la justicia, la amistad, etc): "El buscar en toda la utilidad conviene muy poco a las personas magnánimas y libres".
Al final, parece que nuestra crisis consiste en la disyuntiva entre la demagogia utilitarista o la libertad responsable, característica fontanal de los auténticos ciudadanos. Dr. Juan Carlos Aguilera, doctorado en Filosofía y Letras
Ahorro de energíaHistóricamente el consumo de energía ha estado relacionado con un alto costo tanto para el bolsillo como para el planeta, debido a los procesos que hay detrás de su generación y a la alta huella de carbono emitida por algunas fuentes.
Imposible olvidar la política nacional de racionamiento eléctrico impulsada en 1998 por el Gobierno para mitigar los efectos de la sequía y que quedó marcado como uno de los capítulos más álgidos.
Hoy la realidad es muy distinta y Chile ha dado pasos importantes hacia la independencia energética, potenciando cada vez más el uso de energías limpias, basadas en fuentes inagotables como el sol y el viento. Solo en septiembre, la capacidad instalada de la energía fotovoltaica alcanzó el 12,7% de participación en la matriz.
La oportunidad que nos entregan estas fuentes es tan importante, que dejaron de ser uso exclusivo de ciertas industrias y lugares distantes de la matriz, sino que las tenemos cada vez más cerca de nuestras principales ciudades e inyectan energía verde directamente a las zonas de mayor demanda.
Se trata de parques solares pequeños, versátiles y que no requieren de grandes líneas de transmisión para comenzar a operar y que están cambiando para siempre la forma de crear energía en nuestro país.
Víctor Opazo Carvallo